Investigadoras de la UNA explicaron que Streptococcus suis es una bacteria que causa severas enfermedades en los cerdos.

La presencia de una bacteria que afecta principalmente a los cerdos, pero a su vez a las personas (zoonosis), motivó a la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad Nacional (UNA) a ejecutar un proyecto para conocer la realidad de la industria porcina en Costa Rica. Para ello, se requiere la colaboración de los porcicultores, cuyos datos se tratarán con discrecionalidad.

Las investigadoras Marta Bonilla de Laboratorio de Zoonosis y Gloriana Castillo del Programa Integrado de Medicina Poblacional (Medpob) de la UNA, trabajan en conjunto con Elías Barquero del Laboratorio de Bacteriología, en el proyecto Desarrollo de un programa integral de prevención, diagnóstico y control de la infección por Streptococcus suis, en la industria porcina de Costa Rica, respaldado por el Fondo Institucional de Desarrollo Académico (Fida).

Castillo explicó que uno de los motivos para llevar a cabo la investigación radicó en que Costa Rica posee muy poca información sobre el estado sanitario actual del hato porcino:

En este momento no contamos con reportes científicos que nos indiquen cuáles bacterias están presentes y cuáles provocan problemas a nivel productivo. Al final del estudio esperamos entregar al porcicultor información precisa y real sobre el estado de su granja”.

Detalló que el objetivo de identificar las bacterias presentes en la industria porcina nacional obedece a que los cerdos con algún tipo de sintomatología, ya sea respiratoria neurológica o gastrointestinal, son tratados con medicamentos sin hacer un estudio previo en la mayoría de los casos.

Buscamos brindar al productor el dato de las bacterias que circulan en el hato, para luego orientar a un tratamiento de forma específica, es decir que sepa cuál es el antibiótico más eficaz”.

Agentes infecciosos

Las investigadoras explicaron que Streptococcus suis es una bacteria que puede causar en los cerdos enfermedades como septicemia, meningitis, artritis, neumonía, pedaleo y endocarditis, la cual afecta a los lechones que tengan entre 4 y 10 semanas. También puede infectar a los humanos a través del contacto con porcinos enfermos.

Otras bacterias que se analizarían corresponden a Glaesserella parasuis o enfermedad de Glässer y Actinobacillus pleuropneumoniae (A.pp), las cuales se caracterizan por causar infecciones en conjunto con S. suis. Además, provocan una sintomatología respiratoria y muerte súbita en los cerdos afectados. Castillo mencionó:

Con estos análisis queremos saber cuáles son los serotipos circulantes, cuánto es la prevalencia de las enfermedades a nivel del hato y cómo podemos aportar para que los tratamientos de estas enfermedades sean más eficientes”.

Por su parte, Bonilla manifestó que lo más importante es la prevención, razón por la cual los porcicultores deben continuar con las medidas de bioseguridad establecidas, así como continuar con los procesos activos de detección, análisis y muestreos en los animales.