Las obras benefician a más de 300 personas y fortalecen el tejido social y la conectividad en zonas rurales.

Dos comunidades de Puerto Viejo de Sarapiquí celebran esta semana la entrega de obras que mejoran sus condiciones de vida y promueven el desarrollo local. Se trata de la reconstrucción del salón de uso múltiple en el asentamiento El Amigo y de mejoras sustanciales al camino principal en el asentamiento El Progreso.

El nuevo salón comunal de El Amigo beneficiará directamente a unas 211 personas de la comunidad y zonas cercanas como Rojo Maca, Tres Rosales y La Esperanza. El espacio fue completamente reconstruido tras presentar deterioro estructural, y ahora estará disponible para actividades educativas, culturales, recreativas y de organización comunitaria. También podrá funcionar como albergue en caso de emergencia, dada la vulnerabilidad de la zona a inundaciones.

La inversión en esta infraestructura fue de ₡128 millones, destinados a garantizar un espacio digno y seguro que impulse la participación ciudadana y el fortalecimiento del tejido social.

En paralelo, en el asentamiento El Progreso se realizaron trabajos de mantenimiento correctivo sobre 700 metros de vía y mantenimiento preventivo en otros 3000 metros lineales del camino principal. Esta mejora beneficia a unas 138 personas que utilizan la ruta con regularidad para trasladarse a centros educativos, de salud y actividades económicas.

El nuevo estado de la vía facilita el acceso permanente, mejora la seguridad vial y reduce los efectos de las lluvias sobre la transitabilidad, impactando positivamente el comercio local y el turismo rural.

Ambos proyectos fueron ejecutados por el Instituto de Desarrollo Rural (Inder) y representan una inversión total de ₡296 millones. Según explicó su presidente ejecutivo, Ricardo Quesada, “estas iniciativas buscan mejorar la infraestructura básica de las comunidades rurales, garantizando acceso, seguridad y nuevas oportunidades para sus habitantes”.