La Fila Costeña o Brunqueña es un territorio de alto valor ambiental y social, clave para la seguridad hídrica del Pacífico sur.
La Contraloría General de la República informó que recibió y dio trámite a una denuncia ciudadana relacionada con presuntos permisos de construcción otorgados por la Municipalidad de Osa a proyectos de desarrollo urbanístico en las zonas de la Fila Costeña y el Corredor Biológico Paso de la Danta.
La solicitud fue presentada por la Comisión Alianza Comunal (CAC) -adscrita al Comité Local del CBPD- mediante la Fracción Legislativa del Partido Frente Amplio el pasado 30 de septiembre de 2025. Según lo señalado por las personas denunciantes, se habrían concedido los permisos sin contar con una base científica integral que garantice su sostenibilidad ambiental.
El documento se fundamenta en un posible incumplimiento del deber de resguardar los recursos naturales que forman parte de la Hacienda Pública, y busca determinar eventuales responsabilidades administrativas, incluyendo sanciones y la posible cancelación de credenciales a funcionarios o autoridades municipales que hayan contravenido el marco de fiscalización ambiental.
De acuerdo con el oficio DFOE-DEC-9527, fechado el 17 de diciembre de 2025, la denuncia fue trasladada al Área de Fiscalización para el Desarrollo Sostenible de la Contraloría, con el fin de que sea considerada como insumo en la planificación estratégica de futuros procesos de fiscalización.
La institución indicó que este traslado interno se realizó conforme a los lineamientos vigentes para la atención de denuncias ciudadanas, los cuales permiten que los hechos señalados alimenten otras acciones de control y evaluación.
La Contraloría explicó que lo que se determine a partir de este análisis será comunicado oportunamente a las personas denunciantes, a través del medio de notificación indicado en su gestión.
La relevancia de la zona
La Fila Costeña o Brunqueña es un territorio de alto valor ambiental y social, clave para la seguridad hídrica del Pacífico sur. En esta fila montañosa nacen decenas de fuentes de agua que abastecen a comunidades como Dominical, Palmar Norte y Sur, Uvita, Ojochal y Bahía Ballena, mediante al menos 60 aprovechamientos administrados por 18 ASADAS. Además de sostener a las poblaciones locales, estas fuentes permiten el desarrollo turístico e inmobiliario del cantón.
No obstante, la expansión acelerada y desordenada de construcciones en zonas boscosas amenaza gravemente la estabilidad ecológica del área. La propia actividad turística e inmobiliaria se ha convertido en el principal factor de presión, al avanzar hacia las partes altas y poner en riesgo nacientes, bosques, la franja costera y la vida marina de la que depende su rentabilidad.
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