Este 2022 se cumplen 12 años de que Laura Chinchilla Miranda asumió la presidencia y se convirtiera en la primera mujer al mando de Costa Rica. La política, una arena en donde se debate y discute con mucha intensidad como dice, aún es un espacio de violencia, estereotipos y lleno de obstáculos para las mujeres.

La exmandataria participó por primera vez en un acto de la actual campaña del Partido Liberación Nacional (PLN), el pasado 26 de enero. Ahí solicitó a las electoras alejarse de los actores políticos que ponen en riesgo no solo la democracia, sino los derechos de las mujeres. Además, semanas atrás en su cuenta de Twitter aludió a que a pesar del tiempo que pasó desde su campaña y fue gobierno son pocos los cambios en el trato a una mujer en esta área.

Delfino.cr conversó con Chinchilla Miranda sobre la violencia política a las mujeres que se vive en Costa Rica, que ella vivió, que persiste y que condiciona la participación de la mujer en los espacios de poder.

En carne propia

Aún recuerda cuando previo a la elección presidencial de 2010, se le representó en propaganda de otros partidos como una marioneta cuyos hilos manejaban hombres. Mensajes que la intentaban desdibujar como mujer y que reforzaban estereotipos con intenciones de descalificarla en lugar de elevar la discusión.

El poder tradicionalmente ha estado asociado con condiciones masculinas; con la fuerza, con el vigor, con el arrojo, hay muchas condiciones que se le atribuyen al hombre y se las asocia al poder. Los estereotipos lo que han alimentado es que la mujer es todo lo contrario; débil, distraída, volátil, sin voluntad".

En su momento fue asociada a Óscar Arias y habían sectores que fomentaban el rumor de que ella solo seguía órdenes.

Una cosa es que yo fuese vicepresidenta en un papel subsidiaria a la presidencia siguiendo un marco de políticas públicas y prioridades. Otra cosa fue cuando yo me convertí en candidata y luego en presidenta. Era muy sutil porque era en las entrevistas, entonces me preguntaban sobre el tema y por más que repitiera que yo era yo, seguían insistiendo en eso".

Tiene fresco también que algunas encuestas realizadas durante su mandato, consultaban a las personas si volverían a votar por una mujer.

Como si en 180 años de vida institucional no hubiese sido gobernado por hombres que defraudaron profundamente en el ejercicio del poder y nunca nadie se atrevió a preguntarle a la gente si volvería a votar por un hombre".

Sobre la actual contienda electoral Chinchilla Miranda dice sentir una mejoría sensible en la forma en que los medios de comunicación abordan el tema. Sin embargo, detalla que la hizo reaccionar  el episodio donde un medio elevó a su portada un meme sobre una candidata que lo que pretendía era ridiculizarla. Puntualiza que eso no puede volver a suceder y que por el contrario, la prensa debe reaccionar y condenar actos misóginos de esa naturaleza.

Mientras tanto, en las redes sociales esas voces y comentarios machistas y violentos se amplían a través del anonimato que permite a la personas gritar lo que quieran por lo que son un reto para el avance en materia de género y desinformación.

Al respecto, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) junto a la firma COES determinaron que entre el 15 de noviembre y el 15 de diciembre se generaron más de 3 mil publicaciones y comentarios en redes sociales ligados a violencia contra mujeres en política. El 47% de estos mensajes incluían lenguaje ofensivo o soez y el perfil de los emisores son hombres de 25 a 34. 

Precisamente por el avance que está teniendo esta misoginia como parte también de derechos humanos, en contra de la democracia en el mundo, de la mano de ciertos liderazgos y el caso más claro fue el de la elección del 2016 en USA cuando gana un presidente que los hechos eran contundentes de haber abusado e irrespetado a mujeres de manera profunda, ese tipo de personajes terminan por aglutinar ciertos sectores de la sociedad y en Costa Rica está pasándonos"

Agrega:

Me sigue golpeando como mujer el que haya gente a la que no le importe que se irrespete a la mujer como principio fundamental. Ese respeto debería ser una condición indispensable para por ejemplo llegar a gobernar un país". 

