El Sindicato de la Defensoría de los Habitantes comunicó que la defensora, Catalina Crespo, salió de viaje a Colombia a un congreso sin mayor explicación, luego de reclamos de organizaciones indígenas por una reunión que sostuvo con personas que han participado en usurpaciones de tierras indígenas y que han incitado al odio y otras formas de violencia en su contra.

La agrupación de los funcionarios de la Defensoría indicó que la visita a Salitre fue cubierta por medios periodísticos a los que los indígenas no les brindan declaraciones, por las difamaciones e incitaciones al odio que provocan agresiones, discriminaciones y hasta asesinatos a líderes indígenas.

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En declaraciones a Diario Extra, Crespo calificó a las recuperaciones como ilegales y pidió al Estado hacer los estudios correspondientes. Los grupos que luchan por los derechos humanos e indígenas respondieron en una carta:

Nos permitimos recordarle, que estos procesos de reafirmación territorial son legítimos y acorde a nuestra historia, cultura y cosmovisión y están a derecho de acuerdo con el bloque de constitucionalidad y los derechos culturales y humanos". 

El sindicato añadió que reiteradamente le han advertido a la Defensora que este tipo de acciones provocan un grave deterioro de la credibilidad de la institución a la que representan.

La señalaron por haberse distanciado del personal especializado que puede asesorarla "correctamente", al igual de que ha tomado distancia de las organizaciones que protegen los derechos de las mujeres, de las personas LGTBIQ+, de los niños, niñas y adolescentes, y de las personas que viven con el VIH, por citar algunas.

Esta situación demuestra, una vez más, que la Defensora no está siendo bien asesorada por el personal de confianza que la rodea, pese a que en la Institución hay profesionales con conocimientos y experiencia en materia de derechos indígenas, adquirida trabajando día con día con la población indígena", explican desde el sindicato.

La organización Mujeres Mano de Tigre, integrada por mujeres indígenas de Térraba, la Mesa Nacional Indígena de Costa Rica, la Coordinadora de Lucha Sur- Sur y muchas voces indígenas por su cuenta, se han sumado al reclamo y llamaron a la Defensora para que respete y actúe guiada por los estándares nacionales e internacionales de protección a los Derechos Humanos y apegada a la justicia como primer pilar de la democracia.