El Instituto Internacional de Conservación de la Vida Silvestres (ICOMVIS) y el Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible (CINPE) órganos pertenecientes a la Universidad Nacional (UNA) exigieron al CONAVI y MOPT, cumplir con la resolución dada por la Sala Constitucional de construir los pasos para la fauna que hacen falta, en el proyecto de ampliación de la Ruta Nacional número 32, San José-Limón. 

El caso se remonta a noviembre del año anterior cuando los trabajos de ampliación sobre la vía hacía Limón se vieron envueltos en una polémica, ya que en el 2018 CONAVI se comprometió a realizar la construcción de los pasos de fauna y hasta el momento no se ha realizado ningún avance.

Por ello el pasado 22 de enero, la Sala Constitucional emitió la resolución número 2021001189 que dio por probado que el CONAVI "ha contrariado los principios y obligaciones ambientales de conformidad con lo indicado en el considerando precedente", al tiempo que señaló que se ha incumplido con la resolución No. 2207- 2016-SETENA (la que le dio la viabilidad ambiental al proyecto) que contemplaba la construcción de cincuenta y un pasos de fauna.

Así, los magistrados dieron tres meses al CONAVI para que se construyan los pasos para fauna que hacen falta, pues dejaron la responsabilidad de éstos en sus manos, una solicitud que fue replicada este martes por los órganos de la universidad pública herediana.

En un documento enviado a la prensa, órganos de la UNA manifestaron que los pasos son urgentes debido a que su ausencia está provocando el atropello y muerte constante de animales en carretera, lo cual "tiene impactos éticos, ecológicos, sociales y económicos negativos para nuestra sociedad y el ambiente".

SETENA ha compelido la observancia de los compromisos en materia ambiental, lo que incluye la respectiva construcción y habilitación de los pasos de fauna. Otro aspecto es que según cifras oficiales entre los años 2014 y 2018 muchos animales salvajes han sido atropellados en la ruta 32, muchas son especies catalogadas en peligro de extinción esto disminuiría al ampliarla la carreta a cuatro carriles".

Además, la UNA señaló que el incumplimiento a esta recomendación tiene un impacto ético negativo por parte de la institución, pues en determinado momento se aceptó la obligación de cumplir con los valores positivos a favor de las especies de fauna silvestre, lo que afecta la imagen del país internacionalmente:

El impacto social negativo de la muerte de animales afecta la imagen del país cuando los turistas que nos visitan observan muchos animales muertos, incluso en áreas silvestres protegidas".

A su vez reclamaron un impacto ecológico en la carretera que aísla las poblaciones de fauna, impidiendo o dificultando el intercambio genético entre individuos, lo cual se traduce en reducción en sus poblaciones, especialmente de especies amenazadas de extinción.

Por otro lado, la UNA señaló que esta situación presenta un impacto económico que implica que por un lado no solo se pierda la vida de los animales que cruzan la carretera, sino que si se avanza con la carretera, esta terminará por tener que romperse para cumplir en el futuro, lo que implica pérdidas monetarias para las partes.

Por ello estos órganos recomendaron al CONAVI y el MOPT que cumplan de inmediato con el mandato de la Sala Constitucional de construir la carretera y habiliten los pasos de fauna "con el adecuado respeto a la protección ambiental que debe brindarse, aunque se deba entrar en un diálogo y negociación con la empresa constructora (CHEC) para cumplir con los requisitos de la obra".