Hoy 1 de diciembre, como cada año, el mundo conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) y su enfermedad asociada, el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA).

Por ello este martes autoridades sanitarias y grupos activistas hicieron un llamado a la prevención y al uso correcto del preservativo para combatir este virus que, a pesar de ser prevenible, solo en el 2019 registró un total de 10.676 casos en las unidades médicas de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS).

Dato D+: En total en el país, según datos del Ministerio de Salud, en 2019 se registraron 1218 nuevos casos de VIH, de los cuales 1050 fueron en hombres y 41 en mujeres.

Según el seguro social costarricense, el aumento de casos ronda el 11% anual y por eso los especialistas reforzaron el mensaje de que si bien el discurso de cada año siempre es el mismo (prevenir, prevenir y prevenir), no por esto la importancia de este deja de estar latente.

Así lo expresó la portavoz en el tema de la Asociación Demográfica Costarricense (una organización no gubernamental que desde hace años trabaja en prevención y lucha contra el contagio del VIH en el país), Yadira Martínez López a Delfino.cr este martes, cuando nos señaló que:

Desde mi experiencia trabajando con VIH, que son ya casi 25 años, siempre trabajamos lo mismo y a veces uno se siente como cansado porque repetís y repetís lo mismo y como que la gente dice que ya lo sabe todo pero no lo lleva a la práctica. Aún no hay uso correcto del condón ni prevención de las otras enfermedades de transmisión sexual. A veces nos dicen, 'eso yo ya lo sé, díganme algo nuevo' pero aquí no hay nada nuevo: lo nuevo es que todos los días hay casos nuevos de VIH y ¿por qué? porque aunque se enseñen todos los modos y todas las maneras, las personas no lo implementan al 100% en su vida diaria".

En esta misma línea fue hacia donde la Caja dirigió su mensaje de este martes y por ello la institución, de la mano del doctor Mauricio Mora Diaz, infectólogo del hospital Maximiliano Peralta, señaló que el preservativo sigue siendo "el método eficaz y barato que está al alcance de todas las personas, para prevenir este mal".

Este martes, tanto Mora como el doctor Antonio Solano, jefe de infectología del hospital Rafael Calderón Guardia, aseguraron que la prevención está en las manos de todas las personas y ya no solo para protegerse a sí mismo, si no también para proteger a aquellas con quienes se mantienen relaciones sexuales, por lo que reiteraron el llamado para que tanto mujeres como hombres exijan a sus parejas sexuales el uso de esta barrera.

Indetectable = intransmisible

Echemos un segundo para atrás y dejemos algo en claro antes de continuar: el VIH y el SIDA no son lo mismo.

Así lo detalló la sexóloga, Marianela Arias Lamicq, en una comunicación enviada por la empresa de condones Durex a la prensa este martes:

Son dos cosas totalmente diferentes: el VIH es el virus que ingresa al cuerpo y cualquier persona con tratamiento antirretroviral puede vivir con VIH sin ningún problema; sin embargo, si no se lleva un tratamiento y si no se tiene adherencia al mismo, entonces cualquier enfermedad puede ingresar al cuerpo que obviamente no tiene defensas y es ahí donde hablamos del SIDA que en sí, es la enfermedad".

Esta diferencia es sumamente importante que se tenga en claro, pues según recordó la Caja este martes, la infección del VIH es controlable si se diagnostica de forma temprana y por ello es preferible que las personas no esperen a tener síntomas para realizarse la respectiva prueba, ya que "con un diagnóstico temprano se reduce además el internamiento en los hospitales y se mejora la calidad de vida".

Según la autoridad sanitaria costarricense, mantener en control la enfermedad, ser puntuales con la terapia, y no fallar con la dosis, permite que la carga viral en la sangre del paciente sea indetectable y que por tanto, la persona pueda desarrollar su vida con normalidad, sin el miedo de transmitir la enfermedad, lo que significa un punto importantísimo que también es necesario recordar, no solo cada año, si no cada día: el VIH puede llegar a ser intransmisible en una persona que lleve su tratamiento al día.

Así lo amplía también la agencia especializada de Naciones Unidas en la atención de este tema, ONU-SIDA, que desde hace un par de años está trabajando en el posicionamiento de que "Indetectable = intransmisible", como mecanismo para erradicar la discriminación en aquellos sectores que viven con el virus.

