PANI comunicó que el apoyo mensual que reciben las familias bajará este 2024.

La Fundación Paniamor levantó la voz esta semana ante el anuncio del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) de que reducirá el monto que reciben las familias en condición de vulnerabilidad de nuestro país.

Según indica la circular PANI-DPRO-CIR-030-2023 enviada el 21 de diciembre a las familias que reciben el subsidio, la Junta Directiva del PANI ordenó que el apoyo mensual de Acogimiento Familiar con Subvención (AFCS) disminuya de 132 mil a 109 mil colones para personas sin condiciones de salud especiales; al tiempo que el monto para menores con discapacidad  bajará de 158 mil colones a 123 mil colones.

Debido a ello, la fundación reclamó que el gobierno de la República, con sus "decisiones recortistas de inversión", lo que hace es profundizar la vulnerabilidad en la que se encuentran estos menores:

En un contexto en el que la pobreza infantil y adolescente alcanza un alarmante 38% de toda la población menor de edad en Costa Rica, el actual gobierno mantiene y profundiza sus decisiones recortistas de la inversión en personas menores de edad vulnerables, profundizando esta vulnerabilidad y los riesgos asociados a la pobreza y la exclusión social".

Paniamor también externó su preocupación respecto a que los recortes presupuestarios en el PANI signifiquen el no abrir nuevos cupos para el 2024, lo que "aumentará la lista de espera de niñas, niños y adolescentes que podrían estar bajo el cuido de una familia, en lugar de una alternativa institucional":

En términos prácticos esto implica que, si no hay cupos disponibles, las oficinas del PANI (que gestionan una alternativa de protección cuando se han vulnerado los derechos de una niña, niño o adolescente) seguirán refiriendo a albergues institucionales o a organizaciones de cuido residencial (donde también existen listas de espera), las cuales, pese a sus esfuerzos, no pueden sustituir la atención y cuidados brindados en un entorno familiar. Aunado a esto, si un cupo queda libre y no se llena rápidamente, se cerrará del todo y ya no podrá ser usado".

Para la fundación, estas decisiones afectan directamente a los menores en riesgo y contradicen las indicaciones internacionales que entes como Naciones Unidas han brindado al Estado costarricense, al tiempo que "reflejan una tendencia a la baja en la inversión social":

La continuidad y tamaño de estos recortes en un contexto de recuperación económica nacional sugieren que no se trata de reacciones coyunturales, sino de decisiones estructurales, las cuales muestran una peligrosa incomprensión del papel crucial que juegan las inversiones sociales en niñez y adolescencia en el desarrollo humano de toda la población a largo plazo. Esto es muy delicado porque, como lo demuestran varias evidencias científicas recientes, las inversiones en desarrollo humano temprano son las más eficaces y tienen un impacto sustantivo a largo plazo, pues una experiencia de protección, atención y educación apropiadas durante la niñez y la adolescencia tienen un efecto protector que se extiende a toda la vida de la persona".