La jueza Silvia Arce advirtió que ya en el pasado Sánchez prometió lo mismo y no cumplió.
En medio de la controversia por su reelección, el magistrado de la Sala II, Luis Porfirio Sánchez Rodríguez, manifestó su disposición a renunciar a la inmunidad y a la prescripción penal si la jueza Silvia Elena Arce Meneses presenta una denuncia formal por un acto obsceno que ella alega haber sufrido en el año 2000. Sánchez, quien asegura que las acusaciones son falsas, envió una carta al presidente de la Asamblea Legislativa, Rodrigo Arias Sánchez, para notificar su decisión.
“Con absoluta transparencia y en apego a la verdad, este sábado remití una carta al presidente de la Asamblea Legislativa en la que le manifiesto mi disposición a renunciar a la inmunidad que me otorga el cargo y con ello, a la prescripción de la acción penal, en caso de que la citada funcionaria presente cualquier denuncia en mi contra”, dijo el magistrado.
Apoyo al magistrado
En su comunicado a la prensa, el magistrado también adjuntó una carta de respaldo a su labor, firmada por 21 funcionarios y exfuncionarios del Poder Judicial “que han trabajado conmigo durante mi servicio judicial, se han referido en una carta pública, dando fe de mi impecable trayectoria y dedicación al cargo, así́ como el respeto que siempre he tenido por las compañeras y compañeros, además indicaron que nunca han escuchado siquiera un rumor que cuestione mi conducta”.
El documento describe a Sánchez como un profesional ejemplar de trayectoria “impecable” y con una carrera “intachable”.
Arce cuestiona la palabra de Sánchez
Ante el anuncio del magistrado, la jueza Silvia Arce recordó un caso similar del año 2016, cuando Sánchez prometió renunciar a su inmunidad para enfrentar una denuncia por prevaricato presentada por la jueza Liz Maureen Tencio, quien falleció en julio de 2024.
En comunicado a la prensa girado este domingo Arce invitó a la Asamblea Legislativa a recordar que Sánchez no cumplió con su promesa en esa ocasión e indicó que ese comportamiento da cuenta de su falta de ética y probidad.
En efecto, la jueza Liz Maureen Tencio enfrentó un largo proceso legal en su intento de denunciar a Sánchez. Su testimonio completo de lo que ese proceso implicó puede consultarse en CRPrensa.
En el año 2019 la jueza fue diagnosticada con esclerosis lateral amiotrófica: “los médicos me explican que el estrés y los niveles acentuados de cortisol debilitaron mi sistema inmunológico por lo que a pesar de haber redactado estos hechos para una medida cautelar finalmente me tengo que dar por vencida ante la gravedad de mi enfermedad”, explicó entonces.
Tencio, quien en efecto no pudo continuar sus gestiones legales, falleció en julio del año en curso.
En 2017 Tencio conversó con La Nación. Un extracto de esa entrevista puede consultarse en el siguiente video subido por CRPrensa, donde también se adjunta un testimonio de la madre de la jueza, emitido días atrás, luego de que se cuestionara la palabra de Arce.
Arce afirma que está dispuesta a presentar la denuncia una vez que se conozca la decisión de la Asamblea Legislativa, inicialmente programada para mañana: “presentaré la denuncia por la indecente agresión de Porfirio Sánchez contra mí, cuando tengamos certeza en Costa Rica si ese hombre es reelecto en el cargo de magistrado o no. En el primer escenario, tendrá que renunciar a la inmunidad y a la prescripción, si no es reelegido sólo tendrá que renunciar a la prescripción. Y yo solicitaré al tribunal penal competente, que la audiencia en la que yo declare, así como en las que rindan testimonio otras valientes personas que se han comunicado conmigo en éstos días, sea pública, de acceso a quien quiera presentarse a la sala de juicio y a todos los medios de prensa nacionales e internacionales que se han interesado en este asunto”.
Cuestionamientos trascienden la denuncia de Arce
A pesar de que la denuncia de Arce ha dominado la discusión pública, el abogado Mario Rucavado Rodríguez, quien cuestionó la eventual reelección del magistrado en un artículo titulado Magistrado Porfirio Sánchez: una reelección inaceptable publicado en este medio, recordó que los cuestionamientos a la gestión de Sánchez van más allá.
Rucavado manifestó su respaldo a Arce en distintas ocasiones y de hecho fue él quien dio a conocer el testimonio de la jueza en el aludido artículo. Sin embargo, ante los cuestionamientos que tanto él como la jueza han recibido tras la denuncia, decidió ofrecer una entrevista a fondo al medio No Pasa Nada, en la que además de reiterar su apoyo a la jueza Arce, aludió punto por punto a su motivación para impulsar este debate y a todas las razones por los que considera el magistrado no debería ser reelegido por la Asamblea Legislativa.
Si hacemos ese ejercicio de que no existan esas conductas de orden sexual, tenemos otro montón de cosas”.
La mayoría de los hechos aludidos por Rucavado ya han sido abordados en distintos artículos que el abogado ha publicado en Delfino.CR.
En particular, en el video adjunto, cuestiona:
- Conflicto de intereses dentro del Poder Judicial: Rucavado cuestiona el nombramiento de Ana Eugenia Romero Jenkins, esposa de Porfirio Sánchez (y quien es directora ejecutiva del Poder Judicial) como directora del Fondo de Jubilaciones y Pensiones del Poder Judicial “un movimiento que los sindicatos calificaron de oscuro”.
