El juicio es contra una mujer por el delito de peculado, en perjuicio de los deberes de la función pública.

El Tribunal de Juicio de Goicoechea se trasladó al territorio indígena Bribrí para realizar un debate del 17 al 19 de junio, en las Instalaciones del Instituto de Desarrollo Rural (INDER), sede Bribri de Talamanca, Limón.

El juicio está señalado para dichos días, iniciando a las 8:30 a.m., cuenta con ocho testigos y asisten el Ministerio Público; la Procuraduría General de la República como representante del Estado en su condición de actor civil y defensa particular. El tribunal está integrado por los jueces Andrés Saborío Cascante, María Ester Vargas Monge y Ericka Calvo Navas.

La oficina de prensa del Poder Judicial detalló que el debate es contra una mujer de apellido Pitar, por el delito de peculado, en perjuicio de los deberes de la función pública.

Al parecer Pitar en el transcurso del año 2015, fungió como funcionaria del Ministerio de Educación Pública (MEP), desempeñándose como directora de un centro educativo; se presume que ella junto con un hombre idearon un plan con el fin de sustraer fondos públicos, el cual consistía en presentar facturas de bienes y servicios que no fueron autorizados por todos los miembros de la junta, ni eran necesitados por el centro educativo.

En apariencia,  le indicaban al contador público de la junta que necesitaba que se les autorizara la salida de varios cheques con el fin de sufragar gastos y necesidades del centro educativo, y que por motivos de urgencia no contaba con el respectivo acuerdo de la junta de educación.

Supuestamente, con la finalidad de sustraer dineros públicos bajo su custodia y administración, procedieron a indicarle al contador que le autorizara el pago de las facturas sin timbrar por un monto total de cercano al millón y medio de colones. 

Aparentemente, en otra oportunidad se giraron otros cheques, por el monto de doscientos setenta mil colones, por concepto de pago de dos muebles de cocina; otro de trescientos dieciocho mil ciento treinta y cinco colones, por concepto de pago de reparaciones de cocina; así como el cheque por un monto de quinientos ochenta y ocho mil colones, por concepto de pago de utensilios de cocina.

Se presume que estos cheques fueron retirados por la imputada, sustrayendo con su actuar fondos públicos pertenecientes a la Junta de Educación de la Escuela Líder de Bribri.