Un caso presente es el actual aspirante a la presidencia por el Partido Progreso Social Democrático, Rodrigo Chaves Robles, quien fue denunciado y sancionado por acoso sexual a compañeras de trabajo mientras laboraba en el Banco Mundial. Dicha institución estableció una alerta de seguridad de acceso restringido para Chaves en todas sus oficinas y en las del Fondo Monetario Internacional (FMI), como medida de protección hacia las denunciantes.

En el acto político del PLN llevado a cabo el 26 de enero, la expresidenta, mencionó que en esta campaña “ha sido más que evidente el desprecio de algunos que quieren dirigir el país con las mujeres, porque la han irrespetado y han sido sancionados por eso”.

Dato D+: Meta, el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) y el Sistema de las Naciones Unidas en Costa Rica, recientemente presentaron un manual para combatir la violencia contra mujeres en política.

Desiguales

Dentro de las problemáticas que aún persisten la expresidenta hace hincapié en que la mujer aún lleva en sus espaldas el trabajo domestico no remunerado. La Encuesta Nacional de Uso del Tiempo (ENUT 2017) del INEC reveló que el tiempo que las mujeres dedican al trabajo doméstico no remunerado (TDNR) es de 35:49 horas semanales, mientras que los hombres destinan 13:42 horas en promedio.

Dicha situación, para quien hoy se desempeña como Miembro del Comité Olímpico Internacional entre otras funciones, provoca una dificultad para que las mujeres le dediquen espacio y tiempo a la política y por tal motivo a veces decidan abandonarla.

Lo cual reproduce el estigma de que la mujer no sirve para la política. En el fondo lo que sucede es que se queda sola atendiendo los problemas de la familia más los temas de la política y muchas veces un trabajo adicional porque no todos los puestos política son debidamente remunerados". 

Asimismo hace mención del Informe sobre Desarrollo Humano 2019 que tocaba el tema de desigualdades con respecto a género. El reporte, que sitúa a Costa Rica en la posición 68 de 189 naciones, explica que se debe poner atención a aspectos como la inserción laboral de las mujeres, ya que, aunque estas tienen en promedio más años de educación, reciben menos ingresos y tienen menor participación en el mercado laboral.

La expresidenta Chinchilla participó en el estudio y en su anuncio indicó que el tema de la desigualdad en general es uno de los principales obstáculos para alcanzar el desarrollo. Destacó como principales hallazgos del informe que la desigualdad está experimentando cambios importantes, ya que, a pesar de que se han logrado cerrar brechas en las necesidades más básicas (alimentación, seguridad, abrigo, etc.), las necesidades más sofisticadas (acceso a tecnologías, información, etc.) están generando una nueva generación de desigualdades que se está ampliando y estas brechas aumentarían como consecuencia del cambio climático y la cuarta revolución industrial.

Cambios y consecuencias

La exmandataria expresa que dichos actos violentos deben confrontarse de diferentes formas. Reaccionar, balancear o censurar cuando hay comentarios o actos que fomenten las agresiones a las mujeres. Enfatiza en la necesidad de seguir generando espacios para que las mujeres presenten sus propuestas y así acercarse a la equidad de género.

Para ella, indudablemente, la violencia política a las mujeres puede tener consecuencias a largo plazo al desincentivar la participación femenina.

Falta de propuestas a las mujeres

En esta elección, dice que le agradó ver a varias mujeres candidatas, y el potencial de algunas aspirantes a vicepresidentas a quienes califica como mejor preparadas que algunos de los propios candidatos. En esta ocasión cuatro mujeres aspiran a la presidencia de la República:

  • Lineth Saborío (PUSC).
  • Natalia Díaz (Unidos Podemos).
  • Carmen Quesada (Justicia Social Costarricense).
  • Maricela Morales (Unión Costarricense democrática).

Sin embargo, cree que faltan propuesta que hable directamente a las mujeres en el debate.

En un momento en que las mujeres la están pasando muy mal porque han sido muy perjudicadas de la crisis del COVID-19.  5% más en desempleo, 5%+ en subempleo, violencia familiar, trabajo domestico no remunerado, pese a ello siento que la campaña ha fallado en hablarle a la mujer. Todavía tienen tiempo. La IDESPO señala 60% de las mujeres indecisas y serán ellas quienes inclinen la balance".