El grupo de expertos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) conformado tras la denuncia de una vacunación anómala en La Unión en perjuicio de un adulto mayor, concluyó que se trató de una situación aislada y que el resto de personas atendidas por el funcionario cuestionado, sí recibieron la vacuna contra la COVID-19.
De acuerdo con el reporte final de la intervención clínica integral realizada a las personas que fueron atendidas por ese ATAP, el 44% de las personas abordadas tuvieron efectos secundarios leves que coinciden con el suministro de la dosis; y al 55.3% se le aplicó un test de anticuerpos vacunales.
Según la Caja, de este último grupo de personas, el 99.3% arrojó resultado positivo en la prueba de anticuerpos. Con el 0.7% restantes no significa que no fueran vacunados, sino que el historial clínico del paciente justifica que se trate de una persona que no logró desarrollar anticuerpos en cantidad suficiente para ser detectados por la prueba que fue empleada.
La Caja del Seguro Social destacó que esa cifra de 0.7% personas con anticuerpos vacunales ausentes es, incluso, inferior al esperado según la literatura científica que se ha publicado respecto a la respuesta del organismo al recibir la vacuna contra el coronavirus.
El gerente general de la CCSS, Roberto Cervantes, afirmó que los resultados del informe final le satisfacen porque pueden asegurar que las personas están protegidas contra el virus y porque cumplieron con la comunidad de La Unión al tomar acciones integrales frente a la duda que había en el ambiente.
El director de la Dirección de Servicios de Salud de la Caja, Mario Mora, afirmó que la intervención realizada refleja que la respuesta institucional fue responsable, empática y científica; mientras que la oficial de bioética del grupo de expertos, Sandra Rodríguez, afirmó que el diseño del abordaje cumplió con todos los criterios necesarios para apoyar a las personas en su derecho a la salud y acompañarlos en su esfuerzo de protección frente a la pandemia.
La Gerencia Médica de la Caja anunció que el equipo técnico científico compuesto por inmunólogos, infectólogos, especialistas en farmacoepidemiólogía y bioética se mantendrá conformado de manera permanente para atender cualquier otro incidente apartado del protocolo de aplicación de las vacunas.
El grupo está integrado por los médicos Dra. Marjorie Obando y el Dr. Hugo Marín (de la dirección de Farmacoepidemiología), Dr. Jorge Chaverri Murillo (infectólogo del hospital Calderón Guardia), Dra. Olga Arguedas Arguedas (inmunóloga del Hospital de Niños), Dra. María Paz León Bratti (inmunóloga del hospital México) y la Dra. Sandra Rodríguez Ocampo (especialista en bioética del CENDEISSS).
¿Qué pasará con las personas con "anticuerpos ausentes"?
De acuerdo con la Caja, de las personas atendidas 816 (56%) solicitaron prueba de anticuerpos, pero solo 731 se presentaron a la cita para la toma de muestra de laboratorio y, de ese grupo, solo en cinco personas (0.7%) el resultado fue de anticuerpos ausentes.
Los médicos volvieron a contactar a todos los usuarios explicándoles sus resultados y por qué el resultado era así en función de la evidencia médica más actualizada y su condición de salud personal. "No existen aún valores establecidos en los resultados de anticuerpos vacunales que garanticen la protección, esto se llama técnicamente “correlatos de protección”", dijo la institución.
El análisis individualizado de la condición clínica de los cinco casos con anticuerpos negativos comprobó que cuatro de los cinco pacientes tienen factores de riesgo suficientes para condicionar la respuesta disminuida a las vacunas en general. El quinto, más allá de la edad, carecía de factores adicionales para explicar el resultado.
Eso significa que aun siendo vacunados y que su cuerpo pudiera tener defensas frente al virus a un nivel al que los exámenes no perciben, el resultado de anticuerpos está por debajo de la línea de detección del examen usado.
Por acuerdo del grupo de tres especialistas en inmunología e infectología, quienes valoraron en sesión clínica cada caso con base en la historia del expediente médico total, se determinó la pertinencia de ofrecerle a estas cinco personas una nueva dosis de la misma vacuna recibida.
Los expertos determinaron que, ante la incertidumbre generada por la denuncia pública de una presunta irregularidad en el proceso de vacunación, se le dará la oportunidad a cada uno de los cinco pacientes de recibir una dosis adicional de la vacuna, si así el usuario lo desea y firma un consentimiento informado luego de la explicación médica.
La doctora Olga Arguedas Arguedas, inmunóloga y directora del Hospital de Niños, afirmó que las personas con algunas condiciones pueden tener una respuesta baja de anticuerpos. Por ejemplo, detalló las siguientes: personas con defectos congénitos del sistema de defensas, o que hayan recibido o estén recibiendo quimioterapia u otros medicamentos inmunosupresores (que bajan las defensas).
El doctor Jorge Chaverri Murillo, especialista en enfermedades infecciosas, farmacología clínica, coordinador nacional del programa de posgrado en especialidades médicas de la UCR y miembro de la “Asociación europea de enfermedades infecciosas y microbiología clínica”, explicó que los cinco resultados de las pruebas de anticuerpos no presentes deben interpretarse con “calma y comprensión de un tema complejo”.
A las personas se les ha explicado que muchas veces la capacidad del cuerpo para tener defensas tras la vacuna es menor o simplemente sí tienen, pero están en partes donde el examen de anticuerpos no revela porque apenas puede ver una pequeña parte de su capacidad inmunológico.