Por Ana María Carvajal – Estudiante de la carrera de Administración de Negocios
Actualmente nuestra sociedad vive en una era tecnológica avanzada, donde sin lugar a dudas la tecnología es parte de nuestras vidas y nos encontramos inmersos en ella debido a su fácil acceso. La tecnología permite facilitar algunas tareas de nuestro diario vivir; hoy en día es una herramienta de gran valor para los negocios, estudios, y como medio de comunicación.
Uno de los usos más comunes de comunicación es por medio de los dispositivos móviles. Estos dispositivos son utilizados por un gran número de personas de todas las edades, clases sociales y de distintas zonas geográficas. De acuerdo con los resultados del estudio ‘Navegantes en la red’, se muestra que el dispositivo móvil es el medio más utilizado para la navegación online ya que “el 94,6% se conecta a internet a través de este aparato” (Marketingdirecto.com, 2017). Por esta razón, muchas marcas se han tenido que adaptar a las nuevas tecnologías y utilizar canales alternativos para estar en contacto con su público, dentro de ellas las redes sociales, que son plataformas que han evolucionado con el tiempo, y cada vez se vuelven más interactivas para lograr captar la atención de los usuarios.
Sin embargo, el reto de los dispositivos móviles para el marketing radica en que los usuarios cada vez consumen menos contenido publicitario en sus redes sociales. Tanto las aplicaciones como las marcas han tenido que idear nuevas formas para exponer contenido publicitario en las redes sociales, ya que los usuarios tienden a “saltarse” los anuncios. Así lo indica una investigación de Mintel donde “el 67% de los usuarios y consumidores evitan los anuncios publicitarios en las redes sociales (...) dicho porcentaje se eleva hasta el 70% en el caso de los usuarios de edades entre 25 y 34 años” (Puro Marketing, 2011).
Otro factor que también afecta el marketing en los dispositivos móviles es la publicidad excesiva, tanto el mercado como las redes sociales y los usuarios están saturados de publicidad; esto es un problema para las marcas, ya que opaca su visibilidad en el mercado. Según el estudio ‘Navegantes en la red’, una de las principales preocupaciones de los usuarios es la publicidad excesiva, así lo confirma el 61,1% de los encuestados, y este sería un motivo por el que el 77,1% de ellos abandonaría una web. Además, “sólo un 10% de ellos ve la publicidad como algo positivo mientras que un 55,6% la ve muy negativa” (Marketingdirecto.com, 2017). Por su parte, el ‘Estudio de Consumo de Medios y Dispositivos 2019’ indica que la molestia para el 44% de los encuestados es que hay muchos anuncios en internet, este exceso impide que el 27% de los internautas ponga atención a lo que se promociona” (López, 2019).
Entonces, ¿cómo pueden hacer las marcas para llegar a un público que no desea estar expuesto a contenido publicitario? Las agencias publicitarias están apostando por el uso del storytelling, ya que es una forma de contenido creativo y visual que busca captar la atención de los usuarios. Otra tendencia en las redes sociales es el video marketing, ya que “el material audiovisual supone el 78% de todo el contenido que se consume en la red (...) y 100 millones de internautas consumen video a diario. 9 de cada 10 ven videos de las marcas que siguen y el 65% de ellos acaba visitando la web tras hacerlo” (40defiebre, s.f.).
Estas estrategias pueden funcionar por ahora, sin embargo, las empresas y marcas deben estar atentas a los continuos avances tecnológicos, a las nuevas tendencias a las que se encuentren asociados sus consumidores y, sobre todo, hacer uso de la creatividad para lograr llegar al cliente meta sin que este se sienta obligado o presionado, ya que esto podría producir un efecto contrario al deseado. La exposición deberá ser lo más orgánica posible y contener algún factor que capte la atención durante los primeros segundos de los anuncios publicitarios.
