Desde el Colegio de Trabajadores Sociales exigen acciones urgentes contra estas problemáticas.
El Colegio de Trabajadores Sociales, por medio de un comunicado de prensa, expresó su preocupación e instó a las autoridades y a la sociedad en general a atender con urgencia el aumento de la desigualdad social y la precarización de la vida en Costa Rica.
Más allá de las cifras, la pobreza y la desigualdad afectan diariamente a cientos de miles de personas en el país, según indicaron los trabajadores sociales. Además, agregaron que datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) evidencian que en febrero de 2024 la tasa de pobreza fue del 20,61%, mostrando una leve reducción respecto al mismo mes de 2023. Para el Colegio "este dato es cuestionable y merece un análisis más profundo, ya que la realidad cotidiana muestra un agravamiento y precarización de las condiciones de vida de la mayoría de la población".
Por su parte, el presidente del Colegio de Trabajadores Sociales, Dr. Jorge Arturo Sáenz, se refirió al aumento constante de los precios de la canasta básica y la vulneración de los derechos laborales:
Es claro que el impacto de la inflación en los productos de la canasta básica, combinado con la falta de medidas efectivas para garantizar empleos dignos, agrava aún más la situación. Además, iniciativas como el aumento de la jornada laboral pueden profundizar las desigualdades, afectando, especialmente, a mujeres con responsabilidades de cuidado, así como a jóvenes que estudian y trabajan”.
Frente a esta realidad, desde el Colegio manifestaron su preocupación por el progresivo debilitamiento de las políticas sociales y la falta de voluntad política para atender esta problemática con la urgencia que merece. Para estos profesionales, es fundamental que el Estado asuma un compromiso real, implemente acciones concretas y fortalezca las políticas públicas para garantizar mayor equidad y mejorar las condiciones de vida de toda la población.
“Hacemos un llamado urgente a la sociedad para visibilizar esta realidad y exigimos a las autoridades competentes, así como al Estado, una respuesta inmediata. Porque no se trata de cifras abstractas, sino de cientos de personas, entre mujeres, hombres, niñas, niños, adolescentes y personas adultas mayores, que no tienen lo necesario para vivir dignamente”, puntualizó Sáenz.
Finalmente, indicaron que la pobreza y la desigualdad social son fenómenos interrelacionados que afectan profundamente a las sociedades: "La pobreza implica la carencia de recursos para satisfacer necesidades básicas, mientras que la desigualdad social se refiere a la distribución inequitativa de estos recursos y oportunidades. Ambos están profundamente ligados a las relaciones sociales dentro del sistema capitalista, donde la acumulación de capital se sustenta en la explotación del trabajo".