Según señala ONU-SIDA:

Si las pruebas de los últimos 20 años ya demostraban que el tratamiento del VIH es sumamente efectivo para reducir la transmisión del VIH, ahora hay evidencias contundentes de que las personas que viven con el VIH con una carga viral indetectable no pueden transmitir el VIH mediante el intercambio sexual. Entre 2007 y 2016 se llevaron a cabo tres amplios estudios sobre la transmisión sexual del VIH entre miles de parejas en las que uno de los componentes vivía con el VIH y el otro no. En dichos estudios no se produjo ni un solo caso de transmisión sexual del VIH de una persona que viviera con el VIH con supresión vírica a su pareja seronegativa".

Este avance científico es sumamente importante pues según ONU-SIDA:

Para muchas personas que viven con el VIH, la noticia de que ya no pueden transmitir el VIH les ha cambiado la vida. Además de poder elegir entre tener relaciones sexuales con o sin preservativo, muchas personas que viven con el VIH y tiene supresión vírica se sienten liberadas del estigma que conlleva vivir con el virus. Saber que ya no pueden transmitir el VIH en sus relaciones sexuales puede facilitar que muchas personas que viven con el VIH se sientan firmemente comprometidas con la prevención a la hora de abordar sus relaciones presentes o futuras".

Ahora bien ¿cómo se mantiene la carga viral en un nivel tan bajo que no sea ni detectable ni transmisible? Pues con tratamiento adecuado y por ello es tan importante que las personas que sean conscientes de haber incurrido en prácticas sexuales de riesgo, se realicen la prueba a tiempo y se pongan en control de manera temprana.

¿Dónde realizarse la prueba?

Según las autoridades de la Caja, es importante que las personas sexualmente activas se realicen una prueba de serología por VIH, al menos una vez al año, mientras que en el caso de las personas que mantienen relaciones sexuales con varias parejas al año, se la deben realizar cada tres meses.

Esta es una prueba que se puede solicitar en el área de salud correspondiente y al respecto, Martínez nos amplió que el programa VIH/SIDA de la Caja, habilitó en las clínicas Moreno Cañas y Central, en San José, y en los hospitales de Heredia y Alajuela, la posibilidad de que toda persona que necesite hacerse la prueba, pueda hacerlo de manera totalmente gratuita, sin necesidad de seguro.

Los resultados de estos exámenes se entregan, dependiendo de la cantidad de pruebas en fila, a los 2 o 3 días de realizado el procedimiento y, de ser el resultado positivo, la persona será atendida por personal de Trabajo Social quien se encargará de la contención inicial, antes de enviar una referencia al hospital que le corresponda al paciente, según su área de atención.

En esta atención médica hospitalaria, se realizarán exámenes al paciente para determinar su estado de salud general y también su carga viral, antes de iniciar el tratamiento antirretroviral recomendado que deberá seguirse al pie de la letra.

Poblaciones más vulnerables ante la enfermedad

Es muy importante agregar también que el artículo 7 de la Ley General del VIH, reforma aprobada el año anterior, señala que "todo portador del VIH-SIDA tiene derecho a asistencia médico-quirúrgica, psicológica y de consejería; además, a todo tratamiento que le garantice aminorar su padecimiento y aliviar, en la medida de lo posible, las complicaciones originadas por la enfermedad", por lo que aún una persona que no tenga seguro de salud, podrá acceder a tratamiento para tratar su enfermedad.

Este es todo un tema, pues según señalaba Martinez, que trabajó en centros hospitalarios en atención de pacientes con VIH y tiene contactos con diferentes personas enfocadas directamente en trabajar este tema, la pandemia ha tenido un efecto directo en la empleabilidad de muchísimas personas, incluyendo pacientes con el virus, lo que ha desencadenado un aumento en el desempleo en este sector para quienes quedarse sin seguro y sin tratamiento, no es una opción.

Según la especialista:

Las personas con VIH tienen derecho a solicitar el seguro con el Estado y esa solicitud se realiza en el área de salud que les corresponde, sea una clínica o un Ebais; ahí se expone el caso y se lleva de referencia la ley 7771 que señala que no se puede quitar el tratamiento a una persona (el artículo 7) y una vez que se accede al seguro por el Estado, la atención continúa".

