El programa capacitó a los participantes en agricultura de precisión, habilidades socioemocionales y emprendedurismo.
El proyecto "Nuevas Habilidades para la Agricultura del Futuro" de EARTH Futures, el centro global de soluciones de la Universidad EARTH, graduó a 116 jóvenes de zonas rurales del país en un programa de capacitación que les dotó de herramientas tecnológicas y habilidades socioemocionales y de innovación, dirigidas a que mejoren sus oportunidades para acceder a mercados en el sector agro y evolucionar la educación agrícola.
El programa se desarrolló entre el 2022 y el 2024 y se enfocó en empoderar a los estudiantes para que a futuro puedan acceder a oportunidades profesionales en el sector, y se trabajó de la mano del Laboratorio de Innovación del Banco Interamericano de Desarrollo (BIDLab) y del Ministerio de Educación Pública (MEP).
Según indicó el director del Programa de Desarrollo de Soluciones de EARTH Futures, Javier Artiñano Guzmán, en una entrevista concedida a este medio:
El programa trabajó con jóvenes de último año de colegios técnicos profesionales y con el MEP se definió que estos fuesen de las regiones Chorotega y Caribe, por la cercanía con los campus de la Universidad EARTH. Además, se definió que se trabajaría con especialidades agrícolas y de agroecología".
La iniciativa, de esta manera, operó en cinco colegios en total: dos en la región Chorotega (Hojancha y Liberia) y tres en la región Caribe (Sarapiquí, Pococí y Siquirres), instituciones que además cuentan con un equipo de agricultura de precisión, uno de los pilares del programa.
En este ámbito, los jóvenes aprendieron a utilizar drones y equipo tecnológico para la medición de humedad, la conductividad eléctrica, la compactación y el PH del suelo, entre otros.
Además, y en el ámbito de emprendimiento, los estudiantes recibieron guía para generar su propia idea de negocio a partir de la realización de estudios de mercado y prototipos; mientras que en el campo de las habilidades socioemocionales recibieron distintos talleres interactivos para el desarrollo humano basados en inteligencia emocional, pensamiento crítico, resolución de conflictos, creatividad e innovación y comunicación asertiva.
Finalmente, y de los 116 estudiantes que recibieron el certificado de finalización del programa, 69 presentaron una idea de negocio que fue defendida ante un jurado, y de ellos, 30 fueron seleccionados para recibir un capital semilla. A estos seleccionados se les dio, además, un acompañamiento de impulso durante el primer trimestre del 2024.
Según agregó Artiñano:
El principal objetivo de este proceso es promover la agricultura de una forma que sea más atractiva para los jóvenes y por eso es que se integró la tecnología con las habilidades en emprendimiento. Esto permitió que los muchachos aprendieran a usar cierto equipo para recolectar datos a partir de los cuales puedan tomar decisiones informadas y, adicionalmente, fortalecer su espíritu empresarial. También tuvieron el incentivo de acceder a un capital semilla y algunos hasta emprender”.
Artiñano también resaltó el valor de la alianza con el MEP para este proceso la cual, señala, fue "fundamental" para que se llevara adelante exitosamente, por lo que incentivó a más empresas e instituciones a sumarse en este tipo de iniciativas conjuntas.
EARTH Futures también resaltó que el objetivo ahora es generar alianzas con empresas privadas para que estas se sumen con apoyos económicos y en especie, con el fin de potenciar más iniciativas:
Este proyecto está bajo el pilar de Programa Desarrollo de Soluciones de EARTH Futures, cuya visión es precisamente llevar el impacto de la universidad más allá de su comunidad de graduados y de su programa académico, donde por medio de este centro, se busquen soluciones a los retos en la ruralidad de Latinoamérica y el mundo. El programa empezó en 2018 y ahora tenemos tres proyectos en Costa Rica y tres en Guatemala".
Mejorar la calidad de vida de las comunidades
Durante los primeros seis meses del programa, y según señaló Artiñano, se trabajó con el objetivo de cerrar las brechas educativas que se arrastraron tras la pandemia y las huelgas de profesores del 2018, con el fin de dar capacitación completa para crear "un semillero de talento" que puedan aprovechar las empresas del sector en el desarrollo de nuevas oportunidades laborales.
Según indicó el director del programa:
Con base en los excelente resultados que obtuvimos en las evaluaciones tanto de estudiantes como de docentes, vemos en este programa un vehículo importante para seguir promoviendo al agro con la juventud rural como una actividad digna para la vida y llena de oportunidades”.
Una de las estudiantes beneficiadas por el programa fue Yindra Argüello León, quien señala que gracias a lo aprendido comenzó a ver una posibilidad real de emprender, de usar la tecnología para la innovación y de suplir necesidades alimenticias en su comunidad y en el resto del país.
Argüello, quien estudió en el Colegio Técnico Profesional de Pococí y formó parte de la especialidad agropecuaria, creó un negocio que desarrolla productos a base de leche de cabra, como yogurt, dulce de leche y queso y, según cuenta:
He aprendido que con la agricultura de precisión podemos usar la tecnología para la agricultura y que esto nos permite ser más exactos a la hora de trabajar la tierra y tomar decisiones para mejorar los cultivos, mientras que podemos ahorrar tiempo y recursos. También me gustó mucho aprender sobre habilidades socioemocionales porque me he dado cuenta de lo necesario e importante que es usar la inteligencia emocional en diferentes entornos para tener una comunicación asertiva con compañeros, jefes y personas cercanas”.
El rector de la Universidad EARTH, Arturo Condo Tamayo, quien lideró la creación del centro de soluciones, agregó que:
EARTH Futures es una forma de expandir el impacto de EARTH y de cumplir nuestra aspiración: preparar y empoderar a un movimiento de líderes que transformen los sistemas alimentarios a nivel local y global; una urgencia que tenemos como humanidad para superar los retos que enfrentamos actualmente, como el cambio climático y el hambre. Este proyecto que trabajamos junto a dos aliados importantes, es un ejemplo de lo que podemos replicar en otras zonas de Costa Rica y el mundo”.