Nombramiento de Ramírez vence el próximo 14 de marzo y el magistrado decidió no buscar un sexto periodo en la Sala III.
El magistrado de la Sala III, Jesús Ramírez Quirós, no buscará un sexto periodo en su cargo dentro de la Corte Suprema de Justicia, según confirmó esta tarde el despacho del magistrado. El nombramiento de Ramírez, quien integra la Sala III desde 1985, vence el próximo 14 de marzo.
Ramírez asumió el cargo en la Sala III a los 41 años y es el magistrado con más antigüedad en la actual Corte Suprema de Justicia. A pesar de haber permanecido en el cargo por cinco periodos completos, sus reelecciones estuvieron marcadas por votaciones en contra, que no alcanzaron la mayoría necesaria para evitar su continuidad en el cargo.
Durante su primer periodo como magistrado, Ramírez fue señalado por un informe de la Comisión de Narcotráfico en 1988 que concluyó que él pudo haber entorpecido la investigación sobre Ricardo Umaña, exagente del Organismo de Investigación Judicial. Tras esos cuestionamientos solo 18 congresistas respaldaron su continuidad en el puesto, mientras que 37 votaron para destituirlo y 2 se abstuvieron, por lo que no se obtuvo la mayoría de 38 votos necesarios para removerlo del cargo.
En el 2001, al momento de la votación para definir su continuidad por un tercer periodo, el entonces diputado José Miguel Corrales Bolaños (quien fue miembro de la Comisión de Narcotráfico que acusó a Ramírez en el 88) continuaba solicitando la no continuidad del magistrado, aunque al final su reelección pasó con 23 a favor y 29 en contra.
Para su tercera reelección, en 2009, la Asamblea Legislativa ni siquiera llegó a votar la continuidad del magistrado, por lo que se aplicó la no objeción tácita que establece la Constitución Política y Ramírez pudo continuar en su cargo.
En el año 2017, cuando Ramírez esperaba su cuarta reelección, la Comisión de Nombramientos decidió no llamarlo a rendir cuentas antes de recomendar a la Asamblea su renovación. En ese entonces la Comisión era dirigida por el diputado Jorge Rodríguez Arara del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), y aunque existió un dictamen de minoría oponiéndose a la reelección del magistrado, la cuarta reelección se dio con 28 votos a favor y 22 en contra.
Todas las votaciones para renovar el nombramiento de Jesús Ramírez se realizaron con votaciones secretas, las cuales fueron eliminadas por la actual Asamblea Legislativa, que ahora requiere que tanto los nombramientos como las reelecciones a la Corte Suprema de Justicia sean realizadas con votación pública.
Durante su último periodo el magistrado Ramírez fue sancionado con dos meses de suspensión sin goce de salario en junio del 2018 por la Corte Suprema de Justicia, junto Carlos Chinchilla Sandí, Doris Arias Madrigal y María Elena Gómez Córtes (suplente), por desestimar una causa de tráfico de influencias seguida contra los entonces diputados Otto Guevara Gutt y Víctor Morales Zapata, usando hechos falsos. De los titulares sancionados, Ramírez fue el único que cumplió la sanción, ya que Chinchilla Sandí y Arias Madrigal se pensionaron antes de que les aplicaran la sanción.
Tras ese evento, Ramírez llegó a ser el único integrante titular de la Sala III, y luego de que se llenaran las otras cuatro vacantes, en enero del 2020 se le nombró como presidente de dicha Sala. Sin embargo, Ramírez renunció a ese cargo seis meses después, luego de cuestionamientos por una audiencia del caso UPAD, en la que se mostró desubicado e incurrió en errores en el manejo del proceso.