El jueves pasado desde el Facebook del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad de Costa Rica se compartió un video titulado “Teorías de la conspiración: un análisis jurídico-epistemológico”.
La publicación generó reclamos en la comunidad universitaria porque la conferencia digital es impartida por el profesor Minor Salas Solís.
Contexto
Salas fue sancionado en el 2015 con ocho días de suspensión por hostigamiento sexual a una estudiante. Posteriormente fue acusado de acoso sexual por dos exalumnas en un proceso que ha enfrentado todo tipo de contratiempos. Estas denuncias se dieron a conocer en un reportaje publicado en 2019 por Semanario Universidad, medio que conversó con 10 mujeres que aseguraron haber sufrido acoso sexual e insultos por parte de Salas.
En agosto de este año la Sala Constitucional condenó a la Universidad de Costa Rica por su "falta de acción" ante la denuncia interpuesta en este caso. El medio Interferencia había denunciado que un año y nueve meses después de que se interpusieron las denuncias, la Comisión Institucional contra el Hostigamiento Sexual de la UCR no ha realizado ni una sola audiencia, pues el catedrático ni siquiera ha sido notificado sobre las causas en su contra.
Según explicó Interferencia:
Las autoridades de la universidad no han podido tener contacto directo con Salas para notificarle de manera personal, como dicta la ley. Las justificaciones se relacionan con que el docente ha hecho teletrabajo, que no se pudo acceder a su vivienda por estar en un residencial privado en el que 'nadie salió a abrir' y a reiteradas incapacidades por enfermedad".
Precisamente esos hechos motivaron la condena de la Sala Constitucional a la UCR: “Después de analizar los elementos probatorios aportados, este Tribunal acredita la lesión a los derechos fundamentales de la amparada (...) ”. De hecho, esta fue la segunda condena para la Universidad de Costa Rica por lesionar los derechos fundamentales de mujeres que denunciaron acoso sexual al no dar el seguimiento requerido a los casos.
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Debido a los hechos aludidos, la publicación de la conferencia de Salas en el espacio digital del Instituto de Investigaciones Jurídicas generó malestar dentro de la comunidad universitaria. Por esa razón, el propio Instituto emitió ayer un comunicado aludiendo a los hechos.
En el texto, el IIJ-UCR explica que es obligación ineludible de sus investigadoras e investigadores presentar periódicamente y a todo público, los avances y resultados de sus pesquisas y que visto que Minor Salas tiene un vínculo laboral con la Universidad de Costa Rica (está nombrado en el IIJ) esas obligaciones le alcanzan.
El IIJ aclaró también que no solo no tiene potestad alguna sobre los nombramientos de la universidad, sino tampoco sobre los procesos disciplinarios que puedan existir en contra de funcionarios nombrados por la universidad: “Las acusaciones y procesos disciplinarios que puedan existir en su contra, recaen bajo la competencia de autoridades universitarias superiores, respecto de los cuales tampoco tiene incidencia ningún miembro del IIJ”.
Asimismo, el instituto explicó que si bien Salas debe cumplir con las obligaciones propias de su puesto, ninguna de ellas implica contacto alguno con estudiantes. Y agregó:
La emisión, de la conferencia del profesor Salas, por lo tanto, al igual que las realizadas por otras investigadoras e investigadores adscritos, es consecuencia del cumplimiento exigido de sus obligaciones y, bajo ninguna circunstancia, representa toma de partido alguna del IIJ frente a los procesos que dicho docente enfrente”.
Por último el instituto destacó que “como nunca antes en su historia, se ha dedicado a la materialización de políticas de paridad de género en la conformación de sus órganos colegiados (Consejo Asesor, Consejo Científico), de las personas que realizan sus investigaciones, así como también a ejecutar nuevas investigaciones con enfoque de género, en particular sobre la relevancia, exclusión y formas de violencia estructural contra las mujeres en diversos ámbitos de la realidad y de las ciencias jurídicas”.
El proceso administrativo contra Salas sigue en curso en la Universidad de Costa Rica.
