Los pasos de fauna en la ampliación de la ruta nacional número 32, carretera Braulio Carrillo, están levantando la polémica en los últimos meses de trabajos sobre la vía hacia Limón.

Como les comentábamos semanas atrás, a mediados de noviembre el abogado Wálter Brenes Soto interpuso un recurso de amparo contra el Consejo Nacional de Vialidad (CONAVI), acusándoles de ignorar el compromiso de realizar pasos para fauna en el proyecto de ampliación de la Ruta 32 que fue anunciado con bombos y platillos en 2018.

El mencionado recurso señala que CONAVI se había comprometido a realizar la construcción de una serie de pasos de fauna en el proyecto de diseño, rehabilitación y ampliación de ruta nacional número 32, pero que a la fecha de interposición del amparo y a poco menos de 4 meses de que concluya el plazo de construcción de la obra (que está para entregarse en marzo 2021), dicha institución no contaba aún con el presupuesto para dicha construcción.

En la acción Brenes indicó además que el CONAVI ha señalado no contar con el presupuesto para la construcción de esos pasos que permitirían proteger la fauna del parque nacional Braulio Carillo pese a que, como se indicó, fueron anunciados como parte del “compromiso ambiental del país en materia vial”, según dijo el entonces ministro de Transportes, German Valverde González.

Esa es, de hecho, la misma razón que expone la empresa china CHEC, encargada de la obra, al ser consultada por el recurso interpuesto por Brenes y por la acusación de que no se avanza como se debiera en los pasos de fauna.

Según indicó su agencia de prensa a este medio, la empresa constructora sostiene que:

Los pasos de fauna no están incluidos en el alcance inicial de trabajo que CHEC cotizó a la administración para el proyecto de ampliación de la ruta 32, por lo que la responsabilidad de la construcción de los mismos no corresponde a CHEC. En CHEC tenemos la anuencia y estamos listos para construirlos en cuanto el gobierno nos confirme que se cuenta con el presupuesto adicional para estos trabajos".

El tema, sin embargo, es que esa no es la postura del CONAVI, pues según señaló la institución a la Sala Constitucional, dichos pasos sí estarían contemplados en el avance inicial y ahí es donde arranca todo este embrollo que podría ir a parar incluso a tribunales.

Polémica radica en fechas de definición de pasos

El viernes 20 de noviembre anterior la Sala Constitucional solicitó, mediante el expediente N°20-020651-0007-CO, que se le diese audiencia a la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (SETENA) y al Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) para que rindiesen cuenta sobre la acusación del recurrente.

Según dicho documento, del que este medio tiene copia, se detalla que la Dirección Ejecutiva del CONAVI ya había emitido su respuesta al ente constitucional, señalando que el proyecto de ampliación de la ruta sí incluiría los pasos.

De hecho, CONAVI argumentó que aún no se ha culminado la obra y que por eso "no es de recibo" que el recurso de Brenes afirme que no se han realizado los pasos de fauna "dado que se han realizado 11 pasos de fauna, 8 están por construir y 8  presentan dificultades constructivas, para los cuales se analizan otras alternativas".

El Consejo además señaló que, contrario a lo que dice el recurrente, sí se cuenta con el presupuesto para realizar los pasos de fauna porque según CONAVI, eso le toca a CHEC.

Para ello la Dirección citó ante la Sala el oficio UE-DRA-RN32-010-2020-2030 (561) de octubre 2020, en el que la propia Unidad  Ejecutora del proyecto sostuvo que este "el proyecto fue pactado a 'suma alzada' (es decir, que el constructor se compromete a entregar la obra completamente finalizada) y por dicho concepto la empresa contratista debe en principio ejecutar todas las obras propias del proyecto", lo que incluye dichos pasos de fauna.

El documento de la Unidad Ejecutora agrega además, que el trámite de la viabilidad ambiental incluía estos pasos como mecanismo de mitigación ambiental "mismos que se originaron en el Estudio de Impacto Ambiental elaborado a solicitud de la empresa CHEC y que fue debidamente aprobado bajo la Viabilidad Ambiental del proyecto con la Resolución 2207-2016- SETENA del 02 de diciembre del 2016", por lo que también en el ala ambiental se estaría exigiendo dicha construcción.

¿De dónde surge la controversia de si los pasos de fauna están contemplados o no? Pues según el documento enviado por el CONAVI a la Sala, de que el número y las condiciones de estos pasos surgieron de un estudio de impacto ambiental que se elaboró a solicitud de CHEC y que luego fue aprobado por SETENA, en fechas posteriores a que la empresa contratista presentase su oferta a la Administración.

Esto fue lo que motivó que actualmente se esté en "proceso de resolver una controversia entre las partes contratantes a efecto de determinar  si la construcción de los pasos de fauna están o no incluidos dentro del alcance del  proyecto", tal como sostiene CHEC.

Así las cosas, el tema es complicado pues, según amplía CONAVI a la Sala:

De determinarse por las partes o un Tribunal Arbitral que las obras están incluidas dentro del alcance del proyecto, corresponderá a la empresa  contratista CHEC la construcción de esas obras. Caso contrario, de determinarse que los pasos de fauna no están en el contrato original, corresponderá a la  Administración su construcción y los recursos para ello, podrían provenir de los  más de nueve millones de dólares cuya devolución esta Unidad Ejecutora ha  requerido al Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados".

Polémica 2.0: ¿usar alcantarillas?