Un tema similar pero quizá un poco más complejo, es el que afrontan las personas extranjeras que ingresan al país ya sea buscando refugio o durante su nada corto proceso de solicitud de residencia formal y que portan el virus.

Para ellas, es que, según Martinez, se implementa el convenio entre la Caja Costarricense del Seguro Social y la sede del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en nuestro país, a fin de que estas poblaciones no queden a la deriva mientras se regulariza su situación migratoria:

Cuando la persona es extranjera, que son la mayoría de los casos que hemos estado atendiendo, hay un convenio entre ACNUR y la Caja en el que ACNUR les ayuda con la solicitud de refugio, dependiendo de las condiciones que tenga la persona extranjera, y les paga un año de aseguramiento ante el seguro social para que sean atendidos por la COVID-19, por el VIH y por cualquier otro padecimiento. No se puede dejar a las personas sin recibir su tratamiento pero para ello el país pide que éstas tengan su documentación al día; sin embargo, como eran muchas las personas con VIH que huían de sus países, se desarrollo este convenio, por lo menos mientras se estabilizan en el país".

El reto sigue siendo la atención a las personas extranjeras. Estas son personas muy vulnerables y a la hora de aplicar el derecho, el trámite es muy difícil por toda la documentación que se pide y el trámite engorroso que conlleva, lo que retrasa hasta un año el acceso al trabajo y por tanto, el acceso al seguro y eso ha sido un atraso en esta lucha".

Los retos en estas y otras poblaciones, sin embargo, continúan y Martinez hace especial énfasis en las personas en condición de calle y también en quienes son usuarias de drogas, donde "todavía quedan huecos de acceso" que quedan pendientes de subsanar.

No hay una atención integral ni especializada en estos temas. Hay un par de organizaciones que trabajan el tema de la reducción del impacto pero no se ha logrado tener el apoyo de la Caja para lograr un verdadero impacto porque todavía hay mucha discriminación y mucha violación de derechos humanos en estos sectores. Estos organismos han tenido que trabajar con uñas con una población que es muy difícil de trabajar porque hasta los mismos albergues suelen tener políticas muy restrictivas. Todavía falta mucho por este lado".

VIH en datos

Aunque entre 2000 y 2019 las infecciones por VIH disminuyeron en 39% en el mundo, en Costa Rica como les decíamos más arriba, el aumento de casos ronda el 11 % anual, lo que pone el ojo en la situación país sobre el tema.

La Caja detalló en una comunicación enviada a la prensa este martes, que:

Según datos del Ministerio de Salud, en el período 2014-2018, se registraron 3 895 nuevos diagnósticos de VIH con una tasa para el período de 15,9 casos por 100 000 habitantes.  Las tasas de nuevos diagnósticos se han incrementado un 26,4 %, si se comparan los años 2014 (15,5 casos por 100.000 habitantes), y el 2017 (19,6 casos por 100.000 habitantes), debido al fortalecimiento de la prevención y al aumento en la demanda en la prueba de VIH".

En ese mismo período (2014-2018) las provincias de San José y Alajuela presentaron la mayor incidencia de VIH por 100 000 habitantes de 24,4 y 11,7 respectivamente. Ambas provincias aportan el 65% de los casos de país.

Los cantones con las tasas más altas de nuevos diagnósticos por 100 000 habitantes fueron: San José (52,0), Montes de Oca (36,3), Limón (25,2), Heredia (23,6), Desamparados (20,9), Goicoechea (22,6), Tibás (19,9), Curridabat (17,1) y La Unión (19,1), aportando el 49,4 % de los casos del país.

Según datos de la institución, el 83 % de las personas atendidas por este virus son hombres y el rango que tiene más registros de casos es el de 20 a 44 años; sin embargo, la población más afectada por esta enfermedad crónica es de 20 a 29 años.

La CCSS cuenta con siete clínicas especializadas para atender a estos pacientes en los hospitales México, Rafael Ángel Calderón Guardia, San Juan de Dios, Maximiliano Peralta Jiménez, San Rafael, Monseñor Sanabria Martínez y Nacional de Niños.