Gilbert Hernán de Los Ángeles Bell Fernandez es el primer tico en la historia en entrar en esta lista negra para Estados Unidos.

La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos ordenó, este miércoles, que se sancionen y bloqueen los activos como cuentas y propiedades que estén asociados a empresas del costarricense Gilbert Hernán de Los Ángeles Bell Fernandez, alias Macho Coca, en territorio estadounidense.

La orden se realizó luego de que el departamento designase al nacional como un "narcotraficante costarricense conocido no solo por el volumen de drogas que mueve sino por la violencia con la que opera".

Según indicó el Subsecretario del Tesoro para el Terrorismo e Inteligencia Financiera, Brian E. Nelson al referirse al caso de Bell Fernández:

El importante aumento de la violencia debido al tráfico de narcóticos en Costa Rica resalta el papel cada vez más importante del país en las redes de distribución trasnacional. El Tesoro continuará utilizando todas las herramientas disponibles para quebrantar el tráfico trasnacional de narcóticos en el hemisferio occidental para ayudar a prevenir una mayor desestabilización en la región".

Según el Departamento, alias Macho Coca es "uno de los más grandes narcotraficantes en Costa Rica, moviendo grandes cantidades de cocaína; también es conocido como uno de los más violentos narcotraficantes en Limón".

A su vez, las autoridades norteamericanas agregaron que:

OFAC designó a Bell de conformidad con la Orden Ejecutiva (E.O. por sus siglas en ingles) 14059 por haberse comprometido, o haber intentado comprometerse en actividades o transacciones que hayan materialmente contribuido, o represente un significante riesgo material para contribuir a la proliferación internacional de drogas ilícitas o a sus medios de producción. La acción de hoy es resultado de la estrecha colaboración con la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) oficina en Costa Rica y las autoridades costarricenses".

Según la oficina norteamericana, como resultado de la acción de hoy todas las propiedades o intereses en las propiedades de Bell que se encuentren dentro de los Estados Unidos o en posesión o control de personas estadounidenses, "están bloqueadas y deben reportarse a la OFAC":

Además, se bloquea cualquier entidad que sea propiedad directa o indirectamente, individualmente o en conjunto, en un 50 por ciento o más de una persona bloqueada. A menos de que haya una licencia publicada en lo general o en lo particular por OFAC, o esté exento, las regulaciones de la OFAC generalmente prohíben todas las transacciones realizadas por personas estadounidenses o personas dentro (o en tránsito) de los Estados Unidos que involucren cualquier propiedad o interés en la propiedad de personas designadas o bloqueadas".

También se agregó que "las personas que participen en ciertas transacciones con la persona designada hoy pueden estar expuestas a sanciones o sujetas a una acción de ejecución".

Primer costarricense en la lista negra

Según indicaron el fiscal adjunto del Ministerio Público, Mauricio Boraschi Hernández y el director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Randall Zúñiga López en una conferencia de prensa convocada por las dos instituciones nacionales para hablar del tema esta mañana, Bell Fernandez se convierte, así, en el primer costarricense en ingresar a esta lista negra de personas sancionadas por la OFAC de Estados Unidos.

Las autoridades estadounidenses acusan a alias "Macho Coca" de haber iniciado como un pescador que luego logró "generar múltiples inversiones en construcción". Según señaló Zúñiga en la conferencia de esta mañana:

Esta persona ha logrado permanecer inadvertido públicamente, porque tiene un rol de cabecilla, porque da las órdenes de un tercero. Se cuida mucho en sus comunicaciones por celular y evita que se vincule con algunas de las personas, por eso ha sido difícil llegar pero nosotros sí sabemos de la evidencia que tiene la DEA de él".

Según los Estados Unidos, durante las últimas dos décadas Costa Rica se ha transformado "en un gran centro de rutas por tráfico de narcóticos a través de las Américas", por lo que desde 2010 se emitió un memorando identificando a Costa Rica "como un importante país de tránsito de drogas o un gran productor de drogas ilícitas", lo que ha generado que ahora el territorio nacional sea "un punto de almacenamiento y trasbordo de drogas, incluso para violentas organizaciones criminales costarricenses".