Estamos al borde de una disrupción tan grande como el cambio repentino del año pasado al teletrabajo: el cambio al trabajo híbrido. Pero también hay desafíos por delante, los equipos se han vuelto más aislados y el agotamiento es una amenaza real e insostenible.
¡Renuncio! La nueva pandemia en las empresas. Cuando las vacunas parecen poner fin, ahora se debe lidiar con un nuevo fenómeno: The Great Resignation (La Gran Renuncia). No hay una única causa que esté propiciando esta Gran Renuncia, pero sí un denominador común: la pandemia de la COVID-19, el estrés y el agotamiento que toda esta situación ha causado. Pero no es solo el síndrome de estar quemado: los trabajadores, más que nunca, quieren poder seguir teletrabajando, aquellas empresas que no facilitan esta flexibilidad son las que más probabilidades tienen de sufrir bajas laborales de sus empleados.
Microsoft presentó los resultados de su Índice de Tendencias Laborales 2021, en su estudio titulado: La próxima gran disrupción es el trabajo híbrido: ¿estamos preparados? El estudio reveló que el 41% de la fuerza de laboral global está considerando dejar su trabajo, a través una encuesta realizadas a 30.000 trabajadores de 31 países, indican que la clave para mantener y atraer el talento en un mercado donde el colaborador gana poder es ofrecer flexibilidad, pero bien organizada.
El trabajo se volvió más humano, casi el 40% de los encuestados se sintió más cómodo ya que durante la jornada laboral pudo mostrarse de una forma más auténtica que antes de la pandemia. Además, uno de cada seis dijo que lloró con algún colega a lo largo del año.
En América Latina, el 54% de los trabajadores remotos siente más libertad para ser ellos mismos, pero el 48% se siente más aislado a nivel social. El enfoque que los líderes adopten va a impactar en el estilo de trabajo y en quién se queda, quién se va y quién se suma a las organizaciones.
El estudio también revela las siete tendencias del trabajo híbrido que los líderes deben tener en cuenta. Una de las principales conclusiones es que abordar el trabajo flexible va a tener un impacto en el estilo de trabajo.
Las siete tendencias son:
- El trabajo flexible llegó para quedarse. Crear un plan para impulsar que sus colaboradores tengan flexibilidad extrema.
- Los líderes que no están en contacto con los empleados necesitan un llamado de atención.
- La alta productividad esconde una fuerza laboral exhausta. Combatir el agotamiento desde arriba.
- La Generación Z está en riesgo, será necesario reactivarla.
- La disminución de las interacciones sociales pone en peligro la innovación. Invertir en espacios y tecnología para unir los mundos físico y digital.
- La autenticidad estimulará la productividad y el bienestar. Priorizar a la reconstrucción del capital social y la cultura empresarial.
- En un mundo laboral híbrido el talento está en todas partes. Repensar la experiencia del empleado para competir por los mejores y más diversos talentos.
“Una cosa está muy clara: ya no estamos atados a las nociones tradicionales del tiempo y el espacio cuando se trata de cómo, cuándo y dónde trabajamos. Este es un gran cambio mental, que requerirá que los líderes y las organizaciones reconfiguren sus operaciones para alcanzar una flexibilidad extrema. Las decisiones que tomen hoy impactarán en los próximos años, desde cómo damos forma a la cultura empresarial y cómo atraemos y retenemos al talento, hasta cómo fomentamos la colaboración y la innovación de forma más eficiente”, dijo Jared Spataro, vicepresidente corporativo para Microsoft 365.
El modelo hibrido llegó para quedarse y el panorama del talento ha cambiado fundamentalmente, para prosperar en este modelo se debe construir una cultura de confianza y flexibilidad.
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