- Conflicto de intereses fuera del Poder Judicial: Rucavado cuestionó la amistad del magistrado con el expresidente Óscar Arias Sánchez así como la fiesta de celebración por el nombramiento de Sánchez como magistrado de la Sala II, a la que asistieron diputadas y diputados, una de ellas utilizando un carro oficial.
- Mora Judicial: Rucavado recordó el grave caso de mora judicial que ahoga a la Sala Segunda (Laboral y Familia), presidida por el magistrado Sánchez quien “tiene una de las oficinas más atrasadas”. Agrega: “Este magistrado tiene expedientes de familia, por ejemplo, de casi 10 años”. Rucavado también recordó que el artículo 158 de la Constitución Política “dice que un magistrado debe actuar con eficiencia, aquí es evidente que no hay eficiencia”.
- Sentencia en Caso Tinoco: Rucavado recordó la sentencia que Sánchez dictó a favor de Federico Tinoco “que los jueces de instancia superior (cuando revocaron su sentencia) dijeron que les parecía ingenuo que un juez de trabajo tramitara un proceso de acoso sexual como si fuera un juicio de trabajo ordinario”.
- Engaño a la Asamblea Legislativa para eludir enfrentar la justicia: Rucavado recordó la querella de la jueza Liz Tencio y el anuncio de Sánchez de que renunciaría a la inmunidad si resultaba electo magistrado: “el llegó a ser magistrado y nunca renunció, le tocó instruirlo, el caso, ante la Corte Plena, al magistrado amigo de él, Celso Gamboa y lo desestimaron”.
- Falta de visión de género. Rucavado ofreció tres ejemplos: “El magistrado Sánchez a lo largo de su carrera ha tenido falencias muy puntuales en ese tema... a una defensora pública él siendo juez le negó su derecho a la lactancia”. Recordó que en otra ocasión: “solicitó revocar un acuerdo de paridad de género en el directorio de la Corte”. En el Caso Tinoco, los jueces de alzada, que revocaron la sentencia de Sánchez dijeron “mostró poca sensibilidad a la política de género y además invirtió la carga de la prueba”.
En principio, la reelección del magistrado Porfirio Sánchez Rodríguez será definida el día de mañana por la Asamblea Legislativa. Para evitar su reelección se requieren 38 votos en contra de su continuidad. Cuatro bancadas (PLP, Frente Amplio, Progreso Social Democrático y Nueva República) ya han adelantado que no apoyarán la reelección del magistrado. El PLN y el PUSC no han definido su posición.
Consultado por No Pasa Nada sobre su punto de vista ante el silencio de Liberación Nacional, Rucavado dijo:
¿Qué me probaría Liberación Nacional si vota por esta reelección? Me probaría que perdió el rumbo, me probaría que por algo, en las elecciones cada vez le va mal”.
Mora de larga data
La mora del magistrado Luis Porfirio Sánchez Rodríguez al frente de la Sala Segunda fue cuestionada por la diputada Pilar Cisneros Gallo, quien fue la única integrante de la Comisión de Nombramientos que votó en contra de la reelección del magistrado (la votación quedó 6-1 a favor).
“Por un lado tengo excelentes referencias suyas como un funcionario probo y dedicado a la Corte y por otro lado una enorme preocupación por la enorme cantidad de expedientes que usted tiene en su despacho, es decir un engaño más a la gente que está esperando justicia pronta y cumplida”, dijo la diputada, quien procedió a desplegar frente a Sánchez el rollo de expedientes sin resolver que se acumulan en el despacho del magistrado.
Esto que tengo aquí don Porfirio, son todos los expedientes rezagados que tiene usted en su despacho”.
Como señaló Rucavado, no es la primera vez que se cuestiona la eficiencia de despachos en los que labora el hoy magistrado, así como su probidad en el ejercicio de sus funciones. Antes de su nombramiento como magistrado se revocaron y anularon resoluciones con frecuencia, resultando condenado el Estado por actuaciones suyas.
En 2000 la Sala Constitucional condenó al Juzgado en donde era tramitador por un atraso en un expediente ordinario. En 2004, la Sala Constitucional condenó al Juzgado de Sánchez por atrasos en un expediente de pensión por invalidez. En 2007 la Sala Constitucional condenó al despacho Sánchez por un atraso de cuatro meses en una notificación laboral. En 2008 la Sala Constitucional condenó al despacho de Sánchez por violación a la justicia pronta y cumplida en un conflicto colectivo de trabajo. En 2016 la Sala Constitucional condenó a la Inspección Judicial presidida por Luis Porfirio y al Estado a pagar daños y perjuicios por acciones suyas, revocándole una sentencia de la inspección judicial.
Tras ser elegido magistrado la Corte Plena ha tenido por costumbre dictar desestimaciones en las denuncias en su contra: la denuncia interpuesta por prevaricato por la jueza Liz Tencio fue desestimada; la denuncia interpuesta por haber intervenido en el caso del Celso Gamboa pese a la amistad entre ambos fue desestimada y la denuncia por una falta disciplinaria ante la mora de la Sala II y de su despacho también fue desestimada.