Tras concluir el primer estudio que demostró que el suero equino contra el SARS-CoV-2 es seguro, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y la Universidad de Costa Rica (UCR) darán inicio a un segundo estudio para determinar los efectos del medicamento en pacientes cuando reciben dosis más altas.

Según informaron las autoridades de ambas instituciones, este segundo estudio iniciará a partir de la próxima semana en los hospitales México, Rafael Ángel Calderón Guardia, San Juan de Dios y el Centro Especializado en Atención COVID-19 (Ceaco).

En el estudio participarán 156 personas mayores de 18 años, con menos de 24 horas de hospitalización, con menos de 10 días de haber comenzado la manifestación de síntomas moderados o severos y con una neumonía confirmada por SARS-CoV-2, el coronavirus causante de la COVID-19.

Todo participante deberá firmar un consentimiento informado previo a su incorporación al estudio, según la Caja.

Los participantes estarán distribuidos en cuatro grupos: un grupo control placebo y tres grupos a los que se les aplicarán las dosis. Cada persona recibirá una sola dosis y se probarán tres cantidades: 12 milígramos por kilo de peso, 30 milígramos por kilo de peso y 56 miligramos por kilo de peso.

El investigador principal del estudio es el doctor Willem Buján Boza, quien afirmó que se busca, entre otros objetivos, determinar la eficacia de las dosis mediante la evolución clínica del paciente, la mortalidad a los 7 y 28 días, el requerimiento de ventilación mecánica, los días de estancia en el hospital y los eventos adversos, como alergias.

En el estudio están involucradas alrededor de 150 personas, que incluye el investigador principal, investigadores de sitio, coordinadores clínicos, monitores, personal de apoyo de farmacia, laboratorio, enfermería, terapia respiratoria y administrativos, entre otros.

Este proyecto de investigación es único y pionero en el aspecto de que la UCR diseña un producto y la Caja prueba su eficacia y seguridad, con la colaboración del Inciensa (adscrita al Ministerio de Salud).

Esta iniciativa aprovecha la experiencia del Instituto Clodomiro Picado de la Universidad de Costa Rica en el desarrollo del suero antiofídico, que tiene reconocimiento mundial, para trasladar sus conocimientos en el desarrollo de un suero anti COVID-19.