Zonas Francas registraron leve recuperación tras caída en febrero.

El Banco Central de Costa Rica presentó los resultados del Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) correspondientes a marzo del 2024, los cuales muestran que la evolución de la producción del país, aunque mantiene cifras positivas, se ha desacelerado. En el tercer mes el crecimiento interanual fue del un 3,7%, lo que representa una desaceleración de 1,3 puntos porcentuales (p.p.) comparado con el mismo mes del año anterior.

Dato D+: El IMAE es un indicador mensual que se utiliza para dar seguimiento en el corto plazo al volumen de la producción de bienes y servicios en la economía. La variación interanual del IMAE compara el crecimiento o decrecimiento del indicador con relación al mismo mes del año anterior.

Desde el Banco Central destacaron que el régimen definitivo creció 3,6%, lo que explica el 71,8 % del aumento del IMAE, debido al dinamismo de las actividades de comercio, hoteles y restaurantes y los servicios profesionales. El incremento del régimen definitivo fue atenuado por la significativa caída de 10,1% de la construcción con destino público.

Por otro lado, el incremento de los regímenes especiales fue de 9,4%, lo que representa una cifra mayor que en meses anteriores, pero se mantiene desacelerado, ya que al del mismo mes del año anterior el crecimiento era de 21,4%. Desde el BCCR aseguraron que esta desaceleración “era previsible dado el extraordinario aumento de la producción observado a partir del tercer trimestre del 2022”.

Por actividad económica, el informe señala que para el sector agropecuario el crecimiento fue 3,8%, lo cual explicaron fue producto del incremento en la oferta exportable de piña y tubérculos. Además, en el mes en comentario aumentó la demanda interna de productos pecuarios como huevos y leche.

Para el sector de manufactura el crecimiento fue de 4,1%, lo que representa una desaceleración de 2,3 p.p. con respecto al mismo mes del año anterior. La manufactura de los regímenes especiales en marzo creció 8,9 %, destacando la actividad de los implementos médicos (+15,9 %), y el crecimiento de la producción de textiles (+44,0 %) y de productos alimenticios (+14,1 %), mientras que el régimen definitivo tuvo una caída del 0,5%, explicada por la disminución en la actividad productiva de sustancias químicas; reducción parcialmente compensada por la mayor producción de la industria alimentaria.

Para el sector construcción la caída fue del 2,3 %, lo cual el BCCR señaló se debe a la disminución de 10,1% en la ejecución de obras con destino público, mientras que la construcción con destino privado creció en términos interanuales un 1%, con un comportamiento disímil: para las edificaciones residenciales se contrajo en 8,3%, debido a menos proyectos de interés social y del grupo de ingresos medios, pero la construcción de edificaciones no residenciales creció 15,5%.

Para el sector de comercio y reparación de vehículos el crecimiento fue de 4,9%, a lo que el Central destacó que en marzo este sector se mantuvo en el tercer lugar según su contribución al incremento del IMAE. Además, en el sector destacaron la venta de productos alimenticios, artículos eléctricos y electrónicos, textiles y calzado; mientras que la venta de vehículos se desaceleró en 10,0 p.p. con respecto a marzo del 2023, luego de crecer interanualmente alrededor del 20% entre julio del 2022 y junio del 2023.

Por último, para el sector servicios el crecimiento interanual fue de 3,9%, lo que significa una caída de  1,1 p.p. en comparación al mismo mes del 2022. El BCCR destacó que el incremento del agregado de los servicios fue determinado por los servicios profesionales (+5,3%), hoteles y restaurantes (8,4%) y transporte (5,5%).