El premio se entregó en la octava edición del Bienal Iberoamericana de Diseño.

Los diseñadores costarricenses Claudio Corrales y Diana Zuleta recibieron la “Mención de Diseño para todas las personas” por su trabajo llamado “Pediatría multi-cultural”, en el Hospital de San Vito de Coto Brus. 

El proyecto ganó entre más de 700 propuestas presentadas por países latinoamericanos y también España y Portugal.

Una de las razones por las que se escogió a los costarricenses, fue que el objetivo es salvar vidas por medio del diseño social, ya que plantearon mejorar las visitas de los niños indígenas que utilizan los servicios del hospital.

Según señaló Claudio Corrales:

El proyecto consistió en entender el contexto, la estética, los signos y símbolos de la cosmología indígena, así como la medicina ancestral, para lograr una mejor comunicación entre los médicos que laboran en el hospital y la comunidad indígena Ngäbe-Bugle. Dichosamente, pudimos ayudar a que la visitación al hospital por parte de esta comunidad indígena cambiara radicalmente.”

La metodología del diseño estuvo centrada en el ser humano y representaron en una serie de murales el “espíritu animal” de grupos de niños indígenas de la región Ngäbe-Bugle.

Con este proyecto se pretende mejorar el trato de los doctores con sus pacientes y que las visitas no se conviertan en un malestar para quienes usan el departamento de pediatría y que los niños se sientan en espacios seguros.

Diana Zuleta añadió que:

El diseño de interacción en espacios y la ejecución en ellos de ideas, tanto simples como complejas, hacen que puedan habitarse y navegarse mejor, creando así un sentido de pertenencia que, en muchas comunidades y contextos, es urgente para acceder a necesidades básicas como la salud.”

Además del premio, el jurado del evento extendió una invitación a los costarricenses para que compartan su experiencia en España y lo expongan el proyecto en el Museo Nacional de Artes Decorativas y en la Central de Diseño de Matadero, ambas en Madrid, España.