Costa Rica pasó a estar en el grupo de países con violaciones regulares de los derechos de los trabajadores.
Costa Rica retrocedió en el Índice Global de los Derechos de los Trabajadores elaborado por la Confederación Sindical Internacional (CSI), sumándose a otros doce países que obtuvieron peores calificaciones respecto a la medición anterior, en lo que la CSI ha denominado "un desmoronamiento de los derechos democráticos" de las personas trabajadoras.
El informe se presentó este 12 de junio durante la Conferencia Internacional del Trabajo en Ginebra y contó con testimonios de representantes sindicales de los países peor clasificados y las intervenciones de Luc Triangle, secretario general de la CSI y Paapa Danquah, director jurídico de la CSI.
El índice consiste en una evaluación de los derechos de las personas trabajadoras en la legislación de 151 países. Desde hace 11 años el instrumento se emplea para monitorear y registrar las violaciones de los derechos de los trabajadores en base a 97 indicadores derivados de la jurisprudencia y los Convenios de la Organización Internacional del Trabajo. Los países se clasifican en una escala del 1 al 5+, donde 1 representa violaciones esporádicas de los derechos y 5+ indica que no hay derechos garantizados debido a la destrucción del Estado de Derecho.
Solo dos países mejoraron su puntuación en 2024: Rumanía, que pasó de 4 a 3, y Brasil, que mejoró de 5 a 4. Por el contrario, 13 países obtuvieron peores calificaciones, entre ellos Arabia Saudita, Costa Rica, Rusia, Finlandia, Israel, Kirguistán, Madagascar, México, Nigeria, Qatar, Sudán, Suiza y Venezuela.
Según el informe, Costa Rica pasó de tener una calificación de 2 (violaciones repetidas de los derechos) a 3 (violaciones regulares de los derechos) con países como Suiza, Sudáfrica, Panamá, Jamaica, Chile, Canadá, Bélgica, Australia, Argentina y otros.
De acuerdo con el documento, "en Costa Rica, Honduras y Panamá ha habido empleadores abusivos que se han dedicado a reprimir a los sindicatos, sobre todo en sectores donde los trabajadores son ya, de por sí, vulnerables a unas condiciones de trabajo abusivas".
Asimismo, el informe consigna que "en muchos países, la legislación nacional sobre huelgas ha impuesto restricciones desproporcionadas a este derecho fundamental de los trabajadores y las trabajadoras, como ha sucedido en Argelia, Armenia, Costa Rica, Senegal y Tailandia".
En 2019 la Asamblea Legislativa promulgó una ley de regulación de huelgas que tipificó tres tipos de movimientos: defensa y promoción de intereses económicos y sociales; defensa de derechos en conflictos jurídicos colectivos según el artículo 386 del Código de Trabajo; y huelgas contra políticas públicas, permitidas una sola vez y por un máximo de 48 horas.
Las huelgas fuera de estas categorías, como huelgas políticas o sin relación directa con el empleo, son consideradas ilegales. Además, las huelgas no pueden ser consideradas pacíficas si implican bloqueos de vías públicas, sabotajes, conductas delictivas, o impiden el derecho a trabajar de otros empleados.
Por otro lado, se consignaron nueve servicios esenciales donde la huelga está totalmente prohibida: servicios de salud, seguridad pública, controladores aéreos y migratorios, transporte de medicamentos y bienes esenciales, bomberos y rescate, suministro de agua potable y tratamiento de aguas residuales, suministro de energía eléctrica y telecomunicaciones, suministro de combustible y comedores escolares y servicios de protección para personas vulnerables.
Situación mundial
Según el informe, las condiciones en 2024 muestran una tendencia preocupante: los trabajadores enfrentan un rápido deterioro de sus derechos en todas las regiones del mundo.
El informe señala a Bangladesh, Bielorrusia, Ecuador, Egipto, Esuatini, Filipinas, Guatemala, Birmania, Túnez y Türkiye como los peores países para los trabajadores. Además, se ha registrado el asesinato de 22 sindicalistas en seis países: Bangladesh, Colombia, Filipinas, Guatemala, Honduras y Corea del Sur. En 12 países, debido a la ruptura del Estado de derecho, se les ha otorgado una calificación de 5+.
El informe destaca varias violaciones de derechos laborales en un amplio número de países: el 87% de los países vulnera el derecho de huelga, el 79% infringe el derecho a la negociación colectiva, en el 75% de los países se excluye a los trabajadores del derecho a establecer o afiliarse a un sindicato, en el 74% de los países se impide el registro de sindicatos, en el 65% de los países, los trabajadores tienen acceso restringido a la justicia; en el 43% de los países se restringe la libertad de expresión y de reunión, en 74 países se han efectuado arrestos y detenciones de trabajadores y en 44 países se han registrado actos de violencia contra trabajadores.
Europa experimentó un notable deterioro, con una calificación media de 2,73 en comparación con 2,56 en 2023 y 1,84 en 2014. Sin embargo, la peor región para los trabajadores es Oriente Medio y el Norte de África, con una calificación de 4,74, incrementándose desde 4,53 en 2023 y 4,25 en 2014. En esta región, los derechos a la negociación colectiva, a afiliarse a un sindicato y a registrar un sindicato han sido violados por todos los países.