Primer proyecto de vivienda en Costa Rica que incorpora un enfoque social integral.
Las 212 familias del proyecto de vivienda social La Bendición, en Barranca de Puntarenas, comenzaron a participar en un programa de capacitación diseñado para promover su desarrollo integral. Este esfuerzo forma parte de la "variable social", un concepto impulsado por el Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi) para fomentar comunidades organizadas, con habilidades para una convivencia pacífica y activa en sus nuevos hogares.
El proyecto habitacional, con una inversión de más de 6 mil millones de colones del Banco Hipotecario, tiene el objetivo de dotar a las familias de viviendas dignas, seguras y con acceso a servicios esenciales. Pero, más allá de la infraestructura, se incorporó esta variable social que busca promover el crecimiento comunal y humano, brindando a las familias herramientas de organización y cuidado de su entorno. Según el Banhvi, los talleres incluyen temas como normas de convivencia, respeto entre vecinos y métodos para la resolución de conflictos y el fortalecimiento de la comunidad.
La implementación de la variable social marca una evolución en los proyectos habitacionales del Banhvi, y forma parte del marco normativo aprobado recientemente en el Reglamento de la Variable Social. La regulación establece los lineamientos para un acompañamiento social que se brindará a las familias de todos los proyectos de vivienda aprobados por la institución.
El gerente general de Banhvi, Dagoberto Hidalgo Cortés, subrayó la importancia de este acompañamiento para las familias:
"Si bien ya se da acompañamiento a las familias en todo el proceso hasta la obtención de la vivienda, ahora un gestor social se encargará de apoyar a las familias y dotarlas de herramientas que les permitan una adecuada convivencia y organización comunal".
Este nuevo enfoque social se integrará al análisis técnico, financiero y legal que tradicionalmente realiza el Banco en los proyectos habitacionales, sumando el trabajo de un equipo de gestores sociales. Estos gestores deberán ser profesionales en áreas como psicología, trabajo social, sociología, antropología o planificación económica y social, y deberán contar con conocimientos y experiencia en el trabajo comunitario y metodologías participativas.
La iniciativa no solo busca capacitar a las familias en sus nuevos roles dentro de la comunidad, sino que también fomenta la creación de estructuras de gobernanza comunitaria, tales como consejos vecinales, juntas de vecinos y comités comunitarios. Estas agrupaciones estarán a cargo de identificar necesidades y gestionar proyectos que beneficien a la comunidad, especialmente en temas de convivencia, uso pacífico de los espacios comunes y promoción de la seguridad en la zona.
El modelo de variable social permitirá que los gestores sociales trabajen con las comunidades desde la aprobación del proyecto y hasta un año después de la entrega de las viviendas. Durante este periodo, los gestores facilitarán un entorno de corresponsabilidad entre los vecinos, promoviendo actividades y subproyectos que mejoren el entorno físico y social del proyecto de vivienda.
Para Hidalgo, esta iniciativa es un paso hacia la mejora continua del Banco Hipotecario y demuestra el compromiso de la institución de ir más allá de la entrega de viviendas, impulsando un desarrollo comunitario sostenible y un tejido social activo que perdure en el tiempo.
El proyecto es desarrollado por la empresa Inmobiliaria Synsa y es supervisado por la entidad autorizada Grupo Mutual.