— Le invito a leer cómo inicia este texto de La Voz de Guanacaste:
“Anner Angulo Leiva es el director del hospital de La Anexión y se define a sí mismo y a su equipo como pro vida, un término que alude a que un feto tiene el mismo derecho a vivir que una madre, no importan las condiciones”.
—Don Anner va más allá: “No vamos a practicar un aborto terapeútico en este centro porque somos pro vida”. Estamos hablando del DIRECTOR del hospital. ¿Este señor sabrá lo que es un aborto terapéutico? Aparentemente no, porque según dice La Voz “Para Angulo, en la posición de su equipo no se impone ni se impondrá ningún juicio moral, solamente el criterio médico”. ¡Menos mal!
— Lo más impresionante es que, incluso si el presidente de la República firma la norma técnica Angulo asegura que el hospital mantendría su posición: “no vamos a practicar un aborto terapeútico en este centro, porque tanto enfermería como parte médica somos pro vida”.
— Estamos hablando, repetimos por vez número un millón, de un servicio de salud que está estipulado en la ley desde 1971. ¡Lo que este médico dice es muy grave! ¿Cómo es posible que casi CINCUENTA años después de que se contempló el aborto terapéutico en Costa Rica estemos leyendo a la máxima autoridad de un hospital decir algo así?
— * Respira hondo *.
— En fin. En momentos donde pocos faros de optimismo quedan en torno a la capacidad de tomar decisiones “incómodas” del presidente en temas “secundarios” Patricia Mora levanta la bandera en el Semanario y en una muy recomendada entrevista, dice:
“Es decir, insisto en que, en relación con don Carlos Alvarado, quiero tener la confianza en la palabra que él empeñó en las elecciones. Él sabe que hubo un importante y aplastante número de votantes en las elecciones y, entre ellos, mujeres que, sin ser de su partido, fuimos a votar por él porque ofreció una agenda de derechos humanos y de igualdad para las mujeres. Yo estoy totalmente segura de que él va a cumplir”.
— Ya veremos señora ministra, ya veremos...
Bonus Track: Nuestros feminismos no violentan de Alejandra Arburola Cabrera.
Esta nota es parte del Reporte: En Costa Rica nunca nadie tiene culpa de nada ¡somos el país de las coincidencias! del 6 de setiembre.