Un estudio de la Cámara Nacional de Comerciantes y Afines (CANACODEA) señaló que en Costa Rica, 4 de cada 10 cigarrillos que se consumen son de contrabando y no cumplen la normativa en cuanto a pictogramas y advertencias establecidas por ley.

El Gerente de Asuntos Externos de ITP de Philip Morris CARICAM, Erick Salvador Pérez del Toro, comentó que durante 2020, alrededor de 3,6 billones de cigarrillos ilegales se comerciaron en Centroamérica y el Caribe, que representan un 40% del mercado y una defraudación fiscal de $250 millones anuales.

Para Costa Rica esto significa una pérdida fiscal anual de ¢38 billones, esta cifra es importante pues nos encontramos ante un déficit fiscal que viene creciendo y actualmente se encuentra en 8,1% del PIB, el más grande en los últimos 13 años”. 

De acuerdo con datos de la Policía de Control Fiscal, ya se tienen identificadas las localidades donde hay mayor incidencia de producto contrabandeado, que encabezan Purral y Liberia con un 65%. La lista la siguen Paraíso, Desamparados, San Isidro de El General, San José y Curridabat.

Estos números son muy preocupantes en el tema del contrabando. Es importante que nuestros afiliados conozcan el impacto que tiene el comercio ilícito en la comunidad y las diferencias entre un producto legal y otro ilegal, pues es lo que ofrecen a sus clientes”, comento Olga Vargas, de CANACODEA.

Lea: Comercio ilícito de cigarrillos representa pérdida fiscal anual de $250 millones

¿Cómo llegan los productos ilegales?

Al igual que otros países de la región centroamericana, Costa Rica experimenta, desde hace varios años, una fuerte ofensiva del comercio ilícito, que se vio potenciada durante la pandemia debido a que la distribución legal estuvo limitada. Entre los productos que se contrabandean se encuentran cigarrillos, bebidas alcohólicas, alimentos, textiles medicamentos y otros, que tienen una alta vinculación con el crimen organizado y que perjudica a los consumidores con productos de mala calidad, quienes los adquieren atraídos por sus precios bajos.

De acuerdo con Pérez del Toro, los cigarrillos ilegales llegan desde países como China, India y Emiratos Árabes a la zona libre de Colón, en Panamá, desde donde se declara que el contenedor sale con otro producto y se transporta hacia Costa Rica vía terrestre pasando por Paso Canoas o por mar.

Un contenedor de cigarrillos ilegales puede dejar una ganancia cercana a los US$2,3 millones, si se toman en cuenta que el costo de producción de una cajetilla de cigarrillo ilegal en un país asiático ronda los US$0,20, y su valor en el mercado varía de US$5 a US$10, mientras que el costo del contenedor es de US $100.000.