Iniciativa busca garantizar el derecho de la población a contar con información clara y sencilla sobre los alimentos y bebidas preenvasadas.
El Colegio de Profesionales en Nutrición de Costa Rica (CPN) reafirmó su posición a favor del Proyecto de Ley 24.840 de Etiquetado Frontal de Advertencia, actualmente en discusión en la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa.
La iniciativa, presentada por la liberacionista Andrea Álvarez Marín, busca garantizar el derecho de la población a contar con información clara y sencilla sobre los alimentos y bebidas preenvasadas que contienen exceso de azúcares, sodio, grasas saturadas, grasas trans, edulcorantes o cafeína.
La presidenta del CPN, María Bolaños, recordó que esta propuesta es el resultado de más de ocho años de trabajo continuo:
Desde la legislatura pasada, primero con la diputada María José Corrales y luego con la diputada Andrea Álvarez, el colegio ha dado un acompañamiento constante y responsable para que hoy tengamos una propuesta seria y alineada con las recomendaciones internacionales”.
El CPN participó activamente en las consultas técnicas que solicitó la Asamblea Legislativa para mejorar el proyecto, aportando criterios científicos y revisiones de fondo.
La presidenta destacó que, pese a la presión ejercida por sectores de la industria alimentaria, el texto final incluye transitorios que brindan un plazo razonable a las pequeñas y medianas empresas (pymes) para adaptar sus empaques y agotar existencias, sin que esto implique costos desproporcionados.
Los argumentos de que este proyecto perjudica a las pymes no tienen fundamento. Las empresas cambian constantemente sus empaques por razones comerciales y de mercadeo, por lo que también pueden incluir los sellos de advertencia. Lejos de ser una carga, esta medida es una oportunidad para fortalecer la confianza del consumidor”.
Desde el colegio recordaron que países de América Latina como Chile, México, Perú y Uruguay ya tienen sistemas de etiquetado frontal con resultados positivos en la reducción del consumo de productos ultraprocesados.
Agregaron que estudios locales también demuestran que la población costarricense reconoce mejor la información nutricional cuando los empaques incluyen octágonos negros de advertencia, lo que facilita decisiones informadas al momento de comprar.
La presidenta aseguró que se trata de una medida costo-efectiva, con un gran impacto en salud pública.
El etiquetado frontal no prohíbe alimentos, pero sí da a las personas la información necesaria para decidir qué consumir. Hoy Costa Rica enfrenta que casi un 70% de la población adulta vive con exceso de peso y con enfermedades crónicas no transmisibles; necesitamos políticas públicas claras y firmes que nos ayuden a revertir esta situación”.
Además, el texto del proyecto establece que productos que contengan edulcorantes o cafeína deberán incluir leyendas de advertencia específicas que indiquen que no son recomendables para niños y niñas.
Esto es un avance fundamental en la protección de la niñez y la adolescencia, quienes son los más vulnerables a los efectos del consumo excesivo de ultraprocesados”.
El colegio recordó que esta discusión no es nueva en el país. En 2014, con la aprobación del Reglamento de Sodas Escolares, la industria ya se vio obligada a reformular productos para reducir sodio y azúcares.
El CPN también destacó que este proyecto responde a criterios de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), que recientemente ratificó la validez del etiquetado frontal de advertencia como herramienta eficaz para toda América.
Los parámetros para asignar sellos no son arbitrarios, sino que responden a estándares internacionales basados en evidencia científica, agregaron.
Los octágonos negros son el sistema más efectivo porque transmiten un mensaje claro y rápido. No se trata de asustar a nadie ni de imponer prohibiciones, sino de que la población pueda tomar una decisión informada con el producto en la mano. Es un derecho básico a la información”.
Bolaños recordó que la misión del colegio es promover una mejor nutrición para la población y respaldan el proyecto de ley ya que consideran que es un pilar importante en esa ruta.
La iniciativa de Álvarez Marín se presentó en febrero del presente año, el mismo día en que la Comisión Permanente Especial de Asuntos de Discapacidad y Adulto Mayor rechazó un proyecto idéntico que pretendía implementar el etiquetado frontal con advertencias nutricionales para productos alimenticios y bebidas.