El Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) afirmó este martes que los ahorros experimentados tras implementar el teletrabajo desde el estallido de la pandemia de COVID-19 ascienden a 7699 millones de colones, con corte al 31 de enero de este año.

De acuerdo con la empresa estatal, durante este primer año de emergencia sanitaria el personal en teletrabajo pasó de 2400 a 7000 personas, con resultados positivos en la productividad de la institución y de los funcionarios.

Los ahorros del Instituto se registran en las partidas de utilización de vehículos, alquileres de edificios y servicios de apoyo logístico. Asimismo, reportó ahorro en uso de materiales de oficina, servicios públicos y suministros.

El Instituto proyecta que esa misma cantidad de trabajadores continúe en teletrabajo, en el tanto la naturaleza de sus funciones lo permita.

“Demostramos que se puede laborar a distancia, con un mejor aprovechamiento del tiempo y la tecnología. Hemos garantizado la continuidad de los servicios de electricidad y telecomunicaciones durante la emergencia nacional, con beneficios adicionales para el Instituto, el personal y el país”, dijo Irene Cañas, presidenta ejecutiva del ICE.

Según la institución, las áreas en las que la presencia de personal en el lugar de funciones sigue siendo indispensable se concentran en las técnicas de operación y mantenimiento de telecomunicaciones y electricidad, así como las de seguridad y algunas comerciales.