En el texto anteriormente citado a la Sala Constitucional, el CONAVI  "como desarrollador del proyecto asume la responsabilidad de cumplir con lo establecido  en la resolución de viabilidad ambiental No. 2207-2016-SETENA", lo que quiere decir que en caso de que se determine que la definición de los pasos eran posteriores al alcance de la obra, será el Consejo quien tenga que construirlos.

Para ello y desde ya, las autoridades viales han barajado varias nuevas opciones y es aquí donde entra el AyA con opciones que tampoco han sido bien recibidas por el sector ambiental que tiene el ojo puesto en la zona.

Según confirmó a Delfino.cr el Director Ejecutivo del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), Rafael Gutiérrez Rojas, una de las opciones que se ha puesto sobre la mesa, sería la de usar y adaptar las propias alcantarillas del AyA como pasos de fauna pero esta opción también representa una complicación, ya que no todos los animales las aceptan ni son aptas para todos.

Por ello es que en este punto es necesario que entre el SINAC y sus Direcciones Regionales de las Áreas de Conservación Tortuguero (ACTo) y de La Amistad Caribe (ACLA-C) se defina si esta u otra medida implementada funcionaría, en caso de que sea el Estado costarricense el que tenga que hacerse cargo de este tema.

Según sostuvo Rojas, este proceso ya arrancó y de momento se están barajando las posibles opciones para ver qué hacer, en caso de que CHEC se libre de esa construcción:

La relación contractual que tenemos entre CONAVI y nosotros es que dentro del diseño quedaron definidos pasos de fauna para la ruta y de esos pasos, si bien es cierto que en estos momentos no se están construyendo, hay 8 que ya están por construirse y están dentro del cronograma de construcción de la ruta. Hay otros que tienen dificultades constructivas y para ellos se está analizando de manera conjunta con las direcciones regionales, para definir las alternativas viables para que se vayan a construir. En este momento las alternativas no están definidas, estamos en un proceso de negociación porque nosotros, desde el punto de vista técnico, tenemos que definir cuáles son las condiciones para que los animales las puedan utilizar".

Rojas señaló, por ejemplo, que si bien sí se ha hablado de un eventual uso de alcantarillado para este fin, "es prematuro" afirmar de si se van a aceptar como opción viable o no, puesto que por un tema tema técnico se debe considerar si es una opción viable o no para las especies de la zona.

Los pasos de fauna difieren de acuerdo a las especies que nosotros estemos indicando. Hay muchas especies que son más arborícolas y que son las que tienen bastantes problemas con los cruces de carretera porque no son especies que tengan una fuerte movilidad sobre el terreno y a esas hay que buscarles alternativas; hay otras especies que sí utilizan los pasos subterráneos, como algunos felinos, a los que sí les gusta utilizar pasos como estos. Entonces dentro de las alternativas, nosotros analizamos esas variables para determinar el tema de las especies y para cada caso tenemos que hacer nosotros el análisis técnico y emitir nosotros la recomendación".

Con reloj en contra: especies enfrentan falta de paso

Así las cosas y como se puede apreciar, el panorama es muy complicado y está a la espera de que entre que CHEC y el CONAVI definan si a la empresa china le toca o no hacer los pasos a de fauna y de que el CONAVI y el SINAC definan qué opciones alternas utilizar, en caso de que sea al Estado a quien le toque asumir esa construcción.

¿Qué es lo que pasa, mientras tanto, con las especies en la zona?

Pues a mediados del mes de noviembre anterior, la coordinadora de la organización Comisión Vías y Vida Silvestre, María Elena Fournier Solano, envió un oficio a la dirección del Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE), a la del SINAC, a la jefatura del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) y a la del Proyecto Ruta 32-CONAVI-MOPT-CHEC, en la que denunció que en menos de 15 días se habían presentado 5 muertes de manigordos en la Ruta 32.

El documento, del que este medio tiene copia, señala que:

En estos quince días han sido atropellados y muertos 5 (cinco) manigordos entre Pocora y la recta de Parismina. Urge la construcción de los pasos de fauna subterráneos como aéreos, señalización, rotulaciones y muchas cámaras de control de velocidad, como acciones preventivas para evitar más muertes innecesarias".

Esta información fue corroborada por Lidieth Vega, activista miembro de los corredores biológicos del río Parismina y del Paso del Jaguar en la zona, quien confirmó a Delfino.cr la afectación que se vive en los ecosistemas cercanos a la vía, mientras aquí en San José los involucrados siguen tratando de ponerse de acuerdo para ver qué hacer con el tema.

Según Vega:

Nosotros aquí vemos animales muertos constantemente. No es un secreto para nadie que la Ruta 32 cruza justo un trópico húmedo, con naturaleza a lo largo de toda la carretera. Solo frente a la Universidad Earth (ubicada en Guácimo) ya hemos contado a cinco manigordos que han quedado tirados en la calle y a los que hay que sumar osos perezosos, osos hormigueros y pizotes, entre mucha otra variedad de fauna que queda ahí a las orillas de la calle y que reflejan por qué es tan importante que se construyan estos pasos de fauna".

Para la activista "no es posible que a estas alturas no hayamos definido qué hacer con esto", al tiempo que agregó que los miembros de los corredores biológicos vecinos a la vía ya han tratado de contactar a la empresa CHEC y también a sus encargados de atender la protección de la biodiversidad en la zona, pero "ellos simple y sencillamente se negaron a atendernos o a respondernos por escrito, porque no se quieren reunir con nosotros".