La Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (conocida popularmente como la Sala IV) le dio un mes al Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) para implementar las acciones necesarias para solucionar en un corto plazo los problemas generados por la escasez de agua en la población, sin perjuicio de otras soluciones a mediano y largo plazo que tenga proyectadas.

El Alto Tribunal declaró con lugar un recurso de amparo presentado por una vecina adulta mayor de Hatillo 2, quien alegó haber recibido agua por menos de dos horas en un día y que, al momento de interposición del recurso, tenía más de 40 horas sin ese líquido.

A través de la sentencia 2020-007754 del viernes 24 de abril, se declaró por unanimidad que de manera inmediata, el AyA debe disponer de lo necesario dentro del ámbito de sus competencias para que, ante interrupciones prolongadas del servicio de agua y teniendo en cuenta la pandemia de COVID-19, se garantice a la población afectada el suministro suficiente de ese líquido a los efectos de que pueda suplir sus necesidades básicas e implementar las recomendaciones de aseo que las autoridades de Salud han emitido.

"Según constató la Sala, el 9 de marzo de 2020, la zona de Hatillo 2 únicamente recibió agua de las de las 4:15 a las 6:00 horas, sin que al día siguiente se restableciera el servicio. Esa situación, cuyos perjuicios resultan notoriamente agravados por la pandemia de COVID-19, hacen necesaria la intervención de este Tribunal, pues a pesar de que los problemas de desabastecimiento en el país se han venido reflejando desde el 2017, AyA ha mantenido un rezago en la inversión en infraestructura, así como significativas pérdidas por concepto de agua no contabilizada, por ejemplo fugas, según registra la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos", señaló la oficina de prensa del Alto Tribunal.

La sentencia puntualizó que el reparto de agua por medio de camiones cisterna ha sido insuficiente y que, en medio de esta pandemia, el suministro de agua potable es fundamental para evitar la propagación del coronavirus y resguardar la salud de los habitantes.