Estamos contra el tiempo y, aunque dentro de lo que cabe, “vamos bien”, lo único que tenemos a nuestro favor es la comunicación. En ese sentido la primera herramienta a disposición es la conferencia de prensa diaria. El día de ayer el Dr. Marín y el Dr. Ruiz probaron ser voces destacadas que deberían participar más a menudo. Encuentran el tono correcto: un abordaje técnico y científico pero ilustrado con lenguaje accesible y ejemplos fáciles de comprender. No esquivan las preguntas e, incluso cuando es complicado contestarlas (llámese porque no tienen los datos a mano por ejemplo) procuran ofrecer una respuesta a la altura de la consulta. Por ahí va el camino apropiado.

Además de aprovechar y potenciar a las voces más oportunas (como ellos) hay otras medidas que Salud y Comunicación podrían tomar para apuntar a una comunicación más efectiva, que permita responder a la necesidad de información de la ciudadanía.

#1. Establecer un rango horario para recibir las consultas de la prensa. Tipo 6:00 a.m. a 10:00 a.m. Preparar el cuestionario con anticipación (para unir preguntas que vayan por la misma línea) y facilitarlo a las autoridades de previo, para que puedan preparar las respuestas con anticipación (especialmente útil cuando se trata de datos).

#2. Establecer una distribución democrática de la cantidad de preguntas por medio. Esto permite tomarlos en cuenta a todos y eliminar el riesgo de que uno quede por fuera.

#3. Las preguntas que no se pudieron contestar en conferencia se pueden contestar en el chat, para facilitar a los medios la distinta información.

#4. Subir diariamente a la red una transcripción de la conferencia incluyendo todas las preguntas y respuestas, tanto las que se contestaron en la conferencia como las que se contestaron en el chat. Estoy seguro de que dentro de la ciudadanía sobrarían voluntarios para cooperar.

#5. Crear un sitio dividido por categorías (restricciones, medidas, disposiciones, consejos, desmentido de información falsa) que pueda ser visitado por la ciudadanía para conocer cualquier día la posición oficial de las autoridades y su motivación. Esto sería especialmente útil con debates vivos como el de mascarillas, tratamiento, etc.

#6. En términos generales, no descuidar el reforzamiento de las actitudes constructivas y resaltar lo que sí funciona pues motiva mas a la acción y a la responsabilidad sobre la acción. Nathalia Rodríguez, amiga psicóloga, me dice “educar desde el acompañamiento, el reforzamiento de lo positivo, la información precisa, tendrá mejores resultados y más duraderos. La gente se resiste menos al cambio cuando lo comprende”, y no podría estar más de acuerdo. “Costa Rica va por buen camino en esta lucha, queda mucho por delante pero también hay mucho que se ha hecho bien. Es importante darlo a saber”, agrega. También coincido.

Ninguna de estas sugerencias está pegada al techo y reitero, la ciudadanía con gusto ayudaría. Este es un momento en que todas aquellas personas con tiempo libre y talento en programación, redacción, etc, deberían levantar la mano y decir: presente. Nosotros mismos podemos ayudar a reclutar utilizando el espacio de Inteligencia Colectiva en Facebook.

Se trata de aprovechar el tiempo y los recursos de la forma más efectiva posible para combatir la desinformación y sobre todo para abarcar tantas dudas como sea posible. Solo nosotros, a diario, recibimos decenas (sino cientos) de consultas, prueba fiel de que la ciudadanía todavía tiene una altísima necesidad de información y claridad.

Los medios tenemos la responsabilidad, en este momento, de ser aliados en esa búsqueda. Es más que evidente que este momento, más que ningún otro, requiere que todos consolidemos un frente común en la defensa de nuestra salud y de nuestro futuro económico.

Por lo pronto ayudémonos entre nosotros: ¿Tiene una consulta? Hágale en Inteligencia Colectiva. ¿Conoce la respuesta? Apórtela y adjunte un enlace de respaldo. Ahora mismo nos toca ser útiles y pensar en el bienestar común. Hoy más que nunca, de verdad, todo suma (y nada cuesta). A todas y todos, un abrazo.