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— CRHoy publicó ayer los resultados de la bendita auditoría interna del Banco de Costa Rica que esperamos con una paciencia milenaria y que pensamos nunca llegaríamos a conocer. Pero, milagro divino: finalmente es pública y el desastre va más allá de lo que imaginábamos. O no. En realidad estaba clarísimo.

— Sí, la auditoría de la que les hablamos hace más de un año es la solicitada por la expresidenta del banco, Mónica Segnini, quien estaba dispuesta a llegar hasta las últimas consecuencias para establecer la verdad de los hechos.

— Naturalmente, esto no fue posible. El Gobierno de Luis Guillermo Solísla suspendió (cuando decidió remover a toda la junta directiva como si las culpas fueran compartidas) y el Gobierno de Carlos Alvarado la despidió… Todo parte de un esmerado esfuerzo de “borrón y cuenta nueva” que para cualquiera que haya seguido la trama de El Cementazo fue más que evidente.

— En fin. Los resultados de la auditoría interna confirmaron al menos 19 irregularidades graves en el proceso de aprobación, otorgamiento, desembolso y seguimiento de los créditos otorgados a Sinocem de Costa Rica S.A., del empresario Juan Carlos Bolaños.

— El informe de José Manuel Rodríguez (auditor interno del banco) fue entregado a la junta directiva del BCR desde el 22 de diciembre de 2017 y enciende todas las alarmas en torno a los ₡18.600.000.000 ($30.000.000) que se le giraron a Bolaños.

— El documento fue declarado secreto y se prohibió a quienes lo recibieron referirse al tema. El informe, confirma CRHoy, forma parte de la prueba que investiga el Ministerio Público en el expediente 16-0000-013-PE (Cementazo).

— La auditoría recomendó la apertura de procedimientos administrativos y penales contra una nutrida lista de funcionarios del BCR implicados en el caso. CRHoy intentó conversar con Douglas Soto (gerente de la aseguradora del BCR durante los hechos) pero se negó a ofrecer una entrevista presencial. La actual presidenta del BCR, Shirley González, no ha contestado la solicitud del medio para entrevistarla.

— La suma de irregularidades detectadas en la investigación daban motivos de sobra para rechazar los préstamos a Bolaños (se incumplían los requisitos internos del BCR y los de la Superintendencia General de Entidades Financieras) pero el empresario no tuvo inconvenientes para recibir el crédito que, en condiciones normales, se la habría negado a cualquier costarricense.

— Un oportuno infográfico preparado por CRHoy ayuda a entender mejor el alcance de las irregularidades pero se resumen en vicios acumulados en la aprobación del crédito (6), la comisión de confianza (2), desembolsos, pólizas, seguros y garantías (4) y la sistemática forma de ignorar 33 alertas reportadas por el propio banco (7).

— Mientras el BCR guarda silencio y se niega a dar explicaciones, ayer trascendió que recibirá $100.000.000 del BCIE a modo de desembolso de línea global de crédito, “destinado a capital de trabajo e impulso a sectores productivos costarricenses”.

— Dimensionemos. Préstamo del BCIE al BCR para “reactivar la economía costarricense” (“financiar operaciones de micro, pequeñas y medianas empresas, clientes empresariales de los sectores industrial, agrícola y cooperativo”): $100.000.000. Préstamo del BCR a un solo empresario para financiar una operación escabrosa a pesar de 19 irregularidades graves: $30.000.000. No hace falta agregar más.

Esta nota es parte del Reporte: MEP liquida el bachillerato, BCR expuesto por auditoría y Víquez buscado por la Interpol