El lunes de esta semana la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo de la Vertiente Atlántica inicio el recorte de su planilla, que según proyecciones de la empresa deberá reducir entre 775 y 931 funcionarios su planilla que alcanzaba, al inicio de esta semana, las 1.164 personas.
De esta forma, y a pesar de que el Sindicato de Trabajadores de Japdeva (Sintrajap) anunció la semana pasada que presentarían una acción de inconstitucionalidad contra la ley que permite la reestructuración de Japdeva, al lunes 320 trabajadores ya habían aceptado alguna de las opciones para terminar su relación laboral con la empresa pública, de los cuales: 185 se acogieron a la jubilación temprana, 127 aceptaron la bonificación adicional que autorizó el proyecto de ley.
Dato D+: La bonificación adicional por terminar la relación laboral con Japdeva es de ocho salarios completos para los empleados con remuneraciones por debajo del millón de colones, o cuatro salarios completos, para los empleados con remuneraciones por encima del millón de colones.
Sin embargo, Sintrajap no renuncia a su aspiración de deshacerse de la competencia privada, ya que también mantiene un proceso legal por supuestos daños ambientales en contra de la empresa APM Terminals con el que busca paralizar la operación de la concesionaria.
Por otro lado, recordemos la entrada en operación de APM Terminals, que absorbió desde inicios de este año el 80% de los barcos que antes recibía Japdeva, no ha estado libre de críticas, ya que desde el sector exportador han manifestado su malestar por los altos precios y los atrasos que han vivido desde que Japdeva no se encarga del 100% de los barcos.
Incluso el empresario y excandidato presidencial del PLN, Antonio Álvarez Desanti, había reconocido en una entrevista en monumental a inicios de este mes:
Nosotros los productores y exportadores de bananos, en mi caso, y otros productos añoramos los días de Japdeva. APM ha resultado el peor fiasco. Más caro que Japdeva (...) y además, más ineficiente que Japdeva".
Mientras tanto, en el Pacífico
En el puerto de Caldera, las cosas tampoco caminan como se quisiera, ya que recientemente se perdió la posibilidad de recibir 12.000 turistas por problemas de atraque. Los turistas que iban a llegar a bordo de las embarcaciones Bliss y Joy, (de Norwegian Cruise Line), suspendieron tres visitas que tenían programadas durante su recorrido por todo el continente americano.
La situación se presentó por una pérdida de profundidad debido a una alta sedimentación que se encuentra en el puerto. Por este motivo, el Instituto Costarricense de Puertos del Pacífico (Incop) anunció que adelantara las obras de dragado que tenía programadas en el puerto para el año 2021, y que deberán empezar dentro de dos semanas, para evitar mayores pérdidas a la economía del puerto. La inversión tendrá un costo de alrededor de ₡1.500 millones, y deberá extraer 400 mil metros cúbicos de material sedimentado.
