La Caja hizo un nuevo llamado para que la ciudadanía que no esté afrontando una situación crítica, no acuda a los servicios de Emergencia.
Especialistas de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) explicaron, esta semana, cómo es que trabaja la clasificación para los usuarios que utilizan los servicios de Emergencia de los centros médicos, a fin de que la ciudadanía sepa en qué situaciones acudir a estas instancias.
Hace unas semanas la Caja solicitó que se asista a los servicios de Emergencias cuando el paciente presente una condición tan grave que su vida está en riesgo; y a los de Urgencias cuando la persona se enferme de forma repentina pero sin riesgo para su vida (como con gripe y diarrea, entre otros).
Pues bien, esta semana la institución amplió al explicar cuáles son los cinco tipos de clasificaciones para pacientes que se atienden en Emergencias, según la clasificación internacional Canadian Triage and Acuity Scale (CTAS, por sus siglas en inglés):
- Paciente azul.
- Paciente rojo.
- Paciente amarillo.
- Paciente verde.
- Paciente blanco.
Según indicó la emergencióloga del Hospital Rafael Ángel Calderón Guardia, Laura Vásquez Sancho, los pacientes azules son aquellos cuya vida está en riesgo inminente y a los que "si no les damos una atención en los próximos 3 minutos, van a fallecer":
Estos pacientes ingresan de una a las salas de shock donde tenemos todo un equipo capacitado para lograr darle una posibilidad de vida al paciente", agregó la doctora.
Por su parte, la especialista señaló que los pacientes rojos son aquellos que se deben abordar en los 10 minutos próximos a su ingreso al servicio, "pues si no lo hacemos en ese lapso, el paciente aumenta la mortalidad y puede ser que fallezca en las próximas horas"; mientras que los amarillos son los que presentan una condición estable pero que tienen algún grado de urgencia "con atención de 30 a 40 minutos. Estos son pacientes con dolores abdominales, infecciones y que requieren atención pero que no van a fallecer".
Por último, los pacientes blancos y verdes son aquellos que, según Vásquez, no deberían asistir a estos servicios de Emergencia:
Los pacientes verdes son aquellos que no deberían venir a los servicios de Emergencia, pues son pacientes que pueden a ser atendidos en las próximas horas, que no corren ningún riesgo y que podemos incluso darles una atención en dos o tres horas, sin que signifique la mortalidad. Finalmente, tenemos a los pacientes blancos que ni siquiera deberían venir a los servicios de Emergencia, pues son pacientes que vienen porque se golpearon hace tres semanas o porque se les acabaron los medicamentos o perdieron una cita en Consulta Externa y necesitan una referencia... Todo este tipo de consultas no debería venir a estos servicios de Emergencia", reiteró la especialista.
La opinión de Vásquez es la misma que sostiene el doctor Donald Corella Elizondo, jefe del servicio de Emergencias del Calderón Guardia, y que además es el coordinador de la comisión institucional para el análisis de estos servicios.
Según Corella:
Es muy importante que la población comprenda que los tiempos de espera para los pacientes no urgentes siempre se van a prolongar no porque haya que prolongarlos, sino porque el servicio de Emergencias está creado y diseñado para focalizar todos los recursos en la atención de los pacientes críticos que nos arriban".
Para el médico, la estadística de trabajo del servicio de Emergencias demuestra que este servicio utiliza la salas de reanimación con pacientes críticos, por alrededor de una hora en cada paciente, al tiempo que las horas más calientes para recibir a estos pacientes son entre el medio día y las 4 de la tarde y por situaciones como enfermedades médicas, "casi siempre enfermedades cardiovasculares o infecciones muy severas", o por trauma, como accidentes o hechos de violencia social.
Los servicios de Emergencias de los hospitales utilizan un sistema de clasificación que es estandarizado internacionalmente y que la institución adoptó desde el año 2013 con el objetivo de ordenar la fila. ¿Qué significa ordenar la fila? Bueno, pues atender primero al paciente de mayor gravedad y del cual su vida está en riesgo, antes de dirigir toda la atención del servicio para tratar o valorar a pacientes cuya vida no está en riesgo ni requieren atención inmediata", agregó el médico especialista.
Corella, a su vez, agregó que esta clasificación se pone en el paciente apenas ingresa por la puerta de Emergencias, donde se le aplica un sistema de mediciones y de preguntas para definir a qué calificación va a enviarse:
Si el paciente ocupa una atención inmediata es pasado a las salas de reanimación donde lo va a abordar un equipo interdisciplinario de personal especializado en servicio de Emergencias, con el objetivo de mantener su vida, la funcionalidad de sus órganos y detectar cualquier otra situación que haya pasado inadvertida".
Si el paciente, por el contrario, no se encuentra en condición crítica, será colocado en las etiquetas de Urgencia, donde puede durar "alrededor de una hora a 90 minutos, en los que el paciente se puede esperar para ser atendido por un médico con el objetivo de tener su atención y determinar el tratamiento a seguir".
Finalmente, reiteró Corella:
Existen otros niveles de severidad hasta uno que se llama 'No urgencia' donde el paciente no presenta ninguna condición que amerite la atención inmediata del servicio de Emergencias, esos pacientes pueden esperar hasta 24 horas o un poco más, ya sea para ser atendidos en el servicio o para que se redireccionen a otras áreas de salud en las cuales podrían recibir la atención en las siguientes horas".