Es urgente rediseñar la estructura estatal de Costa Rica. La deuda nos está poniendo mucha presión y la situación económica mundial es bastante adversa. No podemos seguir con remedios caseros ni empeñando la democracia para salir adelante con la situación fiscal, es completamente necesario darle agilidad y holgura al funcionamiento del Estado. Por supuesto que es un tema de mucha sensibilidad ya que el concepto de Estado cala por todas direcciones, desde los aspectos culturales y de identidad hasta los jurídicos y de funcionamiento macroeconómico. También es un tema que cansa por lo no voy a dedicarle mucho tiempo a palabrerías, traigo una propuesta concreta.

Vamos a dejar la política de lado en este comentario y asumir que los señores Feinzag, Figueres y Chávez son tres estudiantes del colegio que tienen una tarea muy importante que entregar y es poner en acción una serie de cambios que logren llevar a Costa Rica a la lista de países del primer mundo. Estoy seguro de que tienen la capacidad y aspiración para hacerlo, y en conjunto. A ver que les parece.

Mi propuesta es sencilla y nace del presunto movimiento de “vender” el BCR y sus empresas estatales asociadas. Pero antes de hacer la exposición de ideas me gustaría compartir algunas generalidades que considero necesarias tomar en cuenta.

  1. El Estado, desde un punto de vista institucional está compuesto por dos grandes rubros, la Administración Centralizada y la Descentralizada.
  2. El Presupuesto Nacional es una Ley que se aprueba cada año donde se asignan los recursos que serán destinados a cada uno de los tres poderes y al TSE (Administración Centralizada).
  3. De este Presupuesto Nacional también se giran recursos a la Administración Descentralizada.
  4. La deuda nace del déficit del Presupuesto Nacional (los gastos son mucho mayores que los ingresos).
  5. El 95% del Presupuesto Nacional Ley 2022 se asigna al Poder Ejecutivo.
  6. El 24% del Presupuesto del Poder Ejecutivo se asigna al MEP.
  7. Omitiendo los Servicios de la Deuda Pública, el MEP representa el 39% del Presupuesto Nacional Ley 2022, y el 43% del Poder Ejecutivo.

Participación Presupuesto Nacional 2022 (Ley PN 2022)

Entonces es evidente que el MEP tiene un enorme peso dentro del Presupuesto Nacional, donde representa casi la mitad del Poder Ejecutivo. Aquí comienzo a cuestionarme si tiene lógica un ministerio con tanto peso presupuestario, ¿será ágil y eficiente tener una entidad tan grande? Desde un punto de vista de fondos, ¿tendrá sentido compartir recursos de forma tan desproporcionada?

Otras consideraciones para armar el cuadro.

  1. Los Fondos de Inversión Inmobiliaria del BCR tienen un rendimiento inferior en el mercado de Fondos y un alza en sus pasivos. (SUGEVAL 2022)
  2. El MEP y la infraestructura educativa ha tenido problemas severos que limitan el aprendizaje.
  3. Hay Fondos de Inversión Inmobiliaria en la Región que diversifican sus activos incluyendo infraestructura educativa, comercial, industrial y habitacional.
  4. Por lo puntos 1, 2 y 3 queda claro que es necesario migrar a un sistema de administración de infraestructura moderno y no lo estamos logrando ni con los activos de la SAFI BCR ni con la infraestructura educativa.

Entonces, habiendo hecho este planteamiento, por qué no proponemos:

  1. Descentralicemos el brazo docente del MEP de igual forma como el Ministerio de Salud tiene a la CCSS y sacamos a la planilla del MEP del Presupuesto Nacional.
  2. Simplifiquemos el Sistema Tributario y dentro de eso se le asigna una fuente de recursos al brazo ejecutor de educación que mantenga los porcentajes que la Constitución demanda.
  3. Así el MEP pasa de ser una carga que se nutre del Presupuesto Nacional y se le asignan recursos para que tenga su independencia
  4. Se crea un MegaFondo con los activos del BCR y la infraestructura educativa, así abriendo una posibilidad de inversión sin que el estado se desprenda de los activos, más bien se logra un mantenimiento eficiente y abre la puerta a inversión en educación

De esta forma se reorganizan los roles y dentro del Poder Ejecutivo queda un Ministerio de Educación Pública enfocado en dictar y supervisar la misma y se mantiene su espíritu dentro del alma del Gobierno Central mientras que en la nueva institución autónoma queda el brazo operador con toda la fuerza laboral. Así tenemos un mejor balance, se decantan los roles y con un sistema de gestión de infraestructura especializado.  Ahora, también es necesario asignar los recursos financieros que permitan esta operación, por lo que simplificar los más de 100 tributos es necesario y, por qué no, dentro de la reestructuración de estos tributos asignar los consecuentes para la educación pública.

Se transiciona de un modelo y sistema educativo recargado al Poder Ejecutivo a uno moderno que abre la puerta a inversión en educación. De una carga e ineficiencia pasamos a oportunidades de negocio.

¿Entonces como ayuda esto a salir de la deuda?, En primera instancia habría una especialización de roles, donde el gran ahorro vendría en el mantenimiento de la infraestructura educativa, la independencia y reestructuración de los impuestos que generaría y desencadenaría eficiencias desde lo más íntimo del Poder Ejecutivo hacia los Sistemas Tributario y Presupuestario.

Por lo tanto, no considero que la venta de una institución autónoma, como es el BCR y sus empresas estatales, que no influyen directamente en el déficit fiscal, sea la dirección correcta para mejorar la situación fiscal.  Pero si sugiero fuertemente pensar en cambios sistémicos que desentraben y orienten a Costa Rica con una Nueva Arquitectura Estatal de primer mundo.

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