Los resultados fiscales del primer trimestre de 2020 reflejaron el déficit fiscal primario más bajo en diez años. También se registró una reducción en el gasto corriente sin intereses y un incremento importante en la recaudación tributaria.
Para el primer trimestre del año el déficit primario (ingresos menos gastos, sin incluir intereses) fue casi cinco veces más bajo que el año anterior, reduciéndose a un 0,12% (₡46.704 millones) del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que en el mismo período de 2019 alcanzó un valor de 0,57% del PIB.
Según los datos que brindó el Ministerio de Hacienda, durante el primer trimestre del año la recaudación tributaria incrementó un 17,02% respecto al mismo periodo del año anterior; el Ministerio de Hacienda recaudó ₡1.291.680 millones (3,37% del PIB versus 3,04% del PIB a marzo 2019).
Dato D+: Los ingresos del mes de marzo todavía no reflejan la reducción en ingresos de Hacienda por motivo de la Ley de Alivio Fiscal que otorgó una prórroga de tres meses a partir de abril — y que el Gobierno podría extender hasta julio— al pago del Impuesto de Valor Agregado, el Impuesto Selectivo de Consumo, los aranceles de importación y al pago parcial del impuesto de la Renta y exoneró el IVA de los alquileres comerciales.
Por otro lado los gastos del Estado durante el mismo periodo sumaron ¢1.924.855,5 millones, lo que representa una reducción pasando de 5,30% en el I trimestre de 2019 a 5.03% del PIB en el I trimestre de este año.
Uno de los rubros que registró un menor ritmo de crecimiento en los gastos fue el de los salarios del Gobierno Central, que gracias a la aplicación del Título III de la Ley No 9635 (reforma salarial) se tradujo en un aumento de solo 2,45%, respecto al año anterior.
El ministro de Hacienda, Rodrigo Chaves Robles, indicó que las medidas de contención del gasto y la aplicación de la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas (Nº.9635) le permitieron al Gobierno controlar el gasto corriente. Sin embargo, el país sigue pagando la factura por los altos intereses de deuda que debe cancelar, pues siguen siendo el primer disparador del gasto, a lo que Chaves señaló que "es urgente para el país cambiar la deuda cara por deuda barata y controlar el déficit durante la crisis". En total el pago de intereses durante el primer trimestre creció un 41,88%, para alcanzar una suma de ₡511.579 millones, lo que representa un 1,34% del PIB y es un 92% del total del déficit financiero.
Dato D+: El déficit financiero (ingresos menos gastos contando intereses) fue de 1,46% del PIB, por debajo del 1,56% que se registró en el primer trimestre del 2019, para un gasto total de ¢1.924.855,5 millones.
Adicionalmente, el ministro Chaves reconoció que la tendencia de mejoramiento en las finanzas públicas se verá interrumpida por el impacto económico de la pandemia de COVID-19, lo que ameritará que el Ministerio de Hacienda tome medidas adicionales para asegurar un balance entre la atención de las personas afectadas y la sostenibilidad fiscal:
“En este momento la prioridad es financiar subsidios para que las personas afectadas no se vayan a dormir sin comer. Pero, tampoco podemos dejar de honrar la deuda pública. La situación global trae incertidumbre respecto a la duración y profundidad del daño en la actividad económica, sin embargo, seguiremos proponiendo maneras para responder a la emergencia de manera responsable”.
Por su parte, el presidente de la República, Carlos Alvarado Quesada, aseguró en sus redes sociales que antes de la crisis las finanzas del país iban por la ruta correcta, pero, también reconoció que la crisis generada por la pandemia de COVID-19 cambiará esta realidad.