El OIJ reportó un incremento del 88% en las denuncias por delitos informáticos recibidas en San José, durante el primer semestre del 2025.

La Oficina del Consumidor Financiero (OCF), junto con todos los bancos públicos y privados y las principales cooperativas del país, lanzaron una campaña de educación y prevención ante el crecimiento sostenido de los fraudes digitales que afectan a la población costarricense.

El jefe de la Sección Especializada contra el Fraude Informático del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Yorkssan Carvajal, dimensionó el problema que atraviesa el país indicando que solo en el primer semestre del presente año, el OIJ ha recibido 4.693 denuncias solo en San José por concepto de delitos informáticos, lo que representa un incremento del 88% en comparación al mismo periodo del 2024.

La campaña, titulada #AMíTambiénMePasó, parte de una idea sencilla: hablar del tema abiertamente, sin prejuicios ni culpa. Esta iniciativa reúne a un amplio grupo de entidades financieras —tanto afiliadas como no afiliadas a la OCF— en una cruzada nacional que se difundirá en medios de comunicación, redes sociales y plataformas digitales. La estrategia utiliza testimonios de conocidos personajes nacionales, que relatan cómo ellos mismos o personas muy cercanas fueron víctimas de estafas digitales.

El director general de la OCF, Danilo Montero, explicó:

Como sector, entendimos que debemos alzar la voz y unir esfuerzos. Esta campaña es una muestra clara de que estamos trabajando juntos por un objetivo común: educar a la población y evitar que más personas caigan en estas trampas. La única forma de frenar las estafas es hablar y compartir lo que está pasando. Tanto entidades financieras como consumidores tienen un enemigo común que combatir: una poderosa industria criminal que no tiene límites”.

La campaña busca generar identificación y cercanía de la audiencia con la realidad de que todos podemos ser víctimas. Cada anuncio presenta una historia personal que ayuda a visibilizar el problema, comprender los mecanismos de fraude y motivar a las personas a tomar precauciones.

Entre los mensajes más directos que se escucharán en medios destacan frases como: “Me clonaron mi tarjeta”, “Caí en un falso préstamo” o “Me robaron mis ahorros”. A partir de estas experiencias reales, se educa sobre los fraudes más comunes:

  • Phishing: correos o mensajes que aparentan ser de una entidad financiera y solicitan claves, códigos o datos personales.
  • Vishing: llamadas donde delincuentes se hacen pasar por personal bancario para obtener información confidencial.
  • Smishing: mensajes de texto con enlaces falsos que dirigen a páginas fraudulentas, muchas veces haciéndose pasar por bancos o anunciando supuestos premios.

La campaña también insiste en recomendaciones prácticas para protegerse, como no compartir claves o códigos, verificar siempre la fuente de cualquier mensaje o enlace, y comunicarse directamente con la entidad financiera ante cualquier duda.

Montero añadió:

Las estafas digitales evolucionan todos los días. Por eso, las instituciones financieras abrazaron desde el principio este esfuerzo nacional. Queremos que las personas se mantengan alerta, que conversen sobre este tema en sus hogares, en sus trabajos, en sus círculos cercanos. Mientras más hablemos de esto, más protegidas estarán todas las personas”.

La iniciativa está patrocinada por los bancos privados BAC, Scotiabank, Davivienda, Banco Lafise, Banco Promérica, Banco BCT, Banco Improsa, Banco Cathay, las cooperativas Coopenae, Coopealianza, CoopeAnde y Coopecaja, así como los tres bancos públicos: Banco Nacional de Costa Rica, Banco de Costa Rica (BCR) y Banco Popular.