El programa busca que los productores se alineen con los requerimientos que entrarán en vigencia en la UE en 2024.

Un plan piloto impulsado por el Instituto del Café de Costa Rica (ICAFÉ), con el apoyo del Proyecto REDD+ Pagos Basados en Resultados (PBR) del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), pretende evidenciar que el café que se produce en Costa Rica es libre de deforestación.

El objetivo del programa es que los productores nacionales se alineen con los requerimientos que en 2024 entrarán en vigencia en la Unión Europea (UE), para evitar el ingreso de bienes en cuya cadena de producción se destruyen los bosques para establecer más cultivos.

Debido a ello, la semana anterior un grupo de 70 personas productoras de café de CoopeTarrazú, realizó la primera capacitación del plan piloto Café Libre de Deforestación.

En ella se explicaron los requerimientos legales y se establecieron los pasos para desarrollar y validar la guía metodológica que permita documentar a sus exportaciones como libres de deforestación.

La finalidad también es exponer que este cultivo aplica buenas prácticas ambientales, incluida la no deforestación y la mitigación de Gases de Efecto Invernadero (GEI).

Según indicó Gustavo Jiménez, director ejecutivo de ICAFÉ:

Los talleres llevados a cabo en colaboración con CoopeTarrazú R.L. son de vital importancia y están diseñados para preparar y proporcionar las herramientas necesarias que permitan a nuestro sector cafetalero integrarse con éxito en el Pacto Verde Europeo y continuar avanzando en la meta de un café libre de deforestación. El ICAFE y CoopeTarrazú R.L. lideran este plan piloto con el valioso apoyo del PNUD y desde la institucionalidad externamos nuestro apoyo decidido a esta iniciativa, con el compromiso de garantizar que las primeras exportaciones de café cumplan con todos los requerimientos solicitados por la Unión Europea. Café de Costa Rica trabaja responsablemente para ofrecer al mundo un café de calidad, sostenible y responsable con el ambiente".

Nuestro país estableció la meta de carbono neutralidad en sus Contribuciones Nacionalmente Determinadas, resaltando el papel que tiene el sector forestal y otros sectores productivos, como el cafetalero, para lograrla. 

El Proyecto REDD+PBR, que trabaja con recursos del Fondo Verde del Clima, fomenta iniciativas para aplacar la deforestación y degradación de los bosques, comenzado a trabajar en esta línea con el café.

Asimismo, la Unión Europea (UE) se comprometió a implementar un plan transformador para su economía y sociedad, con la meta de alcanzar la neutralidad climática en 2050. Por esta razón en 2019 adoptó el Pacto Verde que, entre otras cosas, plantea normativa relativa a combatir la deforestación. 

De esta manera, la UE prohibió la deforestación de los ecosistemas en su territorio y ha planteado atenderla en las cadenas de valor, como una responsabilidad extendida de sus productos importados, entre los cuales está el café el cual es susceptible a desarrollar este proceso debido a la expansión de la frontera agropecuaria.

La normativa europea propuesta prohíbe la adquisición de productos que no demuestran ser ajenos a la pérdida de los bosques. Así, las personas productoras deberán comprobar, desde el origen de la cadena de valor, que sus productos no provienen de zonas deforestadas después del 31 de diciembre del 2020.

Según Maureen Ballestero, coordinadora del Proyecto REDD+PBR:

Para el Proyecto REDD+PBR y para PNUD esta es una gran oportunidad para trabajar de la mano con los y las productoras de café que han venido haciendo bien las cosas, al tiempo que evitamos la deforestación, objetivo crucial de REDD+. Muy pronto la UE levantará la barra para los países que le exportan. Con esta metodología que se propone para la cadena de valor del café de exportación, no solo apoyaremos a personas productoras de nuestro grano de oro, sino que abonaremos al sello ecológico que caracteriza a Costa Rica y ayudaremos a la mitigación del cambio climático”.

En los próximos meses se hará el trabajo de campo para verificar las características de las fincas cafetaleras, seguidos de la validación de la guía y normativa, con propósito de realizar la primera exportación de café documentada como libre de deforestación en el primer semestre de 2024.

Los análisis de datos cuantitativos y espaciales de las fincas productoras se realizarán con la plataforma CR-CAFE de monitoreo que desarrolla y ejecuta el ICAFE, así como con herramientas de sistemas de información geográfica, como el MOCUPP, imágenes satelitales, sobrevuelos con dron, productos desarrollados por la Secretaría REDD+ y el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), además de otros insumos. 

Esta propuesta metodológica pretende generar un primer esfuerzo país que podrá ser escalable a otros productos y encadenamientos productivos para formar parte de una normativa país.

El plan se trabaja con CoopeTarrazú por agrupar un alto número de familiares y personas productoras en el ámbito nacional. También este grupo beneficia e industrializa un volumen considerable de café en la región y es uno de los tres principales exportadores de café en Costa Rica a Europa.