COP28 ha estado bajo el ojo del huracán por designación de petrolero para presidir negociaciones climáticas.

El presidente de los Emiratos Árabes Unidos (EUA), el jeque Mohamed bin Zayed Al Nahyan, extendió la invitación formal al presidente de la República, Rodrigo Chaves Robles, a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2023 (Cop28) que se llevará a cabo en Expo Ciudad Dubai del 30 de noviembre al 12 de diciembre.

La embajadora de los EAU en Costa Rica, Rawdha Alotaiba, fue la encargada de dar el mensaje a Chaves Robles en una reunión durante la cual las dos partes discutieron los preparativos para albergar la COP28, así como las oportunidades para mejorar la cooperación entre los dos países.

Medios internacionales destacaron que Alotaiba visualizó que la cumbre será un hito importante, ya que marca el primer "balance global" del progreso en la implementación de los objetivos del Acuerdo de París.

Delfino.cr consultó a Casa Presidencial sobre la asistencia de Chaves Robles a este evento, sin embargo al cierre de esta noticia no se obtuvo respuesta.

Evento bajo la lupa

La cumbre climática Cop28 ha estado en el ojo del huracán debido a que, en un evento donde los líderes políticos del mundo deciden acciones para luchar contra el cambio climático, se dio la designación del Sultan Al-Jaber, CEO de la petrolera "Abu Dhabi National Oil Co", para presidir las negociaciones.

El sitio de noticias especializado Climate Home News detalló que Al-Jaber dirige la Compañía Nacional de Petróleo de Abu Dabi (Adnoc), de propiedad estatal, y que es la duodécima compañía petrolera más grande del mundo. 

También puntualizaron que el sultán es una figura clave en la política climática y energética de su país desde hace una década, aproximadamente. "Si bien Al Jaber ha promovido las energías renovables, en noviembre de 2021 pidió una mayor inversión global en petróleo y gas", resaltaron.

Según el medio de comunicación internacional Al Jazeera, la firma de Al-Jaber bombea unos 4 millones de barriles de crudo por día y espera expandirse a 5 millones por día. Dichas prácticas generan altas emisiones de dióxido de carbono, compuesto que las convenciones climáticas anuales de la ONU pretenden limitar.

Las autoridades gubernamentales de Emiratos Árabes Unidos fueron las encargadas de nombrar a Al Jaber como designado para llevar las conversaciones en la COP28. Jaber es un hombre de confianza del presidente de los Emiratos Árabes Unidos, el jeque Mohammed bin Zayed Al Nahyan.

En su anuncio, la agencia de noticias estatal WAM dijo que los Emiratos habían invertido “más de 50.000 millones de dólares en proyectos de energía renovable en 70 países, con planes de invertir un mínimo de 50.000 millones de dólares durante la próxima década”. 

En Costa Rica, desde el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), el jerarca Franz Tattenbach Capra celebró el nombramiento:

Con su liderazgo y su compromiso, podemos esperar una COP que sin duda alguna, desarrollará una agenda propicia para permitir a los países demostrar cómo están cumpliendo con sus compromisos climáticos". 

Gobierno de Chaves sin protagonismo en la última COP

Durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2022 (COP27), Costa Rica pasó desapercibido en las negociaciones climáticas. Ejemplo del poco interés que puso el Ejecutivo es que el mandatario Rodrigo Chaves Robles ni siquiera asistió.

Además, en la cumbre el país decidió alejarse del liderazgo que asumió con Dinamarca en 2021 en el acuerdo Beyond Oil & Gas Alliance (BOGA o Alianza para ir Más Allá del Petróleo y el Gas Natural), para eliminar gradualmente la producción de petróleo y gas y dejar de otorgar permisos para nuevas exploraciones.

El jerarca del Minae, Tattenbach Capra, que lideró la delegación tica, mencionó que que BOGA no es ni será una prioridad de la actual administración.

Costa Rica no va a liderar diciendo 'estamos en Boga'. Costa Rica tiene mucho más que enseñar (al mundo) que decir 'vamos a prohibir esto...'”.

En la cumbre de 2021, 10 gobiernos nacionales y subnacionales respaldaron el lanzamiento del acuerdo. La entonces jerarca de ambiente y energía de la administración Alvarado Quesada, Andrea Meza, asumió como promotora junto con su homólogo danés, Dan Jørgensen.

Meza al momento del anuncio comentó que BOGA eleva la barra para la acción climática y cree que para abordar la crisis climática se necesita una eliminación gestionada pero decisiva de la producción de petróleo y gas.

En setiembre anterior, Tattenbach Capra mencionó a Delfino.cr que no es afín a la idea de apertura la exploración y explotación de gas natural en Costa Rica, que alguna vez mencionó el presidente Rodrigo Chaves en campaña. Sin embargo, no le gusta la idea de prohibir la práctica vía ley y calificó de imprudente el movimiento que lo busca.

Polémicas acciones a lo interno

Pese a que Tattenbach Capra dijo que "Costa Rica tiene mucho más que enseñar (al mundo) que decir 'vamos a prohibir esto", las acciones ambientales del gobierno a nivel interno han estado rodeadas de polémica.

Un ejemplo fue el rechazo conjunto de la Asamblea Legislativa y el Ejecutivo para no otorgarle un nuevo plazo cuatrienal al expediente que buscaba la ratificación del Acuerdo de Escazú.

El tratado regional fue impulsado por los gobiernos de Costa Rica y Chile y fue firmado por 24 países el 4 de marzo del 2018 en la ciudad costarricense de Escazú. Se trata del primer gran tratado medioambiental de la región y hasta la fecha 14 países lo han ratificado. 

En ese momento, el relator especial de la ONU sobre Derechos Humanos y Medio Ambiente, David Boyd, dijo que no entender cómo Costa Rica, al ser un país líder en temas de medio ambiente y derechos humanos, no logró avanzar con  el Acuerdo y lo calificó de "fracaso atípico". Asimismo, motivó a las personas costarricenses que defienden el derecho a un medio ambiente sano, a que sigan adelante a pesar de tener un gobierno "retrógrado".

Otro caso es la de la Pesca de Arrastre, ya que desde el 23 de marzo el Gobierno autorizó oficialmente el inicio de nuevos estudios sobre pesca de arrastre, con el permiso respectivo para ocho embarcaciones camaroneras, con el fin de determinar si es sostenible o no.

Los nuevos análisis han recibido fuertes críticas debido a que la metodología parece sesgada a un interés pesquero sin tomar en cuenta las especies marinas que se pueden ver afectadas. Adicionalmente, expertos han cuestionaron el nulo acercamiento a la academia y a científicos para ejecutar las investigaciones.