La Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología de Costa Rica acordó que la segunda dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech contra la COVID-19 se coloque 12 semanas (2.76 meses) después de la primera.
La medida aplicará para los grupos prioritarios de vacunación 3 (18 a 57 años con factores de riesgo), 4 (educadores públicos y privados, personal de CAIs, funcionarios de albergues del PANI, privados de libertad, trabajadores del sistema 9-1-1) y 5 (todos los demás mayores de 18 años no incluidos en los otros grupos prioritarios).
Según explicó el ministro de Salud, Daniel Salas Peraza, la medida se tomó dada la nueva evidencia científica y con la decisión se igualarán los tiempos de espera para la segunda dosis a la de AstraZeneca, que desde un inicio se decidió separar ambas dosis por 12 semanas.
Salas aclaró, sin embargo, que el grupo prioritario 2 (mayores de 58 años) se continuará con el esquema de 21 días entre dosis.
La medida augura un aceleramiento de la colocación de primeras dosis en los grupos 3, 4 y 5, sumado al hecho de que la Comisión de Vacunación dio luz verde para que todas las áreas de salud inicien la vacunación del grupo 3, eliminando la restricción previa de que solo podían hacerlo aquellas con una cobertura del 80% como mínimo en la aplicación de primeras dosis en el grupo 2.
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Un estudio reciente en Israel mostró, además, que una sola dosis de la vacuna de Pfizer contra la COVID-19 es altamente efectiva, hasta en un 85%.
Delfino.cr publicó cuatro días atrás que un estudio realizado en el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, publicado la semana pasada por la revista Nature, reveló que posponer la segunda dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech a 11 o 12 semanas después de haber recibido la primera, aumentó los anticuerpos contra la COVID-19 en las personas mayores de 80 años.
La publicación recapituló que frente a un suministro limitado de vacunas, el Reino Unido decidió el 30 de diciembre de 2020 ignorar la recomendación del dúo farmacéutico de que la segunda dosis de su vacuna debe colocarse tres semanas después de la primera y aumentó dicho plazo de espera a 11-12 semanas, para así incrementar la cantidad de personas con primera dosis y disminuir las hospitalizaciones y las muertes por coronavirus.
Gayatri Amirthalingam, epidemiólogo del Public Health England en Londres y coautor de la prepublicación, detalló durante una rueda de prensa que la decisión del Reino Unido de posponer la segunda dosis "ha dado sus frutos".
Amirthalingam y sus colegas estudiaron a 175 receptores de la vacuna mayores de 80 años que recibieron su segunda dosis de Pfizer a la tercera semana, u 11-12 semanas después de la primera dosis. El equipo midió los niveles de anticuerpos de los receptores contra la proteína spike del SARS-CoV-2 y evaluó cómo las células inmunes (llamadas células T, que pueden ayudar a mantener los niveles de anticuerpos con el tiempo), respondieron a la vacunación.
El estudio encontró que los niveles máximos de anticuerpos en las personas que esperaron 12 semanas para recibir la vacuna de refuerzo eran 3.5 veces más altos que las personas que solo esperaron las 3 semanas recomendadas por Pfizer. Por otro lado, los niveles máximos de células T en aquellos que esperaron las 11-12 semanas fue menor, pero eso no se tradujo en que los niveles de anticuerpos descendieran más rápidamente durante las nueve semanas posteriores a la vacuna de refuerzo.
Nature señaló que los resultados son tranquilizadores, pero el presidente del Grupo Asesor Estratégico de Expertos en Inmunización de la Organización Mundial de la Salud, Alejandro Cravioto, dijo que son específicos para la vacuna de Pfizer, que no está disponible en muchos países de ingresos bajos a medianos.
Según Cravioto, los países deberán considerar si las variantes que están circulando en su región particular podrían aumentar el riesgo de infección después de una sola dosis de vacuna.