Por Julián Díaz Hernández - Estudiante de la Escuela de Estudios Generales

Escaneando el código del menú digital de mi restaurante de pizza favorito me puse a pensar que con la pandemia del COVID-19, nos volvimos más intocables que nunca. Reflexionando en retrospectiva, sin darnos cuenta, nos convertimos cada vez más alejados al contacto físico, no necesariamente a la interacción personal, sino que las tecnologías sin contacto están presente en todas las actividades que realizamos rutinariamente. ¿Será que somos conscientes de lo que esto significa? Hoy pagamos, pedimos comida y compramos sin contacto, pero con los nuevos hábitos de higiene producto de la pandemia, estos modelos de negocio “sin contacto” definitivamente buscan ir más allá de eso, para introducirse en industrias inimaginables como la hotelería, arquitectura e incluso la medicina.

Un estudio realizado por Mastercard afirma que aproximadamente el 78% de las transacciones realizadas en Europa, en la primera ola de la pandemia, fueron a través de pagos sin contacto (Díaz, 2020). Existen dos ángulos en los que se puede interpretar este número. Primeramente, el crecimiento exponencial de las empresas manufactureras de productos sin contacto y por otro lado los modelos de negocio que se pueden adaptar a esta tendencia. En julio del año 2020, Ritujay Ghosh de Nasdaq publicó un artículo relacionado con la alza en las acciones de las empresas dedicadas a las tecnologías sin contacto como Paypal y Global Payment. Ahí mismo, se describe que hubo un incremento en las acciones de estas empresas de hasta de un 15%, en tan solo 60 días, lo cual es poco usual comparado con los datos históricos de años anteriores.

Diferentes industrias se han tenido que adaptar a estos modelos “sin contacto” para asegurar un ambiente sano para sus consumidores. Un ejemplo interesante es el de los aeropuertos, donde una compañía llamada SITA desarrolló una tecnología para utilizar la cara como documento de identidad aeroportuaria que permite identificar a los pasajeros y automatizar una gran cantidad de procesos (Yound, 2021). Por otra parte, la cadena de hoteles Marriot ya está empezando a implementar sus primeros hoteles autónomos, donde no se necesita asistencia humana del todo (Tesse Fox, 2021). Algunos otros más innovadores han creado sanitizantes de dinero con rayos ultravioleta, drones repartidores de comida y hasta mascarillas que expresan emociones. Sin duda alguna, la pandemia ha sacado el lado más creativo e ingenioso para continuar con el estilo de vida al que tanto estábamos acostumbrados.

De la misma forma, existe un impacto indirecto a otras industrias como la medicina y sus capacidades ilimitadas al mezclarse con otras tecnologías. Los procesos quirúrgicos remotos, gracias a las tecnologías 5G, ya son una realidad y se están practicando activamente múltiples pruebas en hospitales y clínicas veterinarias. Algunos dispositivos del internet de las cosas, permiten medir el ritmo cardiaco y la oxigenación en la sangre de las personas durante todo el día, sin la necesidad de un equipo médico profesional. Inclusive, algunos son capaces de detectar anomalías. La odontología, la cirugía plástica y los sistemas inteligentes que detectan malformaciones en radiografías son ejemplos de cómo la humanidad avanza hacia un modelo más inteligente y sin interacción humana.

Después de todo, la pandemia nos hizo ver que muchas áreas han avanzado y que muchos descubrimientos están por ver. Parece que el COVID-19 fue esa dosis de realismo y sensatez que necesitábamos para darnos cuenta de que el mundo tiene muchos espacios de crecimiento (Román, 2020), los cuales debemos de tomar como un trampolín que nos impulse a renacer de una crisis que nunca antes habíamos experimentado y que nos ayude a construir esa ruta hacia un futuro más innovador. Sin lugar a duda, esta cantidad de movimientos hacia un mundo “sin contacto” refleja el potencial de negocio que tiene esta industria que está emergiendo cada vez más rápido y que está convirtiendo a la sociedad, más intocable que nunca.

MOXIE es el Canal de ULACIT (www.ulacit.ac.cr), producido por y para los estudiantes universitarios, en alianza con el medio periodístico independiente Delfino.cr, con el propósito de brindarles un espacio para generar y difundir sus ideas.  Se llama Moxie - que en inglés urbano significa tener la capacidad de enfrentar las dificultades con inteligencia, audacia y valentía - en honor a nuestros alumnos, cuyo “moxie” los caracteriza.

Referencias Bibliográficas:
  • Diaz A. (2020). Mastercard. Sin números y sin información sensible: la primera tarjeta digital first
    en España de la mano de Orange Bank y Mastercard. Recuperado de:
    https://www.mastercard.com/news/europe/es-es/noticias/notas-de-prensa/eses/2020/julio/sin-numeros-y-sin-informacion-sensible-la-primera-tarjeta-digital-first-enespana-de-la-mano-de-orange-bank-y-mastercard/
  • Ghosh R. (2020). Nasdaq. 5 Stocks to Watch as Contactless Payments Gain Traction. Recuperado de: https://www.nasdaq.com/articles/5-stocks-to-watch-as-contactless-payments-gaintraction-2020-07-31
  • Román I. (2020). Programa Estado de la Nación. Presente y futuro de la educación pública
    universitaria se analizaron en foro virtual para el 20 aniversario de la revista Espiga. Recuperado de: https://estadonacion.or.cr/presente-y-futuro-de-la-educacion-publicauniversitaria-se-analizaron-en-foro-virtual-para-el-20-aniversario-de-la-revista-espiga/
  • Tesse Fox J. (2021). Hotel Management. Marriott tests new contactless tech at hotels. Recuperado de: https://www.hotelmanagement.net/tech/marriott-tests-new-contactless-tech-at-hotels
  • TrendWatching & Bussiness of Purpose (2021). COVID Innovations. Recuperado de:
    https://www.covidinnovations.com/about
  • Yound F. (2021). Airport Technology. Contactless airport boarding: biometric technology with SITA. Recuperado de: https://www.airport-technology.com/features/contactless-airportboarding-biometric-technology-with-sita/