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— El área de Infraesctructura de la Contraloría General de la República realizó una auditoría con el fin de verificar el cumplimiento de los controles por parte el CONAVI sobre la gestión de los proyectos de obra pública a cargo de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS por sus siglas en inglés).
— El CONAVI ha contratado con la UNOPS el gerenciamiento y supervisión de proyectos de obra pública y ha suscrito 5 Memorándum de Acuerdo (MDA) por un monto total de US$ 148,66 millones aproximadamente.
— La contratación del organismo internacional permitiría, a criterio del CONAVI, reducir plazos y lograr ahorros durante la ejecución de los proyectos, mayor transparencia y el fortalecimiento de las capacidades nacionales. Pero ¿es así?
— Los resultados de la auditoría indican que el CONAVI no está asegurando razonablemente el cumplimiento de los objetivos del sistema de control interno en los proyectos a cargo de la UNOPS...
— Según la CGR: “Las consideraciones que llevaron al CONAVI a encargar el gerenciamiento y la supervisión de proyectos estratégicos de infraestructura vial no se han cumplido. Los plazos de ejecución de los proyectos y sus costos se han incrementado de manera significativa, y a pesar, de haberse establecido que se daría un fortalecimiento institucional, por medio de distintas capacitaciones, talleres y formación “on the job”, esto no se ha materializado en los términos acordados”.
— Para sorpresa de nadie el CONAVI tiene un control deficiente sobre el avance físico y financiero de los proyectos, y la administración de los recursos, “por lo que no se tiene certeza de que con los plazos y montos incrementados se pueda dar con la culminación de los proyectos, desconociéndose las fechas de finalización y costos totales de éstos, y que los recursos se estén asignando según los términos de los Memorándum de Acuerdo”.
— La CGR también indica que “se determinaron debilidades relacionadas con el control ejercido sobre los intereses o rendimientos que generan los fondos transferidos y los bienes adquiridos con dichos recursos. Ese Consejo no realizó una evaluación de las necesidades de fortalecimiento institucional de previo a la ejecución de los proyectos lo que impidió controlar el alcance de este componente en cada uno de los MDA y además, se determinó que parte de los recursos públicos de este componente se destinó a la contratación de servicios en otros proyectos que ejecutó el CONAVI”. En resumen: un desastre.
— Para la Contraloría el CONAVI no está asegurando razonablemente el cumplimiento de los objetivos del sistema de control interno en los proyectos a cargo de la UNOPS.
— La pelota queda ahora donde siempre ha estado: en el CONAVI. La solicitud de la CGR es que ponga el chinamo en orden y permita dar un adecuado seguimiento a la gestión de los recursos para llevarlos a buen puerto. La lista de peticiones es extensa, muy extensa. Estaremos pendientes de si en efecto el Consejo atiende lo solicitado y la situación finalmente se revierte. Ojalá...