La atención de la pandemia por COVID-19 en Costa Rica, solo en el año 2020, costó en total 170.6 mil millones de colones a las arcas del Estado.
Así lo reveló este jueves el Ministerio de Salud costarricense, en conjunto con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en la presentación del informe titulado Estudio COVID-19 Gasto Público en Salud en Costa Rica durante 2020 que analizó el nivel de gasto público nacional por pandemia, en el primer año de la crisis.
Según indicó el jerarca de Salud Daniel Salas Peraza, en una conferencia de prensa convocada para esta tarde:
Costa Rica, con apoyo de la OPS, pudo llevar un estudio para estimar la atención en salud por COVID-19. Este estudio nos refleja que el gasto corriente de Costa Rica que se efectuó en lo que es atención en la salud por coronavirus durante el 2020, fue de .5 puntos porcentuales del Producto Interno Bruto. Esto, en términos absolutos, representa unos 279 millones de dólares, con lo que estamos hablando de 170.6 mil millones de colones, con una estimación per cápita de 33 mil 500 colones".
Según las partes involucradas, la mayor proporción del gasto corriente corresponde a los gastos de la Caja Costarricense de Seguro Social que, en total, consumió cerca de ¢112,8 mil millones (aproximadamente 184 millones de dólares), en la atención de la pandemia.
A este gasto le sigue el de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) que gastó ¢33,1 mil millones (aproximadamente $54 millones) y al Ministerio de Salud con un gasto de ¢24,0 mil millones (aproximadamente $39 millones).
Sin embargo, el estudio señaló que la mayor parte de esos gastos procedieron de la utilización del Fondo de Contingencia de la CCSS y de los recursos utilizados a partir de la declaración de estado de emergencia, por parte de la CNE. Estos fondos se habilitaron para su uso antes de que empezara lo más agudo de la pandemia.
Por su parte, y respecto al uso de esos recursos, el informe señala que la atención curativa representó el 63,5% del total del gasto corriente y que la atención preventiva representó un 32,4% (aquí se incluye la vacunación y la coordinación en atención del manejo de la crisis).
Según Allan Rimola Rivas, jefe de Economía de la Salud del Ministerio de Salud:
El 46,1% del total del gasto corriente fue realizado en hospitales de la CCSS durante el 2020, si se analiza el gasto por tipo de proveedor. No obstante, el mayor número de internamientos en 2021 sugiere que este gasto será mayor en el reporte correspondiente, a realizarse en un futuro".
Por su parte y en gastos específicos, el pago de remuneraciones o salarios del personal dedicado a la atención de la emergencia representó el 62,9% del total del gasto corriente y los materiales y servicios utilizados representaron el 37% restante.
Entretanto, el gasto de capital entendido como inversión en infraestructura y equipo médico, ascendió a los ¢16.985 millones (aproximadamente USD $27,8 millones). De ese monto, el 80% se destinó a la adquisición de equipo médico y un 19% a la adecuación de espacios para la atención exclusiva y aislamiento de pacientes COVID-19.
Según Rímola:
Este es el caso del Centro Nacional de Rehabilitación (Cenare) que se reconvirtió en el Centro de Atención COVID-19 (Ceaco), con 88 camas de cuidados leves y moderados; y la reasignación de 48 camas en el Hospital del Trauma. Aquí también se incluyen las carpas que se colocaron en la zona fronteriza para atender pacientes con COVID-19”.
Ahora y tras este primer informe, Salud y la OPS continuarán con el análisis del gasto público en salud en Costa Rica, por lo que se presentarán dos informes más, el que tendrá datos del 2021 y que estará listo en el cuarto cuatrimestre de 2022; y posteriormente uno sobre el trienio 2021-2021-2022.
Con esta serie de análisis la ciudadanía podrá conocer a cuánto asciende el gasto anual en atención de salud por la COVID-19 y, según finalizó el ministro Salas:
Nos permitirá entender como es la dinámica del gasto en medio de una pandemia y eventualmente pensando en un periodo de recuperación, como lo sería el 2022. Esperamos que estos estudios se mantengan y que esta metodología nos permita conocer los gastos para ver cómo podría ser el gasto durante una pandemia, algo que no se tenía antes estimado, a fin de que en futuras ocasiones podamos hacer ajustes en momentos de emergencia y donde se rompe el molde de lo estándar, como lo es una pandemia".
Finalmente, el asesor en sistemas y servicios de salud de la OPS, Gustavo Mery, señaló que:
La pandemia ha puesto en evidencia la necesidad de mejorar la inversión pública en salud de manera que se pueda proteger de manera efectiva a la población en sus diferentes necesidades. El seguimiento y análisis del gasto es una herramienta fundamental para que se pueda garantizar la transparencia sobre el destino real del gasto en el sector salud, además de brindar información estratégica con la cual planificar inversiones en el sector salud y la preparación del mismo respecto a futuras amenazas sanitarias".
La metodología utilizada en este estudio fue la SHA 2011 (System of Health Accounts 2011), un sistema desarrollado por la OCDE, por la Oficina Europea de Estadística (Eurostat) y por la OMS que adapta las Cuentas de Salud a la rápida evolución de los sistemas sanitarios alrededor del mundo, con el fin de generar mayor y mejor información para el análisis del sector.
La metodología ya se había utilizado en el 2018 cuando el Ministerio de Salud publicó el Informe de Cuentas de Salud de Costa Rica para el periodo 2011-2016.