Por Raquel Montoya Rivera - Estudiante de la carrera de Administración de Negocios

A lo largo del primer año de la pandemia generada por el COVID-19 se ha escuchado hablar de resiliencia en múltiples ocasiones, pero ¿realmente estamos educando a las nuevas generaciones con una mentalidad resiliente? Es necesario repensar la manera en que se enseña a las nuevas generaciones y cómo se les inculca las habilidades blandas no solamente para el momento de la inserción en el mercado laboral, sino desde las primeras etapas de vida con la formación en los hogares, y sin duda alguna, desde las instituciones educativas. Dicha propuesta toma aún más relevancia en esta era digital (Scott, 2019), en donde las niñas y los niños en edades escolares tiene una concepción del mundo completamente ligada a la digitalización y la inmediatez. La pandemia vino a poner un alto en la sociedad que solamente reaccionaba de forma automática y puso en evidencia muchas debilidades en diversos temas, como por ejemplo, la enseñanza. Es momento de repensar el proceso educativo que se ofrece a las niñas, niños y jóvenes para así apoyarlos en su desarrollo como seres resilientes.

Existen diversos modelos de crianza: autoritaria, liberal, negligente y democrática (Barnová et al., 2019). En este proceso influyen muchos factores como la edad, la cultura, la clase social y formación misma de los padres y madres. Sin embargo, Barnová et al. (2019) proponen que independientemente de todos estos elementos existe una verdad trascendental: la crianza con comportamientos parentales negativos, incluido el abuso y la negligencia, así como la violencia doméstica, pueden tener efectos perjudiciales y consecuencias para la salud y el bienestar de los niños (p. 93). De la misma manera, plantean que el desarrollo mental, el rendimiento académico y el desempeño social de las niñas y los niños es más deficiente cuando su entorno conflictivo, debido al maltrato o al apoyo insuficiente, no les permite instituir estrategias socialmente aceptables que podrían ayudarlos a superar la adversidad y desarrollar la resiliencia, cualidad fundamental en la vida de un individuo que es entendida como la competencia para recuperarse, adaptarse y mantener el equilibrio mental y el funcionamiento normal cuando se expone a adversidades (Barnová et al., 2019).

Sin embargo, el proceso educativo apenas da inicio en el hogar. Gran parte del desarrollo de las habilidades y competencias de las personas se da en las instituciones educativas, tanto públicas como privadas. Rebrina et al (2019) exponen que la humanidad ha entrado en la cuarta revolución industrial, en donde la tecnología se integra con el mundo físico, lo que implica nuevos desafíos para la generación más joven y su preparación para la vida en sociedad. Su obra hace énfasis en la importancia de la capacitación de las personas educadoras con un enfoque mucho más integral, en el que se debe prestar especial atención al desarrollo de sus habilidades blandas a través del fortalecimiento de la resiliencia emocional (Aguilar, 2018), y procesos diversos como el networking con otros colegas. Esto con el fin de que puedan apoyar a las generaciones más jóvenes con planes de estudio completos que abarquen aspectos académicos y también el desarrollo de otras áreas. Como lo expresa D’Amico (2020), la mejor manera de promover la resiliencia en los niños es fomentar educadores resilientes.

A menudo se argumenta que el desarrollo de habilidades blandas es parte de la etapa de preparación para el final de los estudios superiores o el ingreso al mercado laboral, pero no es exclusivamente para estas etapas (Tang, 2019). La mayoría de los profesionales de negocios comprenden la importancia de perfeccionar tanto las competencias interpersonales, como las competencias técnicas. Algunos postulados como el de Teng et al. (2019) sugieren más bien utilizar el concepto “Soft Employability Skills” para referirse a todas aquellas habilidades blandas necesarias para incursionar en el mercado laboral.

Bajo este entendido, se reitera la importancia del desarrollo de la resiliencia, las actitudes y las aptitudes en nuevas generaciones desde tempranas edades, tanto en el hogar como en los centros educativos, y se propone referirse a las “habilidades blandas de empleabilidad” como aquellas que son propias de un proceso de reclutamiento. Es momento de deconstruir el proceso convencional de aprendizaje y optar por un modelo integral de enseñanza que permita formar una nueva generación más resiliente.

 

MOXIE es el Canal de ULACIT (www.ulacit.ac.cr), producido por y para los estudiantes universitarios, en alianza con el medio periodístico independiente Delfino.cr, con el propósito de brindarles un espacio para generar y difundir sus ideas.  Se llama Moxie - que en inglés urbano significa tener la capacidad de enfrentar las dificultades con inteligencia, audacia y valentía - en honor a nuestros alumnos, cuyo “moxie” los caracteriza.

Referencias bibliográficas:
  • Aguilar, E. (2018). Emotional Resilience: The Missing Ingredient. Educational Leadership, 75(8), 24-30 http://www.ascd.org/publications/educational-leadership/may18/vol75/num08/[email protected]
  • Barnová, S., Tamášová, V. y Krásna, S. (2019). The Role of Resilience in Coping with Negative Parental Behaviour. Acta Educationis Generalis, 9(2), 93-106. https://content.sciendo.com/configurable/contentpage/journals$002fatd$002f9$00 2f2$002farticle-p93.xml
  • D'Amico, S. (2020). The Resilience Cascade: The best way to promote resilience in children is to foster resilient teachers. Childhood Education, 96, 54-57. https://eric.ed.gov/?q=resilience&id=EJ1239830
  • Rebrina, F., Khakimova, S. yIshkinyaeva, A. (2019). Networking Cooperation in Forming Soft Skills of a New Type of Teacher. Australian Educational Computing, 34(1). http://journal.acce.edu.au/index.php/AEC/article/view/173/180
  • Scott, L. (2019). Developing Resilience in a Digital World. Primary Science, n159. 12-13. https://www.ase.org.uk/system/files/PS%20special%20issue%20Authors%20pdf% 20Scott%20.pdf
  • Tang, K. (2019). Beyond Employability: Embedding Soft Skills in Higher Education. Turkish Online Journal of Educational Technology - TOJET, v18 n2. 1-9. https://files.eric.ed.gov/fulltext/EJ1211098.pdf
  • Teng, W.; Ma, C. ; Pahlevansharif, S.; Turner, J. (2019). Graduate Readiness for the Employment Market of the 4th Industrial Revolution: The Development of Soft Employability Skills.
    Education & Training, v61 n5, 590-604. https://www.emerald.com/insight/content/doi/10.1108/ET-07-2018-0154/full/pdf?title=graduate-readiness-for-the-employment-market-of-the-4th-industrial-revolution-the-development-of-soft-employability-skills