El 4 de agosto de 2020 un grupo de 81 funcionarios de la Defensoría de los Habitantes envió una carta al entonces presidente de la Asamblea Legislativa, Eduardo Cruickshank Smith, solicitando que se abriese una investigación contra la defensora de los Habitantes, Catalina Crespo Sancho, por la decisión que tomó en ese momento de reformar las funciones y conformación del Consejo Directivo de esa institución.

El escrito, además, solicitaba la renuncia de la jerarca del puesto que asumió en el 2018.

Hoy, dos años después, parte de ese grupo de funcionarios denuncia una persecución laboral y sindical en su contra, perpetrada por la defensora como una posible "venganza" por la oposición a su accionar dentro de la institución.

Así lo señaló este jueves el director de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Juventud y secretario general del sindicato de la institución, Álvaro Paniagua Núñez, quien señaló a Delfino.cr que:

No entendemos qué es lo que motiva a doña Catalina a hacer todas las cosas que hace sin ningún fundamento técnico. Ella está haciéndole un daño enorme a toda la institución. Aquí hay un denominador común que es que todos los que hemos sufrido alguna de estas cosas fuimos los que en algún momento firmamos la carta solicitándole a ella que renunciara. Todos. Es como que ella tiene una lista y le va haciendo check, check, check, check, check hasta que no quede ni uno solo. Ella no va a descansar".

Paniagua es uno de los funcionarios de la institución que ha sido denunciado penalmente por Crespo en las últimas semanas, debido a supuestas irregularidades en sus labores.

El jerarca, en conjunto con Marjorie Herrera Castro, quien se desempeña actualmente en la Dirección de Igualdad y No Discriminación, fue denunciado por una queja que llegó a la dirección de la Defensoría de parte de un grupo de personas indígenas que señaló que son discriminados por estos dos funcionarios, en el manejo de las recuperaciones de los territorios de estas zonas.

Paniagua, sin embargo, señala que ese tema ya está aclarado y acusa que no ha sido notificado sobre la denuncia, si no que se dio cuenta de la causa por una publicación en Diario Extra.

La defensora mantiene una enorme persecución contra nosotros a lo interno. Por eso la tenemos demandada en el Ministerio de Trabajo por persecución sindical. Aquí hay persecución laboral y persecución sindical y por eso claro, ella sabe que yo soy el secretario general del sindicato y entonces le queda muy fácil venir y en lugar de abrirme un procedimiento interno aquí, que es lo que corresponde, ella lo que hace es recibir una queja de unos habitantes y dice que entonces su deber es interponerla en el Ministerio Público. Lo único que sabemos es lo que dice la foto que apareció en el diario La Extra, donde está el recibido conforme y el nombre de ella, pero ella nunca nos dijo nada ni nos pidió un informe sobre situación, simplemente se fue y nos denunció en el Ministerio Público".

Además de su causa, la defensora interpuso otras en contra de Kattia Rodríguez Araica y de Hernán Rojas Angulo, directora de Niñez y jefe de Recursos Humanos, respectivamente.

Ellos están denunciados por presuntas irregularidades en el nombramiento de una persona que realizó una incapacidad en la institución y "eso lo sabemos más porque el diario La Extra, por lo visto, sí tuvo acceso a la denuncia y entonces hizo un detalle del caso", según Paniagua.

A su vez, la directora jurídica de la institución, Catalina Delgado Agüero, también fue denunciada mientras está cumpliendo un permiso sin goce de salario que sacó por motivos de salud, debido a que ella firmó el acuerdo en que los directores le pidieron la renuncia a Crespo.

Como ella era en ese momento la directora jurídica, la defensora consideró que Delgado cometió un abuso de autoridad y se excedió en sus funciones pero la directora jurídica no es la abogada de la defensora, su función es otra", sostuvo Paniagua.

Para el funcionario, las denuncias de Crespo son injustificadas y por eso señala que ni la propia defensora tiene pruebas suficientes, pues asegura que las denuncias lo que piden es que se investigue si existió o no delito, cuando "uno debería recurrir al Ministerio Público solo cuando tiene prácticamente la certeza de que hubo un delito":

Aquí no hay ninguna investigación sino que de una vez se fue al Ministerio Público. Por eso nosotros, desde el sindicato, podemos decirlo con la total certeza: ella sabe que esas denuncias que está interponiendo contra nosotros no van hacia ningún lado y simplemente es un amedrentamiento difamatorio que es parte de la de las estrategias de desacreditación y de persecución laboral contra las personas que somos parte del sindicato".

Paniagua también señaló que parte de esa persecución es la movida de puestos que ha ordenado Crespo dentro de la Defensoría, en la que se transfirieron a los directores de la institución de un lugar para otro "como si fueran chapitas o como si fueran este el jueguito sillas, sin ningún otro técnico y sin ningún estudio que lo justifique".

El jerarca aseguró que los funcionarios han tratado de abrir espacios de diálogo con la defensora en infinidad de ocasiones porque "este no es un asunto personal, no es porque ella sea Catalina Crespo, aquí no hay nada personal contra ella", pero que no ha habido apertura para lograr disminuir la tensión en la institución.

Por eso nos resulta sorprendente todo esto porque no sabemos realmente qué es lo que la mueve.... Estamos hablando de tres denuncias penales contra 3 directores, el jefe de Recursos Humanos y una funcionaria, todas por incumplimiento de deberes y abuso de autoridad. Sin debido proceso ni ningún indicio comprobado de delito, interpuestas para que sea el Ministerio Público el que investigue si hay algún delito. Incluido entre tales el secretario general del sindicato. Todos firmamos la carta instándola a que renunciara. Y 10 traslados de puestos, entre los que se incluyen 3 miembros de la junta directiva del sindicato, con la clara intención persecutoria de perjudicarlos y de desmovilizarlos.

El pasado 21 de junio, Crespo Sancho comunicó al Congreso que no se postulará para mantenerse en ese cargo durante un nuevo periodo, por lo que su salida de la institución está programada para el próximo mes de diciembre.