La relatora especial sobre la situación de los derechos humanos en los Territorios Palestinos Ocupados, Francesca Albanese, expresó su preocupación por la comisión de actos genocidas contra el pueblo palestino en Gaza.

En una sesión ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, Albanese afirmó que Israel ha perpetrado tres actos de genocidio con la intención requerida, causando graves daños físicos y mentales, infligiendo condiciones de vida que provocan destrucción parcial o total, e imponiendo medidas para impedir nacimientos dentro de la población palestina.

Cuando la intención genocida es tan conspicua, tan ostentosa, como lo es en Gaza, no podemos apartar la vista, debemos hacer frente al genocidio; debemos prevenirlo y debemos castigarlo.

La experta señaló que varios Estados miembros han prestado apoyo a Israel, exacerbando la situación y contribuyendo a la devastación en Gaza. En este sentido, llamó a imponer un embargo de armas y sanciones al país.

Además de las 30.000 víctimas mortales, que incluyen a miles de niños, las fuerzas israelíes han utilizado un arsenal masivo en un área densamente poblada, incluyendo 25.000 toneladas de explosivos y municiones no guiadas; al tiempo que se obstruye la entrega de ayuda humanitaria y se imponen restricciones extremas en entrega de agua, alimentos y otros recursos básicos.

En las dos primeras semanas, Israel impidió que entrara en Gaza toda la ayuda humanitaria, y en los meses siguientes ha impuesto restricciones extremas al agua, los alimentos, la electricidad y el combustible (…) Esta política deliberada ha inducido una grave inseguridad alimentaria rápida y sostenida en toda la población, y los atrapados en el norte se alimentan de piensos y hierba.

Albanese resaltó que Israel ha destruido gran parte de la infraestructura civil y las tierras agrícolas en Gaza en menos de seis meses y que se han documentado soldados israelíes jactándose de asesinatos de familias, madres, niños, del bombardeo de hogares, mezquitas y escuelas, así como vídeos que "les muestran burlándose sádicamente y humillando a sus víctimas palestinas".

Según Albanese, Israel habría distorsionado las normas del derecho internacional humanitario para justificar la violencia contra los palestinos y no ha hecho distinción entre civiles y combatientes ni entre objetivos militares y civiles. 

Además, mencionó que el genocidio en Gaza sería parte de un proceso más amplio de colonización destinado a eliminar a los palestinos nativos, proceso que ha durado más de 76 años y que ha sido condonado por Occidente.

Durante más de 76 años, este proceso ha oprimido a los palestinos como pueblo de todas las formas imaginables, aplastando su derecho inalienable a la autodeterminación demográfica, económica, territorial, cultural y política. El mundo ve ahora el amargo fruto de la impunidad concedida a Israel. Ha sido una tragedia anunciada.

Una persona arrastra pertenencias por las calles de Khan Younis, en el sur de la Franja de Gaza. Créditos: UNICEF/Eyad El Baba

En cuanto a los asentamientos israelíes en Cisjordania, la Alta Comisionada Adjunta para los Derechos Humanos, Nada Al-Nashif, presentó un informe que destaca una aceleración en la expansión de estos asentamientos entre noviembre de 2022 y octubre de 2023, así como un aumento en la violencia de los colonos contra los palestinos.

El informe señala que aproximadamente 700.000 colonos israelíes viven en 300 asentamientos ilegales en Cisjordania, y que se han aprobado miles de nuevas unidades de vivienda en estos asentamientos durante el período analizado.

Además, se documentaron casos de violencia de colonos contra palestinos, con más de 800 incidentes registrados en un periodo de nueve meses.

El informe también menciona la demolición de estructuras palestinas y la transferencia de competencias administrativas relacionadas con los asentamientos a autoridades civiles israelíes, lo que podría facilitar la anexión de Cisjordania en violación del derecho internacional.

La ONU registró 835 incidentes de violencia de colonos en los nueve primeros meses de 2023, la cifra más alta de la que se tiene constancia. Entre el 7 y el 31 de octubre de 2023, la ONU registró 203 ataques de colonos contra palestinos y detectó el asesinato de ocho palestinos a manos de colonos, todos ellos con armas de fuego.

De los 203 ataques de colonos, más de un tercio implicaron amenazas con armas de fuego, incluidos disparos. Además, en casi la mitad de todos los incidentes ocurridos entre el 7 y el 31 de octubre participaron fuerzas israelíes que escoltaban o apoyaban activamente a colonos israelíes mientras llevaban a cabo los ataques.

Destruyeron las tiendas, los paneles solares, las tuberías de agua y los depósitos de los palestinos, profiriendo insultos y amenazando con que, si los palestinos no se marchaban en 24 horas, los matarían. Después del 7 de octubre, la Oficina de derechos humanos de Naciones Unidas documentó casos de colonos que vestían total o parcialmente uniformes del ejército israelí y portaban fusiles del ejército, acosando y atacando a palestinos, incluso disparándoles a quemarropa.

Al-Nashif dijo que Israel demolió 917 estructuras de propiedad palestina en Cisjordania, incluidas 210 en Jerusalén Oriental, de nuevo uno de los índices más rápidos registrados. Como resultado, más de 1000 palestinos fueron desplazados.

Dato D+: Los relatores especiales y otros expertos independientes en derechos forman parte de lo que se conoce como Procedimientos Especiales del Consejo de Derechos Humanos. No forman parte del personal de la ONU, son independientes de cualquier gobierno u organización y no reciben un salario por su trabajo. Francesca Albanese es la relatora especial sobre la situación de los derechos humanos en los Territorios Palestinos Ocupados desde 1967.