La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) externó preocupación por la incidencia de rechazo a la vacuna contra la COVID-19 en 27 comunidades del país, aunque señaló que el rechazo promedio a nivel nacional en el segundo grupo prioritario (mayores de 58 años) es del 2%.

Con datos al 10 de mayo, el gerente médico, Dr. Mario Ruiz Cubillo, afirmó que el gran nivel de aceptación de la vacuna es "un signo claro de la confianza en el proceso de vacunación y un paso firme en la meta de alcanzar la inmunización de grupo cuando todos los grupos estén inmunizados”. 

Hay 27 comunidades, sin embargo, en las que los números de la negativa a vacunarse es mayor al promedio.

El análisis del rechazo para la primera dosis preocupa principalmente en tres áreas de la región Huetar Norte. La CCSS califica estas zonas como grave riesgo de cobertura al registrar un rechazo mayor al 20%. Se trata de las siguientes comunidades:

  • Fortuna con 31.2%
  • Santa Rosa con 25%
  • Florencia con 21%

Mientras tanto, seis áreas de salud se ubican en riesgo alto con un porcentaje de rechazo entre el 10% al 19,9%. Son las siguientes:

  • De la Huetar Norte: Pital, Guatuso, Los Chiles
  • De la Pacífico Central: Esparza, Chacarita, San Rafael Puntarenas.

Por último, con un rechazo moderado a la primera dosis, se ubican 17 áreas de salud, donde el porcentaje de personas que han presentado negativa es del 5% al 9.9%.

  • De la Central Norte: Carpio – León XIII, Heredia – Virilla, Alajuela Sur, San Ramón, Puerto viejo Sarapiquí, Alajuela Central, Poás, Zarcero.
  • De la Central Sur: Goicoechea 2, Hatillo, Goicoechea 1.
  • De la Huetar Norte: Aguas Zarcas.
  • De la Pacífico Central: Esparza, Chacarita, San Rafael, Puntarenas, Montes de Oro.
  • De la Chorotega: Colorado
  • De la Brunca: Osa

Dos dosis

En relación con las dosis rechazadas en todo el país, los datos al 10 de mayo son los siguientes: se han presentado rechazos en 15.140 de primeras dosis y de 484 segundas dosis.

Estas segundas dosis rechazadas preocupan a los equipos de salud porque las personas rompen el protocolo de aplicarse la segunda dosis 21 días después de la primera para llegar a tener el máximo nivel de protección contra el virus.

El cumplimiento del esquema completo permite alcanzar el desarrollo pleno de los anticuerpos contra el virus y es considerado “una perdida significativa de protección” el suspender la inmunización", señala la CCSS.

En el caso de las vacunas Pfizer, recuerdan que, la segunda dosis aumenta la protección de un 60% un 95%. La CCSS enfatiza que eso significa que el riesgo de enfermarse es 95% menos: "Aplicarse la segunda dosis es muy importante para la protección personal y comunitaria", resaltan. 

Los expertos del CDC de Estados Unidos proponen las razones siguientes para recibir ambas vacunas:

  • Brinda inmunidad más prolongada.

Aunque la ciencia desconoce cuánto dura la protección de la primera dosis la experiencia acumulada en las otras vacunas indica que los refuerzos siempre ayudan a mantener la inmunidad.  La primera dosis es de sensibilización y activa el sistema inmunitario de la persona que no alcanza a ser completa y la segunda dosis de potencialización sí aumenta la producción de anticuerpos y hace que su acción más duradera.

  • Brinda mayor protección contra variantes

El virus SARS-CoV-2 se replica en el cuerpo de las personas y viaja en la saliva para infectar a otras pero esas copias que hace de sí mismo tienen pequeñas variantes en el tiempo y por eso la gran cantidad de anticuerpos producidos después de la segunda inyección le da al cuerpo un refuerzo de protección adicional que puede evitar que el virus se adhiera a las células.

  • Brinda mayor beneficio, aunque presente efectos tolerables pasajeros

En reportes internacionales se ha dicho que en algunos casos –no en todos- ocurren más efectos secundarios de leves a moderados después de la segunda dosis que en la primera; sin embargo, esos efectos comunes que desaparecen en horas son poco significativos en comparación con el peligro de llegar a enfermarse con gravedad.

  • Brinda mayor defensa comunal frente al virus

La segunda dosis aumenta la protección personal y también la comunal, por lo tanto, la persona cumple con el deber ciudadano de elevar el escudo de protección en su comunidad y su país abriendo el camino para salir de la pandemia mediante las mediados y la inmunización