Por Alexander Barboza Mussio - Estudiante de la carrera de Economía Empresarial
Revolución industrial, un concepto que abarca innumerables cambios en los mercados, los negocios, su manera de operar y sus necesidades; un concepto amplio el cual hasta el día de hoy ha impactado al mundo en cuatro ocasiones: las cuatro revoluciones que hemos tenido. Cada una de estas trajo cambios inimaginables y ha generado nuevas necesidades de adaptación obligándonos de esta manera a aprender nuevas cosas, a sacar ventaja de las innovaciones y establecer una relación con estas para poder mantenernos estables en una sociedad tan cambiante.
Actualmente, la más reciente revolución es la 4.0, la cual se puede decir que se introdujo en el año 2011. De acuerdo con Deloitte (s. f.). “esta revolución está marcada por la aparición de nuevas tecnologías como la robótica, la analítica, la inteligencia artificial, las tecnologías cognitivas, la nanotecnología y el Internet of Things (IoT), entre otros.” (párr. 2). Al igual que las antiguas revoluciones, esta ha cambiado drásticamente nuestro entorno, específicamente en el uso y adaptación a las innovaciones que trae, las cuales son, en su mayoría, cambios e innovaciones relacionados a la tecnología, un tema que cada día avanza más y tiene un crecimiento exponencial.
Estos no son productos e innovaciones opcionales, sino que generan una competencia entre los negocios y su manera de operar. Al presentarse la oportunidad de mejorar los resultados, la eficiencia, la productividad y la economía, las grandes empresas buscan adquirir estos servicios y productos para ser competitivos y lograr el liderazgo en su mercado. Poco a poco más empresas adaptan sus procesos a estas tecnologías para poder competir con sus semejantes y es aquí donde surge la necesidad de adaptación.
En el ámbito profesional, de igual manera, se evidencian grandes cambios y necesidades requeridas para ser competitivos e ingresar a una institución a ofrecer nuestras labores o para mantener un puesto en una compañía. Si nos ponemos a pensar un poco en el pasado, hace unos 20 años, podemos recordar como muchas de las cosas que hoy utilizamos constantemente no existían y ni siquiera estaba la idea de que llegaría el día donde las cosas funcionaran como lo hacen hoy en día. Claros ejemplos de esto son el celular, las plataformas digitales e incluso el internet y su gran alcance.
Últimamente con la situación que estamos viviendo a nivel mundial por la pandemia del COVID 19, ha estado muy de moda en nuestra sociedad el término de resiliencia. Según Unidos (s. f.), “resiliencia es la inefable capacidad que le permite a ciertas personas anteponerse a las distintas adversidades que se les presentan en la vida diaria. Permite desarrollar conductas positivas ante el estrés, las amenazas o algún conflicto.” (párr.1). Si relacionamos este término con la revolución 4.0, podemos decir que debemos ser resilientes ante ella y ante toda situación que se nos presente en un futuro. Debemos adaptarnos a estas revoluciones y sacarles el mayor provecho posible, ya que, como se dijo en un inicio, aunque requiera esfuerzo, mejoran notablemente el proceso o ámbito donde se implementen sus novedades. Aunque muchas veces nos dé miedo el cambio o lo desconocido, siempre que exista un nuevo camino y una nueva manera de hacer las cosas, se puede intentar si resulta conveniente. Son oportunidades de las cuales podemos obtener grandes resultados y beneficios para el bienestar de nuestra sociedad.
En conclusión, mantengámonos atentos ante estas oportunidades, recorramos esos caminos de nieve fresca donde no hay huellas, recorramos esos caminos desconocidos que, aunque no tengamos idea a dónde nos llevan, nos llevarán a un lugar donde sin duda estaremos con más conocimiento y experiencia que hoy en día. Tengamos una mentalidad de crecimiento que nos permita desarrollar nuestras capacidades al máximo, adaptándonos a los constantes cambios con los que vivimos hoy en día y logremos alcanzar la mejor versión de nosotros mismos. No tengamos miedo de todo lo bueno que podemos lograr, definamos metas y no nos demos por vencidos hasta que cada una de ellas se hagan una realidad.
MOXIE es el Canal de ULACIT (www.ulacit.ac.cr), producido por y para los estudiantes universitarios, en alianza con el medio periodístico independiente Delfino.cr, con el propósito de brindarles un espacio para generar y difundir sus ideas. Se llama Moxie - que en inglés urbano significa tener la capacidad de enfrentar las dificultades con inteligencia, audacia y valentía - en honor a nuestros alumnos, cuyo “moxie” los caracteriza.
Referencias:
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Deloitte. (s. f.). ¿Qué es la industria 4.0? https://www2.deloitte.com/es/es/pages/manufacturing/articles/que-es-la-industria-4.0.htm l
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Unidos. (s. f.). ¿Qué significa ser resiliente? https://www.unidos.com.mx/que-significa-ser-resiliente/