El Programa Estado de la Nación (PEN) presentó este miércoles el Informe Estado Nación 2022.
El Programa Estado de la Nación (PEN) presentó este miércoles 16 de noviembre el Informe Estado Nación 2022 el cual profundiza —desde 1994— sobre el estado del país en temas de desarrollo humano en los ámbitos de equidad e integración social; oportunidades, estabilidad y solvencia económicas; armonía con la naturaleza; y fortalecimiento de la democracia.
Para esta ocasión el informe deja tres mensajes claves:
- La lenta, insuficiente e incierta salida de la pandemia refuerza la normalización de resultados contrarios al desarrollo humano.
- La normalización de resultados contrarios al desarrollo humano evidencia un progresivo abandono del contrato social costarricense.
- El progresivo abandono del contrato social ha creado riesgos de largo plazo en el desarrollo humano, que aún pueden ser enfrentados mediante la acción política democrática.
En concreto, el informe detecta como uno de sus principales hallazgos que el país registró en 2021 un “claro retroceso en materia de equidad e integración social” debido a que la mayoría de los indicadores sociales, como la pobreza, el desempleo y la desigualdad social, permanecieron peor a los niveles prepandemia.
Además, en el ámbito económico se destacó como uno de sus principales hallazgos la caída en inversión del gasto de capital, por parte del Gobierno, como resultado de los elevados niveles de endeudamiento y déficit fiscal del país.
Mientras que en el ámbito ambiental se encontró que el país regresó a patrones de alto impacto tras la pausa coyuntural generada por la pandemia de COVID-19 en 2020. En concreto el consumo energético, la explotación del recurso hídrico y la densificación urbana siguen suponiendo importantes desafíos para el desarrollo verde y sostenible del país.
Adicionalmente, se identificó un aumentó en la cantidad de la población que apoya la democracia, pasando de 35% registrado en 2021 a un 50% en 2022, con la advertencia de que los Poderes de la República, si bien han logrado atender las crisis (fiscal y por COVID-19) continúan sin lograr responder las demandas de la ciudadanía en torno a los problemas estructurales del país.
En esta ocasión, el informe incluye un ejercicio realizado de diálogo social participativo sobre los problemas estratégicos del país, en un intento por identificar “rutas de ejecución” para enfrentar problemas estratégicos del desarrollo humano en Costa Rica. Para ese ejercicio se plantearon cuatro problemas en grupos focales conformados por personas del ámbito académico, de la gestión pública y de organizaciones de la sociedad civil, los cuatro temas fueron: fortalecimiento y financiamiento a los partidos políticos; políticas de empleo y producción; política social selectiva; y política de conservación ambiental, obteniendo resultados mixtos.
El diálogo sobre fortalecimiento y financiamiento a los partidos políticos cerró con acuerdo. La ruta de ejecución incluye reformas específicas y su vínculo con el fortalecimiento de las organizaciones partidarias, e identifica el gran reto para lograr la solución: que los partidos en la Asamblea Legislativa acepten trabajar de manera conjunta en hacer estas reformas.
El diálogo sobre políticas de empleo y producción, específicamente cómo crear más oportunidades fuera de la GAM y de las zonas francas, cerró sin acuerdo. Pese a que hay consenso sobre su urgencia, quienes participaron discreparon sobre el diagnóstico del problema, la naturaleza del problema y las posibles acciones que se requieren para diseñar soluciones.
En cuanto a los diálogos sobre la política social selectiva y de conservación ambiental los resultados fueron mixtos. Hubo acuerdos en los diagnósticos de los problemas, pero quienes participaron no llegaron a trazar una misma ruta de ejecución.
Lea más de los resultados del Informe Estado Nación 2022 en las siguientes notas:
- Costa Rica registró retroceso en equidad en 2021.
- Inversión en infraestructura relativa al PIB cayó a su nivel más bajo en 30 años.
- País retoma patrones de alto impacto ambiental tras “pausa” por la pandemia.
- Crecimiento de áreas protegidas no es acorde con el debilitamiento institucional.
- Grupos más afines a la democracia aumentaron entre el 2021 y 2022.