Por Alonso Loaiza Carrillo – Estudiante de la Escuela de Administración de Negocios

Durante los últimos meses, el mundo ha enfrentado una de las mayores crisis de salud que nuestras sociedades han experimentado en los últimos tiempos: la presencia y expansión de la pandemia originada por el virus COVID-19. Junto con la disrupción en la vida diaria de millones de personas, el trabajo de muchas de ellas se ha empezado a realizar de forma remota y virtual, lejos de oficinas y edificios corporativos, produciendo cambios estructurales en la forma en la que se realizan las tareas y se generan resultados, así como la manera en la cual las organizaciones y los grupos de trabajo se relacionan, colaboran y comunican.

Dentro de este marco, las habilidades blandas han sido señaladas como de suma importancia para el desarrollo de una carrera profesional, ya que permiten enfrentar los retos de ambientes de trabajo diversos y altamente demandantes, incluso desde antes de la pandemia (Samuel, 2016), con una mayor relevancia ahora, bajo las condiciones de trabajo actuales, pues, sumado al uso de la tecnología que facilita entornos virtuales de trabajo, se convierten en pieza clave para mantenerse vigente en el mercado laboral (Kosslyn, 2019).

El papel de las habilidades blandas durante, e incluso después del COVID-19, es parte de la reinvención del profesional, en búsqueda de la incorporación de conocimiento y habilidades que complementen su desempeño actual (Rodríguez Parrondo y Pérez, 2020), con un planteamiento estratégico hacia una mayor adaptabilidad a los cambios socio-económicos que afectan e influencian a las organizaciones en la manera en la cual realizan su actividad económica y que tiene una relación directa con la forma en la que seleccionan a sus colaboradores. La aceleración del uso de medios digitales para el desarrollo y comercialización de productos y servicios, así como la automatización, propone retos no solo para la actualización constante de habilidades técnicas, sino para el desarrollo constante de habilidades blandas que le aporten el lado humano y social a estas innovaciones. La empatía, la comunicación efectiva, el liderazgo, la capacidad de trabajar en equipo, la inteligencia emocional, la resolución productiva de conflictos y obstáculos, entre otras, hoy son habilidades de gran importancia no sólo para las relaciones profesionales en el ambiente laboral, sino dentro del contexto social al que nos enfrentamos con la pandemia actual y luego de ella.

La incorporación de habilidades blandas y su desarrollo en el campo laboral transciende el momento histórico que nuestro país y otros alrededor del mundo están viviendo; ya sea desde la oficina o de forma remota, los colaboradores deben formarse en la implementación y uso diario de este tipo de habilidades para utilizarlas en complemento con el conocimiento y demás habilidades técnicas que les permiten hacer su trabajo. En estos momentos, profesionales desarrollan su trabajo con ninguna o poca interacción con otras personas en su entorno inmediato.

Hoy, oficinas que antes eran lugar de interacciones, comunicación, colaboración y generación de ideas, están vacías: sin embargo, el trabajo remoto no significa que tales relaciones y procesos no se realizan, sino que el medio en el cual se llevan a cabo ha cambiado a video llamadas, canales de comunicación de texto y el uso de medios digitales de colaboración. Los colaboradores, así como las organizaciones de las que son parte, deben estar en constante búsqueda de opciones de aprendizaje y capacitación, para estar alineadas y en sinergia para mantenerse relevantes y vigentes en los diferentes mercados donde se encuentran.

 

MOXIE es el Canal de ULACIT (www.ulacit.ac.cr), producido por y para los estudiantes universitarios, en alianza con el medio periodístico independiente Delfino.cr, con el propósito de brindarles un espacio para generar y difundir sus ideas.  Se llama Moxie - que en inglés urbano significa tener la capacidad de enfrentar las dificultades con inteligencia, audacia y valentía - en honor a nuestros alumnos, cuyo “moxie” los caracteriza.

Referencias bibliográficas:
• Kosslyn, S. M. (2019). Are You Developing Skills That Won’t Be Automated? Harvard Business Review Digital Articles, 2-4.
• Samuel, A. (2016). The Soft Skills of Great Digital Organizations. Harvard Business Review Digital Articles, 2-4.
• Rodríguez Parrondo, J., y Pérez, C. (2020). Reskilling y upskilling nuevos paradigmas frente a la automatización. Capital Humano, 354, 121-139.