Cada vez son más los llamados para que la Presidencia de la República vete el proyecto de ley que pretende reactivar la técnica de pesca de arrastre de camarón en el país y que recibió su segundo debate afirmativo el día de ayer en el plenario legislativo.
Este viernes se sumaron al llamado tanto el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) que hizo "un llamado especial para colocar la naturaleza en el centro de la recuperación post-pandemia", como la Universidad Nacional cuya Escuela de Biología, mediante una petición formal a Presidencia, solicitó el mismo rechazo por parte de Zapote.
La Constitución Política costarricense en su artículo 125, establece que si el Poder Ejecutivo no aprobase un proyecto de ley votado por la Asamblea, este tendrá la facultad de vetarlo y devolverlo a los diputados con las objeciones pertinentes; esta opción es válida para todo proyecto de ley, excepto el del Presupuesto Ordinario de la República.
Para proceder con el veto y según señala el artículo 126 de la Carta Magna, Zapote tiene como plazo los diez días hábiles contados a partir de la fecha en que se haya recibido el proyecto de ley aprobado. Si la iniciativa no se objeta dentro de ese plazo, Presidencia tendrá que sancionarlo y publicarlo en La Gaceta, convirtiéndolo en ley de la República.
Según señaló el PNUD en un comunicado enviado a la prensa este viernes:
Hoy, Costa Rica tiene la oportunidad de vetar la Ley Aprovechamiento Sostenible de la Pesca de Camarón en Costa Rica Expediente n.º 21.478, de manera coherente con los intereses más amplios de las poblaciones costeras, de la reputación del país como una nación líder en desarrollo sostenible y del bienestar de los ecosistemas marinos. Necesitamos “reconstruir mejor” invirtiendo en los cambios sistémicos que se requieren para acelerar el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que incluyen metas sobre el clima, la biodiversidad, el bienestar y la justicia hacia las poblaciones en mayor condición de vulnerabilidad".
Por su parte, en el pronunciamiento enviado la Escuela de Biología de la UNA enumeró los argumentos por los cuales se opone a esta aprobación y entre ellos destacó que la mayoría de los recursos pesqueros en Costa Rica están sobreexplotados o colapsados; que las redes de arrastre no son selectivas, ya que el principio de estos artes es remover los fondos marinos y atrapar todo lo que se cruce a su paso; y que esta pesca rompe las redes tróficas de los mares, ya que mata indiscriminadamente organismos que se ubican en los niveles más bajos de las cadenas alimenticias y la captura incidental causada por la esta actividad, es una amenaza a la diversidad de especies en zonas tropicales.
Estos argumentos fueron apoyados por el Centro de Investigación en Ciencias del Mar y Limnología (CIMAR) de la Universidad de Costa Rica (UCR), cuyo director Ingo Wehrtmann señaló que en Costa Rica no hay ni siquiera una idea de cuánto recurso de camarón hay disponible como para saber si vale la pena reactivar este tipo de pesca.
Los posicionamientos contra la aprobación de este proyecto llegaron incluso, desde el propio Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE), que este jueves en horas de la noche emitió un comunicado en el que la ministra de la artera, Andrea Meza Murillo, sostuvo que:
Respetamos la decisión del Poder Legislativo, pero lamentamos la ausencia de un sustento científico robusto para autorizar una actividad que pondrá en riesgo la biodiversidad marina y limita la oportunidad de una recuperación económica sostenible a los pescadores artesanales".
Para el MINAE la técnica de arrastre "no abrirá el camino al desarrollo económico de las costas y por el contrario genera mayor presión en ecosistemas y recursos ya sobreexplotados, o en especies en peligro de extinción, por tratarse de una técnica poco selectiva".
Si bien el ministerio no se refirió al tema de un eventual veto por parte del Ejecutivo, sí señalaron que tratarán de impulsar actividades económicas que contribuyan con una reactivación económica, "con técnicas más sostenibles y de mayor valor agregado entre las que se encuentran pesca artesanal con certificaciones, camarón sostenible en maricultura, actividades turísticas costeras, entre otras".
Finalmente y en horas de la tarde, David R. Boyd, el actual relator especial de la ONU sobre derechos humanos y medio ambiente, señaló que:
Pesca de arrastre es un desastre para el mar, la biodiversidad, la clima, y derechos humanos. Sería una violación de artículo 50 de la Constitución Política de Costa Rica (en referencia a la obligación de que toda persona tiene derecho a un ambiente sano y ecológicamente equilibrado). ¡Espero que el Presidente Carlos Alvarado rechace esta práctica insostenible!".
El proyecto Ley Aprovechamiento Sostenible de la Pesca de Camarón en Costa Rica Expediente n.º 21.478, fue votado este jueves en segundo debate, con 28 votos a favor y 18 en contra.